Londres se ampara en el riesgo de atentados para endurecer sus leyes de asilo
Al mismo tiempo, el Gobierno británico permitirá a personas con cualificación profesional entrar en el país sin trabajo para que puedan encontrarlo una vez allí
El Gobierno británico prepara una revisión de todas sus leyes de inmigración que se resume en dos pilares: "Intransigentes con la inmigración clandestina pero pragmáticos con los inmigrantes económicos". Así, acelerará los trámites de extradición y endurecerá las condiciones para conseguir asilo político escudándose en la necesidad de evitar la infiltración de terroristas en el país, al tiempo que se permitirá a personas con cualificación profesional entrar en el Reino Unido sin trabajo para que puedan encontrar un empleo una vez allí.
En su intervención en el congreso anual del Partido...
El Gobierno británico prepara una revisión de todas sus leyes de inmigración que se resume en dos pilares: "Intransigentes con la inmigración clandestina pero pragmáticos con los inmigrantes económicos". Así, acelerará los trámites de extradición y endurecerá las condiciones para conseguir asilo político escudándose en la necesidad de evitar la infiltración de terroristas en el país, al tiempo que se permitirá a personas con cualificación profesional entrar en el Reino Unido sin trabajo para que puedan encontrar un empleo una vez allí.
En su intervención en el congreso anual del Partido Laborista, que se celebra en Brighton (al sur de Inglaterra), el ministro del Interior, David Blunkett, ha asegurado que "el mundo está más seguro ahora que antes del 11 de septiembre" porque la comunidad internacional ha tomado "medidas para proteger a la población".
En este sentido, Blunkett ha recalcado la necesidad de "luchar contra las falsas aplicaciones del asilo político", de acelerar los trámites de extradición de sospechosos de haber cometido algún delito, dado que los actuales procesos pueden tardar seis o siete años, y de reducir el tráfico clandestino de personas.
Delito de incitación al odio religioso
Además, Blunkett ha explicado que es necesario que se amplíen las leyes para fijar penas mayores para los delitos que tienen motivaciones racistas o religiosas. "Estoy determinado a proteger nuestro país y sus valores democráticos de aquellos que los quieren amenazar", ha indicado el ministro, al tiempo que ha indicado que el país no quiere que la religión "se use para dividir y fragmentar las distintas comunidades en unos momentos tan difíciles como estos".
"Por eso, a petición de la comunidad musulmana, reforzaré las leyes para asegurar que los extremistas no abusen de nuestro derecho a la libertad de expresión para aumentar las tensiones en nuestras ciudades", ha indicado el ministro, que piensa crear un delito "de incitación al odio religioso".
Los ataques por motivos racistas contra personas de la comunidad musulmana han aumentado en el Reino Unido desde los atentados contra Estados Unidos.
En referencia a las leyes sobre inmigración, se va a permitir a los estudiantes extranjeros que se gradúen en el Reino Unido poder solicitar un permiso de trabajo sin necesidad de tener que dejar el país.
Permisos por áreas
El ministro del Interior, David Blunkett, ha señalado además que existen nuevos planes para estudiar con la patronal y los sindicatos el posible potencial de un sistema de permisos por áreas que tienen déficit de empleados. Además, se pondrán en marcha permisos para trabajos temporales.
Blunkett quiere facilitar los trámites para los legítimos solicitantes de asilo y también los permisos de trabajo en áreas como la sanidad y la educación, ya que hay una gran necesidad de contratar enfermeros y maestros.
El ministro del Interior ha asegurado que la lucha contra la inmigración ilegal es una parte muy importante de las leyes de asilo e inmigración, y ha subrayado el deseo del Ejecutivo británico de que su "economía pueda salir beneficiada empleando de forma legal a aquellas personas que están capacitadas".
El titular de Interior espera tener redactada la nueva legislación dentro de dos o tres semanas para presentarla al Parlamento para su correspondiente debate y aprobación.