Aragonès pide a Sánchez ayudas directas para las empresas afectadas por el cierre
El presidente en funciones catalán envía una carta en la que avisa que el confinamiento catalán debe ir acompañado por medidas estatales
El presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, ha remitido este viernes una carta a Pedro Sánchez en el que le reclama acompañar las nuevas restricciones dictadas por el Govern con “ayudas directas” a los sectores de la restauración, el comercio y la hostelería, los más afectados por la actual crisis sanitaria...
El presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, ha remitido este viernes una carta a Pedro Sánchez en el que le reclama acompañar las nuevas restricciones dictadas por el Govern con “ayudas directas” a los sectores de la restauración, el comercio y la hostelería, los más afectados por la actual crisis sanitaria. En la misiva, Aragonès augura un empeoramiento de los datos epidemiológicos durante los próximos días y define la situación como “crítica”. Las nuevas restricciones para frenar la tercera ola de rebrotes de covid ha vuelto a provocar críticas desde el sector empresarial por la falta de ayudas para resarcir los efectos de las restricciones.
“Desde el Gobierno de Cataluña tomaremos las medidas sanitarias que sean necesarias, pero han de ir acompañadas de ayudas económicas que las hagan sostenibles y compensen el sacrificio”, afirma el presidente en funciones catalán. En la carta, Aragonès asegura que la Generalitat ya habría establecido ayudas directas por un importe de 867 millones de euros, pero considera que, pese a que habrá nuevas subvenciones autonómicas “en las próximas semanas”, la mayor responsabilidad en ese sentido debe recaer sobre el Gobierno central, “que recauda los principales impuestos y tiene la mayor capacidad económica de todas las administraciones”. Asimismo, recuerda que otros Estados europeos ya han inyectado recursos públicos directamente en las empresas como fórmula para dar oxígeno a un empresariado que está agotando su liquidez.
Además de la inyección de recursos económicos, el máximo responsable del Gobierno autonómico reclama que el Estado dicte la obligatoriedad del teletrabajo de forma que se reduzca al máximo la movilidad social y el riesgo de propagación del coronavirus. Señala Aragonès que el Ejecutivo central considera opción como voluntaria pese a las “necesidades” de la actual situación, con los datos desbocados. Señala que, de no tener intención de modificar su posición, “faculte inmediatamente a la Generalitat” para que su Govern lo pueda hacer.
Un tercer punto que recoge Aragonès en su carta es la necesidad de prolongar la validez de los ERTE de fuerza mayor más allá del 31 de enero. Ese es un tema que el Gobierno está negociando ya con los agentes sociales, a los que ha planteado de poderlos alargar hasta finales del mes de mayo. Y pagar todas las prestaciones que no ha asumido todavía el SEPE a los trabajadores afectados por un expediente de regulación temporal de empleo.