Focus se conjura para apuntillar la pandemia con teatro
La empresa celebra 35 años con el mayor esfuerzo de producción de su historia
No es corriente que la presentación de una temporada teatral y del aniversario de una empresa acaben con el presidente de la misma llorando y un teniente de alcalde de Barcelona haciendo una entrañable profesión pública de amistad. Pero así están los tiempos que nos toca atravesar, con tanta emoción desbordada y esa vida recosida que parece que toquemos ya con la punta de los dedos.
Focus ha organizado un acto el viernes en el teatro Goya, uno de los que gestiona, a fin de presentar la programación de la empresa para la temporada que arranca y ...
No es corriente que la presentación de una temporada teatral y del aniversario de una empresa acaben con el presidente de la misma llorando y un teniente de alcalde de Barcelona haciendo una entrañable profesión pública de amistad. Pero así están los tiempos que nos toca atravesar, con tanta emoción desbordada y esa vida recosida que parece que toquemos ya con la punta de los dedos.
Focus ha organizado un acto el viernes en el teatro Goya, uno de los que gestiona, a fin de presentar la programación de la empresa para la temporada que arranca y celebrar el 35 º aniversario de su fundación, y viceversa. El acto, que ha tenido dos de sus momentos culminantes en el estallido emocional de Daniel Martínez, presidente de Focus, al que ha confortado cariñosamente su esposa y socia Amparo, y el parlamento de Jordi Martí, teniente de alcalde de Cultura, que ha elogiado por todo lo alto a Martínez y a su empresa dándole a sus palabras un cálido toque personal, ha sido un repaso de la trayectoria de Focus y un desafiante despliegue de actividades y proyectos para la temporada con un claro mensaje: Focus no sólo no se rinde sino que se conjura para apuntillar la pandemia.
“Paso a paso hemos llegado hasta aquí, a un aniversario redondo de los que marcan una trayectoria consolidada”, ha dicho Martínez desde el escenario (donde luego se han reunido todas las fuerzas vivas de Focus), tras proyectarse un audiovisual que repasaba los hitos de la empresa desde su registro ante notario un lejano 13 de febrero de 1986. Lo que crearon aquel grupo de practicantes y apasionados del teatro, Serveis de l’espectacle Focus SA, ha sido “la clau de volta”, la piedra central, de lo que hoy constituyen 16 empresas, 5 teatros, 4 unidades de producción y 400 personas en nómina, ha enumerado Martínez. En su haber, 328 espectáculos de creación propia, 35.000 funciones en 500 escenarios, 3.200 artistas y creadores contratados, y 13 millones de espectadores.
El presidente de Focus ha reconocido que ha habido ”fracasos” y momentos duros, “tres crisis económicas, y legislaciones adversas varias “que también forman parte de la historia”, pero ha recalcado que Focus lo ha atravesado todo “sin perder nunca su hoja de ruta” apuntalada, ha dicho, en una sólida estructura empresarial y una irrenunciable vocación artística. “Estamos en el peor tiempo de nuestra existencia”, ha continuado y ha advertido de que la batalla no está ganada y “hay toda una época que sigue condicionado”.
Ha hecho balance de la temporada pasada, con 47 espectáculos, 255.000 espectadores, 5 millones de euros y un 71 % de ocupación (del aforo reducido permitido). “Unos resultados insuficientes, un 60 % de una temporada normal, pero una proeza en estas circunstancias”.
Focus, ha añadido churchilianamente ha conseguido salir adelante durante la pandemia a fuerza de “sacrificio, entrega y resistencia”, con “un mínimo de desgaste patrimonial” y “mirando más allá”. Y “aunque aún no estamos en las condiciones de normalidad que pensábamos que ya tendríamos, somos optimistas y pensamos que estamos cerca de la recuperación total de la actividad”.
En ese contexto, Focus “inaugura la etapa de recuperación” y lanza su desafió a la covid, para rematarla con teatro, concebido como vehículo central de la recuperación cultural. “Es el mayor esfuerzo de nuestra existencia”, ha recalcado Daniel Martínez, “20 producciones y 8 coproducciones, 283 artistas, 6 millones de euros de inversión; nuestra radical respuesta a la nebulosa gris de la pandemia y la crisis anímica y económica”. También nuevos proyectos, “un hub de pensamiento”, la Barcelona Artist Factory, y una nueva unidad de producción en Madrid que arrancará con un Tartufo puesto en escena por Ernesto Caballero y encabezado por Pepe Viyuela. Entre las grandes producciones de Focus para la temporada, también un ilusionante El paraíso perdido, espectáculo de Andrés Lima a partir del gran poema de Milton; un Golfus de Roma, con dirección de Daniel Anglès y Carlos Latre en el rôle- titre, y una nueva obra de Jordi Casanovas, Inmunitat, para La Villarroel. La temporada arranca pertinentemente en esa sala con Començar, de David Eldridge, en versión y dirección de Pau Carrió. Seguirán Les irresponables, de Javier Daulte, en dirección de Sílvia Munt; L’oreneta, de Guillem Clua, con dirección de Josep Maria Mestres y Emma Vilarasau de protagonista, o Una teràpia integral, con Àngels Gonyalons y Abel Folk.
En el Goya, Eva contra Eva, que ya ha iniciado representaciones, con dirección de Munt y en el reparto la Vilarasau, Nausicaa Bonnín, Andreu Benito y Àlex Casanovas; El abrazo, dirigida por Magüi Mira; o El gran Comediant de Joel Joan. En el Condal, Assassinat a l’Orient Express, de Agatha Christie en versión teatral dirigida por Ivan Morales, La filla del mar, de Guimerà, en musical; un El mago de Oz a cargo de David Selvas, y un show personal de Loles León. En el Romea, que ha abierto ya con Carrer Robadors, la adaptación de Agustí Villaronga de Clitemnestra, la casa dels noms, de Colm Toibin; La batalla de los ausentes, de La Zaranda; el regreso de José Sacristán y el del Cicerón de Josep Maria Pou; La casa de los espíritus dirigida por Carme Portaceli, 53 diumenges, de Cesc Gay, ;Final de Partida con Jordi Boixaderas y Jordi Bosch; Lo fingido verdadero, de Lope, por Lluís Homar, y una ópera de cámara, Adina o el califato de Bagdad, de Rossini.
Daniel Martínez ha alabado la capacidad de resistencia y rebeldía del sector teatral catalán ante la pandemia que, “ha servido para aumentar el prestigio social de la cultura” en estos tiempos convulsos. Ha destacado que la Generalitat declarara la cultura bien esencial y ha recordado el papel de banderín de enganche que tuvo el festival Grec de 2020 con su defensa de la cultura segura, y que convirtió a Barcelona, con Madrid, “en las únicas capitales del mundo que mantuvieron los teatros abiertos”.