Los médicos de Madrid recuperarán el pago de sus guardias 10 años después
La Consejería de Sanidad anuncia nuevas medidas para beneficiar a los sanitarios, como el abono de 239 euros más por concepto de guardias y la implementación de un permiso paternal retribuido de ocho semanas
Diez años les ha costado a los médicos de Madrid recuperar el pago total de sus guardias médicas ordinarias. La Consejería de Sanidad ha anunciado este lunes algunas mejoras en las condiciones laborales de los sanitarios del Servicio Madrileño de Salud (Sermas), entre las que se encuentran el abono de las diez horas de guardias al mes que desde la pasada crisis económica no se pagaban. Hace más de una década, las horas de trabajo en el sector aumentaron de 35 a 37,5 semanales, lo que supuso que los facultativos dejaran de percibir 239 euros en sus nóminas a final de mes por concepto de guardias. Una década después, la Comunidad ha atendido a esta demanda y, además, se ha adelantado en poner en marcha el permiso paternal de ocho semanas y ha prometido agilizar los trámites para lanzar las Ofertas Públicas de Empleo (OPE), con las que se prevé estabilizar los contratos de 27.500 profesionales del sector.
Hasta ahora, los médicos del Sermas no cobran la guardia médica al completo. Cada semana trabajan dos horas y media “de gratis”, comenta Manuel Martínez-Sellés, presidente del Colegio de Médicos de Madrid, pero a partir de noviembre la Consejería ha asegurado que no se restarán más esos 239 euros a cada profesional.
La medida no es nueva, su cumplimiento más bien llega con retraso, ya que formaba parte de los acuerdos para la salida de huelga entre el personal médico y la Dirección General de Recursos Humanos del Sermas en 2013, pero estuvo congelada desde entonces a causa de la crisis económica. La consejera de Sanidad, Fátima Matute, ha asegurado que este logro hoy se ha conseguido con “un gran esfuerzo en el Gobierno” regional, en coordinación con Hacienda.
Martínez-Sellés asegura que la actual es una situación “tremendamente injusta”, ya que la decisión de aumentar la jornada laboral ocurrió en un momento puntual durante la crisis económica, aunque, asegura, esta decisión “nunca debió tomarse”. Otras autonomías ya habían revertido la jornada laboral de 37,5 horas semanales, pero en Madrid, a pesar de las constantes quejas del personal médico a la Consejería de Sanidad y a la presidencia de la Comunidad, se han tardado más de lo normal. “Todo esto tenían que haberlo hecho desde hace mucho tiempo”, sentencia.
En lo que sí se ha adelantado la consejería a otras comunidades es en la implementación del permiso paternal retribuido de ocho semanas, que se puede disfrutar de forma continua o discontinua, y que se encuentra en vigor en España desde agosto para padres y madres de menores de ocho años.
Esta medida viene a sustituir el permiso que se otorga actualmente, con igual duración, pero no remunerado, la cual responderá a otra de las demandas de los trabajadores del sector, que es la posibilidad de conciliar la vida laboral y la familiar. Matute ha asegurado que se pondrá en práctica en fechas próximas “independientemente de cómo lo articule el Estado”, que fue multado recientemente por la Unión Europea por incumplir el plazo para aplicar esta legislación.
La consejera de Sanidad, que ha otorgado esta mañana el sello Madrid Excelente al Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid por su buena gestión empresarial, por último, se ha comprometido con agilizar los procedimientos para lanzar una OPE que ayude a estabilizar antes de finales de 2024 a 27.500 profesionales de 115 categorías sanitarias.
A esta cifra, ha sumado otros 3.250 que presumiblemente obtendrán contratos fijos en el primer semestre de 2025, a los que se irán agregando nuevos sanitarios con las convocatorias bianuales que la consejería prevé realizar. Gran parte de los médicos en servicio actualmente tienen contratos de interinidad, con condiciones laborales que no les facilitan la estabilidad laboral y provocan que, en muchos casos, estos no acepten o abandonen puestos muy necesarios para cubrir la demanda del Sermas.
Las OPE se paralizaron con la pandemia de covid-19, pero Martínez-Sellés ha reconocido que hace mucho más tiempo que estas no se realizan. Ahora, una de las demandas de los sanitarios en este sentido es que con las nuevas ofertas no se rompan equipos que durante muchos años han trabajado mano a mano, y que no separen a pacientes de facultativos con los que tienen un historial de seguimiento.
“Sabemos que el 100% no se quedará en sus mismos puestos de trabajo, pero queremos que la mayoría pueda hacerlo”, ha manifestado. Además, se ha quejado de que con los procedimientos actuales muchos médicos con décadas de trabajo para acceder a una plaza fija deban realizar un examen que compruebe sus capacidades. “No tiene sentido”, ha concluido. Por ello, el Colegio de Médicos de Madrid ha pedido a la consejería que actualice los protocolos y tenga en cuenta las necesidades reales del sector.