Cataluña reforzará los equipos de vigilancia epidemiológica con un centenar de nuevos profesionales

Cataluña reforzará las unidades de vigilancia epidemiológica con 115 nuevos profesionales, según recoge el Ministerio de Sanidad en el informe de evaluación de la comunidad para avanzar de fase, datado del pasado 22 de mayo. Estos se suman a los 213 estudiantes de medicina que se encargarán de hacer el seguimiento de los contactos de casos positivos a través de un call center. La directora de Salud Pública, Pilar Aparicio, pone en valor el refuerzo de recursos humanos y el apoyo tecnológico del que disponen los servicios de vigilancia epidemiológica de Cataluña, pero insta también a ava...

Cataluña reforzará las unidades de vigilancia epidemiológica con 115 nuevos profesionales, según recoge el Ministerio de Sanidad en el informe de evaluación de la comunidad para avanzar de fase, datado del pasado 22 de mayo. Estos se suman a los 213 estudiantes de medicina que se encargarán de hacer el seguimiento de los contactos de casos positivos a través de un call center. La directora de Salud Pública, Pilar Aparicio, pone en valor el refuerzo de recursos humanos y el apoyo tecnológico del que disponen los servicios de vigilancia epidemiológica de Cataluña, pero insta también a avanzar en la puesta en marcha de un sistema de volcado automático de la información epidemiológica en la red de vigilancia española (Sivies). Cataluña ha sido protagonista en los últimos días de un intenso baile de cifras de casos y fallecidos en los reportes que se hacen al ministerio y ha llegado a tener cerca de un millar de decesos pendientes de notificar a la red española.

En conjunto, Cataluña sale bastante bien parada en los tres informes que el Ministerio de Sanidad ha publicado a propósito de sus peticiones para que las regiones sanitarias pasasen de fase. El primero de los documentos, datado del 8 de mayo y en el que se respondía a la propuesta de desconfinar la provincia de Tarragona y el Pirineo de Lleida, Sanidad alaba el nivel de integración entre la atención primaria, los hospitales, los servicios de vigilancia epidemiológica y los laboratorios. También ponen en valor la capacidad para hacer pruebas en menos de 48 horas y la localización de contactos. Las recomendaciones de mejora se limitan a proponer ampliar la capacidad de hacer pruebas y monitorizar los indicadores de diagnóstico temprano, sobre todo la tasa de sospechosos en atención primaria en las regiones que quieren pasar a fase 1. En Terres de l’Ebre, por ejemplo, solo se hacía PCR al 7% de los sospechosos en atención primaria y al 30% en hospitales, pero, aunque estas cifras eran bajas, lo compensaban con que los indicadores de trazabilidad de los contactos eran “muy favorables”, recoge el informe.

En este primer informe ya se recoge también la necesidad de articular un mecanismo de notificación diaria al Sivies que será preciso monitorizar.

En el segundo informe, del 15 de mayo, Sanidad celebra la prudencia de Cataluña al no querer desconfinar Barcelona y su área metropolitana por el riesgo de rebrote. En el documento, donde da luz verde a que Girona, la Catalunya Central, Lleida y las comarcas del Garraf y Alt Penedés pasen a fase 1, el ministerio pone en valor el sistema de búsqueda de contactos y de vigilancia epidemiológica, pero vuelve a hacer hincapié en la notificación de casos. “Se está trabajando en mejorar el envío de información al sistema de vigilancia de España con un sistema que se implementará la próxima semana”, sostiene el documento.

La notificación a la red española siempre ha traído cola en Cataluña, pues los datos nunca coincidían con los reportados al ministerio y Cataluña ha estado inmersa en una fuerte polémica los últimos días a causa de la notificación de los fallecidos al ministerio. La comunidad tiene pendientes de notificar cerca de un millar de casos que tiene contabilizados. Los datos que reporta cada mañana el departamento no coinciden con los que trasladan los equipos de salud pública al Ministerio de Sanidad. Esto se debe, según la Generalitat, a un retraso en la comunicación de los datos por parte de los equipos de Salud Pública, que tienen que validar de forma individual cada caso. El ministerio, además, solo acepta fallecidos que hayan tenido una PCR positiva, y no aquellos que solo tengan un cuadro clínico compatible.

En el tercer informe, donde responde a la petición de Cataluña de que Barcelona y su área metropolitana pasen a fase 1, Sanidad contempla los refuerzos de salud pública, pero el Departamento de Salud señala que aún no están contratados.

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