Defensa eliminará los límites de estatura para acceder a las Fuerzas Armadas
Los aspirantes a militares que soliciten entrar en el Ejército en las convocatorias de 2023 no tendrán que acreditar una altura que supere los 1,55 metros en las mujeres y 1,60 para hombres
Ni por bajos, ni por altos, los aspirantes a militares no estarán sometidos a límites de estatura. El Ministerio de Defensa ha iniciado los trámites para modificar la orden que regula los requisitos para entrar en las Fuerzas Armadas y eliminar de forma general las restricciones que existían hasta ahora. Los mínimos de estatura están fijados en 1,55 metros para las mujeres y en 1,60 metros para los hombres. Tampoco puede acceder quien supere los 2,03 metros de altura. Se prevé que esta modificación comience a aplicarse en las “próximas convocatorias y procesos selectivos de 2023″, según ha inf...
Ni por bajos, ni por altos, los aspirantes a militares no estarán sometidos a límites de estatura. El Ministerio de Defensa ha iniciado los trámites para modificar la orden que regula los requisitos para entrar en las Fuerzas Armadas y eliminar de forma general las restricciones que existían hasta ahora. Los mínimos de estatura están fijados en 1,55 metros para las mujeres y en 1,60 metros para los hombres. Tampoco puede acceder quien supere los 2,03 metros de altura. Se prevé que esta modificación comience a aplicarse en las “próximas convocatorias y procesos selectivos de 2023″, según ha informado este jueves el departamento que dirige Margarita Robles. También se eliminarán esos límites para el acceso a la escala de oficiales del cuerpo de la Guardia Civil.
El cambio exige reformar la orden de 2019 por la que se aprobó el cuadro médico exigible para el ingreso en los centros de formación militar. Los límites de altura sí que mantendrán para hombres y mujeres cuando esta característica constituya “un requisito esencial y determinante” para ocupar destinos en determinadas unidades. La eliminación de estos requisitos busca, según Defensa, avanzar en la igualdad de oportunidades y facilitar la atracción y la captación de talento de las Fuerzas Armadas.
En los últimos años, los requisitos mínimos de altura en el Ejército y otros cuerpos policiales se han ido suavizando, bien a golpe de sentencia judicial, o por el interés del Gobierno de homogeneizarse con las policías de otros países. En 2018, Defensa redujo de 1,60 metros a 1,55 la altura mínima de las mujeres para entrar en el Ejército. La decisión se tomó para ajustarse a una sentencia de 2017 en la que el Tribunal de Justicia de la UE se posicionó en contra de que hubiera unas estaturas mínimas iguales para ambos sexos.
El Tribunal Supremo obligó al Ministerio de Defensa en 2019 a admitir en la Academia Básica del Aire a una aspirante que fue excluida por medir 1,55 metros, cinco centímetros menos que la estatura exigida en la convocatoria a la que se presentó. La mujer superó todas las pruebas, en las que había exámenes de actitud psicofísica, de lengua inglesa, o un reconocimiento médico, pero fue calificada como no apta. En su recurso, la candidata alegaba que la exigencia de un requisito biológico como la altura para acceder a la función pública debía estar justificado. Además, que esa característica no era necesaria para ejercer las funciones que tenía que desarrollar en el centro de formación para el puesto de controlador aéreo del Ministerio de Defensa.
Interior anunció hace poco más de un año que también suprimirían la estatura mínima para entrar en la Policía Nacional a partir de la próxima convocatoria, prevista para este 2023. En el caso de este cuerpo policial, los hombres tenían que medir 1,65 metros de altura como mínimo, y las mujeres 1,60. Estos requisitos físicos sí que se mantienen para grupos especiales como los GEO (Grupo Especial de Operaciones) y los antidisturbios (en los que se incluyen Unidades de Intervención Policial y Unidades de Prevención y Reacción). Por aquel entonces, el ministerio del que es titular Fernando Grande-Marlaska destacó que suponía equiparar a la policía española con otros cuerpos policiales de países europeos, como Francia, Italia, Países Bajos, Finlandia, Eslovaquia o el Reino Unido, entre otros muchos, en los que no hay requisito de altura para acceder a las pruebas de selección.
La media de altura de los jóvenes españoles de 19 años se situaba en 1,76 metros en 2019, tres centímetros más que en 1985. Las jóvenes de la misma edad medían 1,62 metros, medio centímetro más que en 1985, según un estudio que analizó la talla de 65 millones de niños y jóvenes en todo el mundo elaborado por el Imperial College de Londres y que la revista The Lancet publicó en 2020.