Los Mossos disuelven por la fuerza a activistas pro-Palestina mientras realizaban una protesta ante un edificio de la Generalitat

Los agentes han cargado contra los manifestantes en la sede de Acció, que reclamaban que el Govern cese toda colaboración con Israel

Manifestación de estudiantes en solidaridad con Palestina, este miércoles en Barcelona.Quique García (EFE)

Los agentes antidisturbios de los Mossos d’Esquadra han cargado este mediodía contra un grupo de medio centenar de manifestantes que se habían concentrado ante la sede de Acción, en el Departamento de Empresa, para exigir a la Generalitat que cierre la oficina que tiene en Israel y que cese toda ...

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Los agentes antidisturbios de los Mossos d’Esquadra han cargado este mediodía contra un grupo de medio centenar de manifestantes que se habían concentrado ante la sede de Acción, en el Departamento de Empresa, para exigir a la Generalitat que cierre la oficina que tiene en Israel y que cese toda colaboración con este país. La protesta, organizada por el movimiento Prou Complicitat, ha consistido en una performance en el exterior del edificio, pero también un pequeño grupo ha ocupado durante un par de horas el vestíbulo.

La acción se ha iniciado alrededor de las 10 de la mañana cuando una decena de personas han irrumpido en la sede de Acció -la agencia que trabaja por la internacionalización de las empresas catalanas-, ubicada en el paseo de Gràcia de Barcelona. Paralelamente, en el exterior se han concentrado unas 150 personas, convocadas por el movimiento Prou Complicitat y por el Sindicat de Llogateres, entre otros.

Los activistas han organizado una rueda de prensa en la calle y una performance en que varias personas se han arrodillado, semidesnudas, con los ojos vendados y las manos atadas en la espalda, imitando la situación de los presos palestinos. En ese momento, según explica Txus Blanco, miembro de Prou Complicitat, los Mossos han acordonado la entrada del edificio. Entonces, los agentes han entrado en el edificio y han obligado a salir al grupo de activistas que se hallaban dentro. Posteriormente, los Mossos han cargado contra las personas, algunas de ellas de edad avanzada, que se concentraban en el exterior.

Los organizadores lamentan la acción de los Mossos e insisten en que se trataba de una convocatoria pacífica. Alys Samsong, miembro de Prou Complicitat amb Israel, defiende que la única intención era enviar un mensaje claro a la Generalitat “para que deje de reprimir a través de recursos públicos a activistas propalestinos”. “Hoy ha sucedido un ejemplo muy claro de esta represión. Estábamos realizando la performance de manera no violenta y la policía la ha interrumpido. Nos ha agredido, nos ha empujado de manera muy agresiva y no nos ha permitido seguir con nuestra acción”, denuncia. Carla (32 años), una de las participantes de esta performance, explica que estaba con los ojos tapados cuando de repente ha sentido que entraba la policía. “Han llegado en el momento en el que estábamos más indefensos, arrodillados en el suelo con los ojos tapados”. Otra de las asistentes del exterior de la concentración, bajo el nombre ficticio de Sofia (47 años), cuenta que todos los hechos se han producido mientras se leía un poema en solidaridad con el pueblo palestino. “En un momento tan sentimental y sensible han entrado los Mossos de manera agresiva a echar todos los que estaban dentro”.

Los concentrados han dejado el lugar hacia las 12.30 y se han dirigido a la manifestación estudiantil convocada por el Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans para “denunciar el genocidio que está perpetrando Israel” y en solidaridad con el pueblo palestino. La marcha, en la que han participado varios centenares de estudiantes, ha partido desde plaza Universitat y ha recorrido el centro de la ciudad, hasta la delegación del Gobierno en Cataluña.

Las protestas contra la guerra de Israel que están protagonizando universitarios de varios países, llegó a Barcelona el lunes de la semana pasada, cuando un centenar de estudiantes instalaron tiendas de campaña en el patio del edificio histórico de la Universidad de Barcelona (UB). Hace una semana, el claustro de este campus aprobó la moción en apoyo a Palestina para condenar la situación y exigir que los órganos del gobierno rompiesen las relaciones con el mundo académico, empresarial e institucional del Estado de Israel. Los concentrados afirman que no pararán “hasta que Palestina sea liberada” y asistirán a una nueva manifestación convocada en Barcelona el próximo sábado a las 17.00.

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