El PSOE sacará la reforma de la ‘ley del solo sí es sí’ con la derecha al romperse el bloque progresista

Los socialistas cuentan con más de 285 votos para la toma en consideración parlamentaria el martes sin Unidas Podemos y otros socios

Dirigentes del PSOE y del Gobierno, tras la pancarta del 8-M, en la manifestación de 2020.INMA FLORES (EL PAIS)

El primer paso para afrontar la reforma de los aspectos más polémicos de la ley de libertad sexual o del sólo sí es sí, que han permitido más de 721 rebajas de condenas de delitos sexuales y más de 74 excarcelaciones, se superará en el Congreso este próximo martes con una mayoría de votos de las más holgadas de la legislatura, entre 285 y 287 síes, pero con una división clara y más que simbólica entre el PSOE y sus socios habituales en este mandato en la víspera del 8-M, el Día Internacional de la Mujer. ...

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El primer paso para afrontar la reforma de los aspectos más polémicos de la ley de libertad sexual o del sólo sí es sí, que han permitido más de 721 rebajas de condenas de delitos sexuales y más de 74 excarcelaciones, se superará en el Congreso este próximo martes con una mayoría de votos de las más holgadas de la legislatura, entre 285 y 287 síes, pero con una división clara y más que simbólica entre el PSOE y sus socios habituales en este mandato en la víspera del 8-M, el Día Internacional de la Mujer. Unidas Podemos ya ha avanzado que votará en contra del proyecto retocado y registrado por el PSOE, porque no se han tenido en cuenta las tesis del Ministerio de Igualdad de Irene Montero. Otros aliados, como ERC, EH Bildu o Más País, han avanzado que en esas condiciones de ruptura dentro de la coalición de gobierno les será muy difícil respaldar esa reforma. El PSOE cuenta con el apoyo expresado públicamente de toda la derecha, PP, Vox y Ciudadanos, y de socios frecuentes como el PNV, PDeCAT y Coalición Canaria.

Después de varios meses de discusiones privadas, discretas y difíciles entre varios departamentos del Gobierno encabezados por responsables socialistas y el departamento de Igualdad liderado por Irene Montero, y también de discusiones y presiones más públicas y evidentes, desde primeros de diciembre, el PSOE llegó a la conclusión de que su reforma de algunos artículos de la ley del solo sí es sí para acotar más las penas a ciertos delincuentes sexuales no saldría adelante entre los miembros de la coalición gubernamental y tendría que prosperar con los partidos de la derecha parlamentaria. Esa evidencia se constató hace tiempo, antes de registrar la iniciativa unilateralmente el 6 de febrero, pero ese sector del Ejecutivo y del PSOE se ha dado este tiempo para observar si en sus socios de Unidas Podemos cabía alguna posibilidad de rectificación de sus tesis más maximalistas. No ha sucedido.

En Igualdad y Unidas Podemos mantienen que la propuesta de retoques del PSOE devuelve las penas de ciertos delitos sexuales al Código Penal que tildan como “de La Manada y del PP”. Es su manera de subrayar que supondría una “marcha atrás” en el consentimiento de las mujeres ante ciertas relaciones sexuales no deseadas y en la exigencia de demostrar violencia por esos comportamientos. El PSOE defiende que el consentimiento seguirá estando en el centro de la ley, pero admite que hay que precisar mejor el arco de penas para no facilitar algunas interpretaciones judiciales que con la norma vigente desde octubre han permitido las actuales rebajas y excarcelaciones. Ese debate entre los dos socios del Gobierno no ha avanzado nada en el último mes. El PSOE ya avisó entonces que si UP no flexibilizaba algo sus posiciones, sacaría el proyecto con otros apoyos y es lo que sucederá ahora, con el primer paso el martes en la toma en consideración de esa iniciativa por el pleno del Congreso. El debate final podría alargarse luego hasta casi la campaña electoral en mayo.

Unidas Podemos e Igualdad intentaron, en las semanas más recientes, forzar al PSOE a una reunión para consensuar alguna posición intermedia, pero sin presentar nunca ninguna de las hasta siete alternativas que dicen haber enviado a sus interlocutores. El PSOE sostiene que esas propuestas eran siempre las mismas y no ha permitido siquiera esa cita.

La votación el próximo martes de la toma en consideración de la proposición de ley del PSOE apremia y UP ha querido trasladar mayor presión a los socialistas al avanzar este viernes que si esa es la propuesta que llega al pleno la votarán en contra. El portavoz parlamentario de Unidas Podemos, Pablo Echenique, lo ratificó así en declaraciones en el Congreso: “Si finalmente llega el momento de votar una vuelta al Código Penal de La Manada, nosotros votaremos en contra, pero no queremos que eso ocurra”. Y agregó: “Llevamos dos semanas haciendo propuestas y pidiéndole al PSOE que se siente a negociar. Pensamos que el PSOE debería apostar por un acuerdo con la mayoría feminista de la Cámara, con un acuerdo en el seno del Gobierno con el Ministerio de Igualdad y no apoyarse en el PP”.

Otros aliados habituales del Ejecutivo, como ERC, EH Bildu o Más País, que suman 20 escaños, aún no han expresado pública y formalmente su voto del martes, pero sí llevan semanas avisando de que no estarán en ninguna situación en la que no se cuente con el Ministerio de Igualdad, su titular, Irene Montero, y Podemos y sí, en cambio, con el PP. Y han vuelto ahora a instar a los dos integrantes de la coalición a ponerse de acuerdo antes del martes. No parece que vaya a ser posible superar en dos días lo que lleva enquistado meses.

“Compromiso feminista”

Desde Helsinki, en el final de su segunda minigira europea, Pedro Sánchez ha tratado de rebajar la tensión ante la posibilidad de esta votación dividida. “Estamos hablando de la toma en consideración”, ha minimizado el presidente del Gobierno, informa Carlos E. Cué. “Creo que hay un sentir mayoritario de que tenemos que tomar en consideración la reforma del Código Penal para corregir una buena ley que ha tenido efectos inesperados”. “En cualquier caso”, remató Sánchez, dando por hecho que la coalición seguirá adelante pese a esta discrepancia, “el compromiso feminista del Gobierno es total”.

El sector socialista del Gobierno estaba avisado de la posición de UP desde hace ya unos días, según fuentes del Ejecutivo. Contaban con ello. También anticipan que la reforma saldrá muy refrendada en ese primer filtro del martes, y no solo por la derecha. “La apoyarán PNV, PDeCAT, Coalición Canaria”, apunta un ministro al tanto de las negociaciones. PP, Vox y Ciudadanos, que suman en la derecha 154 escaños con Foro Asturias y los dos ex de Navarra Suma, ya adelantaron su voto afirmativo si es para corregir, como persigue también el PSOE, los llamados “efectos indeseados” de esa ley. Los 120 diputados del PSOE y los de los partidos predispuestos a impulsar ya esos cambios alcanzan 285 votos.

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