Vehí afirma que la CUP se planteará si debe entrar en el Govern dentro de dos años

Mireia Vehí, diputada de la CUP en el Congreso, ha afirmado este lunes que el acuerdo que los anticapitalistas suscribieron con Esquerra es de mínimos y que, por tanto, no es “válido” para que puedan entrar en el Govern. La parlamentaria ha subrayado que el pacto estaba destinado a desencallar la investidura y que fija un horizonte de dos años para someter al Ejecutivo a una moción de confianza. ...

Mireia Vehí, diputada de la CUP en el Congreso, ha afirmado este lunes que el acuerdo que los anticapitalistas suscribieron con Esquerra es de mínimos y que, por tanto, no es “válido” para que puedan entrar en el Govern. La parlamentaria ha subrayado que el pacto estaba destinado a desencallar la investidura y que fija un horizonte de dos años para someter al Ejecutivo a una moción de confianza. “Si dentro de dos años ha habido un cambio y se ha trabajado bien, la CUP, de forma dinámica, se puede volver a plantear el debate”, ha dicho. Esta es la primera vez que un miembro de la organización fija el eventual ingreso en el Govern, en 2023.

En una entrevista en Els matins, en TV3, Vehí ha urgido a Junts y a ERC a formar un Govern que sea “rápido, serio y efectivo”. “El disparate de la legislatura pasada no es deseable. La situación es extrema”, ha dicho. La diputada ha admitido que entre los dos socios mayoritarios hay escollos —ha citado solo el del Consell de la República— y ha recalcado que el independentismo no puede tirar a la “papelera” el 52% de votos que logró en las elecciones del 14-F. Con todo, se ha mostrado optimista al sostener que parece que Junts “está virando” para tener más disposición y no ir a elecciones. El plazo para la investidura expira el 26 de mayo. Si antes Pere Aragonès no ha sido investido, se convocarán automáticamente elecciones.

Rompiendo con las dinámicas de los últimos mandatos, la CUP alega que ha intentado ser “proactiva” —“Hemos hecho los deberes”, dicen— para alcanzar acuerdos ante la grave crisis social y económica agravada por la covid-19 además de la estrictamente vinculada al ámbito, dicen, represivo. Ante el atasco en las negociaciones, la organización ha impulsado una campaña de actos bajo el lema Responem en la que explican su estrategia política. Fue en uno de esos actos en el que Pau Juvillà, diputado y miembro de la Mesa, afirmó que podían entrar en el Govern dependiendo de si el acuerdo era “profundo” y con “voluntad de transformación”. Su planteamiento, afirma, no es copar “sillas” porque sí, sino para “hacer qué”.

“Juvillà dice que los debates en la CUP son dinámicos. El acuerdo que tenemos no es válido para entrar en el Govern. El pacto de ahora es de mínimos. Si dentro de dos años se ha trabajado bien, se puede volver a plantear”, ha afirmado Vehí, que ha puntualizado que plantea el margen de dos años porque es lo que marca el acuerdo con ERC: “Si hubiera un giro en la legislatura con un referéndum, una banca pública y una energética pública inminentes, la CUP volvería a planteárselo”.

La víspera del primer debate de investidura fallida, la militancia de la CUP votó a favor del acuerdo de legislatura con ERC por un 59%. Sin embargo, el 85,59% de los afiliados consideraron que el pacto debería ser mejorado frente al 12,9% que lo dio por bueno. “No es un acuerdo de gobierno. Es de mínimos para empezar este nuevo ciclo político y la legislatura”, afirmó la diputada.