Junts defiende el intento de pacto con el PP y asegura que hablaron de amnistía y referéndum
Josep Rius, portavoz de la formación independentista, insiste en las advertencias de Puigdemont sobre la posibilidad de desvelar el contenido de las conversaciones: “Si tenemos que añadir algo más, lo haremos”
Junts per Catalunya defiende su legitimidad para entablar negociaciones con el PP a pesar de haber apoyado la investidura del socialista Pedro Sánchez. “Tenemos las manos libres para pactar”, ha dicho este lunes el portavoz del partido, Josep Rius. En una rueda de prensa posterior a la reunión de la ejecutiva, Rius ha comentado las informaciones periodísticas que, este fin de semana, apuntaban a que ...
Junts per Catalunya defiende su legitimidad para entablar negociaciones con el PP a pesar de haber apoyado la investidura del socialista Pedro Sánchez. “Tenemos las manos libres para pactar”, ha dicho este lunes el portavoz del partido, Josep Rius. En una rueda de prensa posterior a la reunión de la ejecutiva, Rius ha comentado las informaciones periodísticas que, este fin de semana, apuntaban a que el partido de Alberto Núñez Feijóo estaría dispuesto a conceder un indulto condicionado al expresident Carles Puigdemont dentro de un plan de “reconciliación” en Cataluña. “Junts tiene su agenda propia en Madrid y la vamos a aplicar, le pese a quien le pese”, ha subrayado Rius. “No diferenciamos lo que pedimos en función de si tenemos un interlocutor u otro”, ha abundado; y ha puesto “la ley de amnistía” y la resolución del “conflicto político de Cataluña mediante el derecho de autodeterminación” como prioridades de lo que le exige Junts a quien se sienta con ellos en la mesa.
El portavoz, que también es vicepresidente de Junts, ha apuntado que el suyo es “un partido que habla con todo el mundo” y ha aludido a que “el arma oculta que tiene Junts es la coherencia”. Ha evitado entrar en más detalles sobre el contenido de las conversaciones con el PP y, al ser preguntado explícitamente por sus evasivas, ha negado que exista “un pacto de silencio” con el partido conservador. Junts da continuidad a la advertencia que lanzó hace unos días Carles Puigdemont, quien al referirse a los contactos mantenidos hace meses con el PP dijo: “Todo se sabrá”. Rius ha sostenido el tono este lunes: “Nos reafirmamos en lo que dijo (...). Si tenemos que añadir algo más, lo haremos”. En Junts se ha impuesto la teoría, defendida por Puigdemont, de que tiene los mismos efectos sostener a un presidente del PSOE que cerrar un posible acuerdo con el PP. “No actuamos en función de presiones externas”, ha dicho Rius. “No formamos parte del bloque de gobierno ni tampoco de la oposición”, ha zanjado.
El giro de Feijóo con los indultos ha generado en Cataluña una ola de estupefacción en todo el arco parlamentario. La portavoz del PSC, Èlia Tortolero, y el portavoz de los comunes, Joan Mena, han acusado al PP de “mentir” mientras Carlos Carrizosa, de Ciudadanos, lo señala por “vender” al constitucionalismo catalán. “Es muy grave que el PP sea capaz de incendiar la calle mientras negocia indultos. Es muy grave que se mienta así a la ciudadanía”, ha afirmado la socialista. Mena ha atribuido el giro del PP al miedo a que Junts filtre información sobre las reuniones y lo ha tachado de “partido cínico e hipócrita”. “Usa la mentira para incendiar la calle mientras negocia con Junts lo que criticaba”, ha recalcado. Tras recordar que el PP “demonizó” los indultos, ERC ha puesto también la lupa en Junts y ha pedido “transparencia” para conocer el contenido de las conversaciones. “No exigimos nada, pero nos gustaría el máximo de transparencia posible y saber todo lo que se ha puesto sobre la mesa”, ha afirmado Raquel Sans, diputada y portavoz republicana, que ha achacado el giro popular a cuestiones tan dispares como “alianzas futuras”, o a la voluntad del PP de “torpedear la amnistía”.
En la recta final de la campaña gallega, varios medios —incluido EL PAÍS— publicaron el sábado por la noche, citando a fuentes de máximo nivel del PP, que Feijóo estaba dispuesto a conceder a Puigdemont un indulto (una vez fuera juzgado), con la condición de que este se arrepintiera de los hechos del procés y renunciara a volver a saltarse la legalidad constitucional. Esas fuentes no vinculaban ese hipotético indulto a una negociación de investidura de Feijóo, sino a un plan de “reconciliación” para Cataluña en el futuro, pero la noticia cayó como una bomba, toda vez que el propio líder del PP y su equipo llevan meses criticando los tratos que mantiene el PSOE con los partidos independentistas catalanes. Feijóo ha acusado a Pedro Sánchez de “servil” y de ser una persona sin “honra”, y ha afirmado, en alusión a la ley de amnistía: “Cambiar votos por impunidad es corrupción, y comprar con el dinero de los ciudadanos la presidencia del Gobierno de España es corrupción”.
Puigdemont, que se marchó a Bélgica en 2017 para evitar la acción de la justicia, amenazó el jueves con destapar la caja de los truenos, después de que el Parlamento Europeo aprobara una resolución en la que solicitaba investigar las presuntas relaciones del Kremlin con el independentismo catalán durante el procés. El expresident hizo pública una carta remitida a todos los eurodiputados en la que acusaba directamente al PP de haber inventado un discurso para manchar su imagen y su reputación, interfiriendo en el poder judicial para evitar que el Gobierno lo amnistíe. “Si mi partido hubiera permitido la investidura del candidato del PP, Alberto Núñez Feijóo, o hubiera impedido la de Pedro Sánchez, todos estos espectáculos no se habrían producido”, dijo.
El vicesecretario del PP, Elías Bendodo, afirmó el viernes en Barcelona que no le “constaba” que ningún dirigente de su partido se hubiera reunido con Puigdemont o el secretario general de Junts, Jordi Turull. Hasta ahora, solo se ha hecho pública la reunión que mantuvieron Albert Batet, presidente del grupo parlamentario de Junts, y Josep Rius con Dani Sirera, líder del grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, que acudió acompañado del comunicador Xavier Domínguez a un hotel de Barcelona en agosto. “Era imposible de aceptar”, dijo Sirera recordando las exigencias de Junts y señalando que se trataba de una simple reunión de café. “No pedían la ampliación del aeropuerto y mejoras en Rodalies o una mejor financiación. Solo amnistía y referéndum. Salí de la reunión consciente de que era imposible negociar con Junts. Y que era inviable”.
La portavoz de ERC, Raquel Sans, ha recordado que su partido rechazó desde el minuto cero la llamada del PP para abordar una posible investidura al alegar que ellos no pactarán nunca con quienes rechazan “la amnistía, los del ‘A por ellos’ o la Operación Cataluña”. “El PP no entra en nuestra ecuación. Si quieren participar en la solución”, ha apuntado, “que voten la ley. Es la mejor manera de empezar a solucionar el conflicto poniendo el contador a cero”. ERC sí que ha urgido a Junts a votar ya a favor de la ley de amnistía y ha recordado que se cumple este martes el plazo de dos semanas que pidió para mejorar el articulado. “Exigimos responsabilidad. Mucha gente tiene la vida patas arriba y la ley es importantísima”, ha afirmado la diputada. Sans ha sostenido que la norma ampara de forma suficiente a las personas con procesos del 9-N, el 1-O y las protestas de la “infame” sentencia del procés. “No lo dice solo ERC: lo dice el PSOE, el BNG, Bildu y todos los grupos que la apoyan”, ha afirmado apuntando que lo único que no cubrirá nunca la ley son las “invenciones” o las “posibles prevaricaciones” de los jueces. “No podemos supeditarla a sus ocurrencias. Es importante que sea sólida y robusta” y que pase después, ha subrayado, los filtros posteriores del Tribunal Constitucional y de la Unión Europea.