Valencia arranca el proceso para pedir que la Albufera sea reserva de la biosfera
La Generalitat y los 13 municipios ribereños del lago tienen que alcanzar un consenso para presentar la candidatura
El gobierno local de Valencia, de PP y Vox, ha puesto en marcha este viernes, coincidiendo con la celebración del Día Internacional de los Humedales, el proceso para solicitar a la Unesco que declare las 21.000 hectáreas de L’Albufera reserva de la biosfera. “Hoy iniciamos los trámites formales aunque hace falta un acuerdo de los 13 municipios ribereños del lago y de la Consejería de Medio Ambiente para sacarlo adelante”, ha manifestado el concejal de Relaciones Institucionales y portavoz de la Jun...
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El gobierno local de Valencia, de PP y Vox, ha puesto en marcha este viernes, coincidiendo con la celebración del Día Internacional de los Humedales, el proceso para solicitar a la Unesco que declare las 21.000 hectáreas de L’Albufera reserva de la biosfera. “Hoy iniciamos los trámites formales aunque hace falta un acuerdo de los 13 municipios ribereños del lago y de la Consejería de Medio Ambiente para sacarlo adelante”, ha manifestado el concejal de Relaciones Institucionales y portavoz de la Junta de Gobierno, Juan Carlos Caballero. “Vamos a reunirnos con el resto de municipios y recopilaremos toda la información para sacar adelante la solicitud a lo largo de este año, en que somos Capital Verde Europea”, ha asegurado.
La Comunidad Valenciana cuenta en la actualidad con dos reservas de la biosfera reconocidas por la Unesco pero son compartidas con Castilla-La Mancha: se trata del Valle del Cabriel, que engloba a más de 50 municipios, de los que solo cuatro son valencianos; y del Alto Turia, que incluye a Aras de los Olmos, Benagéber, Casa Altas, Casas Bajas, Chelva, Titaguas y Tuéjar en territorio valenciano, y a la localidad castellano-manchega de Santa Cruz de Moya. Ambos pasaron a ser patrimonio natural de la Unesco entre los años 2019 y 2020.
La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, concretó su intención de presentar la candidatura en la ceremonia de entrega del distintivo que acredita a la ciudad como Capital Verde Europea a lo largo de 2024. En 2010 hubo un intento, bajo el mandato de Juan Cotino (PP) al frente de Medio Ambiente, pero la tramitación es larga y necesita del acuerdo de todos, algo que no llegó a buen puerto.
Organizaciones ecologistas como SEO/BirdLife reclaman un plan de acción “urgente” con medidas como la aprobación y mejora de los planes de gestión del Parque Natural de l’Albufera, un ecosistema “fundamental” para el bienestar humano como otros espacios protegidos como Doñana o el Mar Menor, y advierte de que el lago valenciano está “en peligro de desaparición, como Doñana”.
Las actuaciones de emergencia llevadas a cabo en l’Albufera recientemente han supuesto el aporte de 10 nuevos hectómetros cúbicos para paliar la sequía. Además, de forma simultánea, la Consejería de Medio Ambiente que dirige Salomé Pradas se ha comprometido a avanzar en los Planes de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN), y los Planes Rectores de Uso y Gestión (PRUG) que se requieren para que l’Albufera consiga esta declaración de Reserva de la Biosfera.
Los responsables de SEO/BirdLife insistieron el pasado jueves en que la estación ornitológica de l’Albufera “forma parte de nuestra historia y también de nuestro trabajo de conservación”, y destacó el Tancat de la Pipa como uno de los proyectos de “mayor éxito” por el funcionamiento de un filtro verde en un espacio de alto valor natural.
Pese a que l’Albufera ha sido un refugio durante 2023 para “decenas de miles” de aves acuáticas, el colectivo conservacionista ha avisado de que la situación está “lejos de ser buena”, puesto que ha asegurado que presenta “graves problemas” por la falta de agua y por un “empeoramiento de la calidad de la que llega”.
En esta línea, ha apuntado la necesidad de desarrollar actuaciones “urgentes” como la aprobación del plan de gestión y que está “obligado por su designación como espacio de la Red Natura 2000″, un acuerdo que ha lamentado que lleva “muchos años de retraso”. Y ha pedido que se deriven al lago más agua del plan de cuenca del Júcar y se lleven a cabo acciones de saneamiento que aseguren la calidad del agua y el hábitat del parque.
SEO/BirdLife ha planteado que actuaciones como el Tancat de la Pipa sean replicadas en toda la orilla de la laguna con el objetivo de restaurar los hábitats desaparecidos en el humedal, aumentar la orla de vegetación palustre y asegurar la calidad del agua que entra en l’Albufera.
Las reservas de biosfera son zonas de ecosistemas terrestres o costeros/marinos, o una combinación de los mismos, reconocidas como tales en un plano internacional en el marco del Programa MAB de la Unesco, que sirven para “impulsar armónicamente la integración de las poblaciones y la naturaleza, a fin de promover un desarrollo sostenible mediante un diálogo participativo, el intercambio de conocimiento, la reducción de la pobreza, la mejora del bienestar, el respeto a los valores culturales y la capacidad de adaptación de la sociedad ante los cambios”.