Sánchez Cogedor, el español liberado tras pasar 15 meses en prisión en Irán, llega a Madrid
“No me lo creo, ha sido muy duro, no sabemos lo afortunados que somos por haber nacido en este país”, ha declarado en el aeropuerto
Santiago Sánchez Cogedor, detenido en 2022 en Irán cuando viajaba a pie hacia Qatar con motivo del Mundial de Fútbol, ha aterrizado este martes en Madrid, tras ser liberado este domingo por las autoridades iraníes. “No me lo creo, ha sido muy largo, muy duro, pero estoy aquí, estoy en mi país. No sabemos lo afortunados que somos por haber nacido en este país”, ha declarado tras llegar al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, rodead...
Santiago Sánchez Cogedor, detenido en 2022 en Irán cuando viajaba a pie hacia Qatar con motivo del Mundial de Fútbol, ha aterrizado este martes en Madrid, tras ser liberado este domingo por las autoridades iraníes. “No me lo creo, ha sido muy largo, muy duro, pero estoy aquí, estoy en mi país. No sabemos lo afortunados que somos por haber nacido en este país”, ha declarado tras llegar al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, rodeado por una gran cantidad de periodistas. Tras recibir numerosos abrazos y muestras de afecto, Cogedor ha leído a los medios de comunicación un diploma que le han entregado los presos iraníes y en el que le mostraban su cariño y reconocimiento.
Sánchez Cogedor, de 42 años, fue detenido el 2 de octubre de 2022 tras visitar en Saqqez, en el Kurdistán iraní, la tumba de Mahsa Amini, la joven que murió mientras se encontraba bajo custodia de la policía de la moral por no llevar colocado el velo como dictan las autoridades iraníes, lo que desató una oleada de manifestaciones que fueron violentamente reprimidas con un saldo de al menos 500 muertos y 17 condenados a muerte. Tras fotografiarse ante la tumba de Masha Amini, el español fue acusado de espionaje por el régimen iraní, aunque nunca se llegaron a presentar cargos contra él.
El recién liberado apenas ha hablado este martes durante tres minutos ante los micrófonos de los periodistas. Vestido con una camiseta de manga corta de color rojo y mochila roja a la espalda, ha reconocido que se sentía “muy despistado” y ha preguntado a los periodistas si sabían que las autoridades le acusaban de espionaje. “¿Sabes que la sentencia era sentencia a muerte?”, ha cuestionado a una reportera. “Pues sobran las palabras”, ha añadido. Ante la pregunta sobre si temió por su vida, ha respondido: “Yo no le debo nada a nadie”. Cogedor no ha querido pronunciarse sobre la justicia o injusticia de la resolución judicial porque, según ha dicho, él no entra en “temas políticos”. Tras la insistencia de los reporteros, ha pedido comprensión, porque ahora comenzaba el tiempo de su familia y de sus amigos. “Vamos a tener tiempo de hablar con todos y cada uno”, ha asegurado.
Minutos antes de que su hijo pisara territorio español, Celia Cogedor, madre del aventurero español, ha agradecido la ayuda del embajador de España en Teherán, Ángel Losada, y ha dicho estar segura de que, sin su trabajo, su hijo no habría podido volver a casa. “Ángel, gracias, serás una de las personas que guarde en mi corazón”, ha declarado, visiblemente emocionada.
Sobre las primeras palabras que su hijo le dijo tras recobrar la libertad, Celia Cogedor ha explicado: “Ayer me dijo ‘mamá, tranquila, ya ha pasado, ¿tú sabes la alegría que siento de saber que voy a utilizar este sufrimiento para ayudar a los demás?”. La madre también ha contado que, una vez que se encontrara con su hijo, quería irse a la cama, porque se siente “agotada”, pero que le ha preparado su comida preferida: “un montón de verduras” y algo de pescado, porque no lo ha comido en este tiempo. “Ya veremos si somos capaces de comer y la emoción no nos puede”, ha reconocido.
La madre del español ha hecho un esfuerzo por atender a los periodistas por su hijo y por los propios reporteros, de los que ha dicho, han sido “un puntal” en la situación que ha vivido la familia en los últimos meses. “Siempre os habéis portado muy bien”, ha agradecido. Sobre el futuro de su hijo, ha dicho: “Piensa seguir caminando, para mi desgracia, creo que es África el siguiente”.
El régimen iraní anunció la liberación de Cogedor el 31 de diciembre. Sus padres, Santiago y Celia, acogieron la noticia con júbilo, pero el Ministerio español de Asuntos Exteriores prefirió ser cauto y no realizó manifestaciones durante las primeras horas del día de Año Nuevo. A las 21.27 de ayer lunes, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, confirmó que ya había salido de Irán, con un mensaje en la red social X (antes Twitter). “Santiago Sánchez vuela ya libre hacia España. Hoy la felicidad es completa”, escribió.
El ministro de Exteriores también se refirió en su mensaje al regreso de Ana Baneira en febrero, una activista que ya fue puesta en libertad después de haber sido detenida durante las protestas en Irán, mientras que Santiago Sánchez permanecía preso. “Por fin Santiago podrá reunirse muy pronto con su familia y amigos en España”, añadió Albares, que también agradeció la labor de la embajada española en Irán y del Ministerio de Asuntos Exteriores.