Los mensajes a Villarejo: “Si tienes problemas, habla con Cospedal”
EL PAÍS publica el contenido de un informe de la Policía sobre las comunicaciones del comisario con la ex secretaria general del PP y su círculo más próximo
La documentación incorporada al sumario sobre el caso Kitchen revela la prolija relación que el comisario José Manuel Villarejo mantuvo durante años con María Dolores de Cospedal, entonces secretaria general del PP, que este jueves declara en la comisión de investigación abierta en el Congreso por la trama de espionaje al extesorero popular Luis Bárcenas. Un informe elaborado por la Policía Nacional, que no se ha facilitado a los diputados y cuyo contenido reproduce ahora EL PAÍS, destaca el intenso cruce de ...
La documentación incorporada al sumario sobre el caso Kitchen revela la prolija relación que el comisario José Manuel Villarejo mantuvo durante años con María Dolores de Cospedal, entonces secretaria general del PP, que este jueves declara en la comisión de investigación abierta en el Congreso por la trama de espionaje al extesorero popular Luis Bárcenas. Un informe elaborado por la Policía Nacional, que no se ha facilitado a los diputados y cuyo contenido reproduce ahora EL PAÍS, destaca el intenso cruce de llamadas y mensajes del agente con la política y su entorno durante los meses que duró el despliegue irregular, además de vincular estas comunicaciones con anotaciones de las agendas de Villarejo donde se incluyen detalles del operativo ilegal.
Cospedal constituye actualmente el epicentro de la batalla que mantienen la Fiscalía Anticorrupción y el juez instructor Manuel García-Castellón. El pasado julio, el magistrado de la Audiencia Nacional desimputó a la exdirigente popular por la “debilidad” de los indicios contra ella. Pero el ministerio público ha recurrido esa decisión e insiste en señalar la implicación de la ahora ex secretaria general, a la que atribuye un “interés personal” en Kitchen, que tenía el presunto objetivo de robar los papeles sensibles que Bárcenas pudiera guardar de altos cargos del partido.
Los parlamentarios esperan expectantes la cita de este jueves. La comparecencia de Cospedal se suspendió el pasado 2 de junio, apenas unas horas antes de que se celebrase, después de que el juez la imputase. Los diputados podrán interrogarla ahora por los “suficientes indicios de criminalidad” que, según la Fiscalía, siguen existiendo en su contra. De hecho, Anticorrupción esgrime contra la ex secretaria general el informe de la Unidad de Asuntos Internos (UAI) de la Policía sobre las comunicaciones de ella y su entorno con Villarejo, datado el 23 de junio.
“4.30 en Milford”. Las agendas de Villarejo reflejan los profusos contactos que mantuvo Cospedal y su entorno —especialmente su marido, el empresario Ignacio López del Hierro; y su jefe de gabinete, José Luis Ortiz— con el comisario. Según el informe, estos se repitieron durante los meses que precedieron a Kitchen y durante su desarrollo. Los encuentros eran habituales. Y así lo acreditan también los mensajes hallados en un teléfono del comisario, que confirman las anotaciones de sus cuadernos, según manifiestan los investigadores de Asuntos Internos.
Por ejemplo, el 28 de mayo de 2013, después de que EL PAÍS haya publicado los papeles de Bárcenas y con el PP nervioso por el avance del caso Gürtel, el esposo de Cospedal se cruza mensajes con Villarejo para quedar. “El jueves después de comer”, fija López del Hierro. “Ok”, contesta el comisario.
—4.30 en Milford [un restaurante de Madrid] —añade el empresario
—Tendrá que ser a las 16h o a las 18. Tengo cita a las 17 en mi ofi[cina] —responde el policía.
—Es que a las 6 salgo de viaje. Y tengo almuerzo. Si no, el lunes.
—¿Y a las 16 puedes?
—No me da tiempo.
Del Hierro y Cospedal reconocieron al juez sus contactos con Villarejo, pero alegaron que nunca les facilitó datos secretos de Gürtel. También negaron su implicación en la trama de espionaje a Bárcenas: “Kitchen no tiene nada que ver con el PP”, aseguró la expolítica a García-Castellón: “Eso tiene que ver con la Policía”.
“Dame un fijo”. En junio de 2013, la investigación sobre Bárcenas entra en ebullición. El cerco sobre el extesorero se estrecha y, durante los días previos a su primera entrada en prisión, se suceden las llamadas y comunicaciones entre Villarejo y el jefe de gabinete de Cospedal. Así lo destaca el informe de la UAI. “Dame [un número de teléfono] fijo. Te va a llamar Lara a las 21 y preguntará por ti”, escribe Ortiz al policía el 12 de junio.
“Se me ha liado la tarde, ¿mañana por la mañana te llamo desde un fijo a tu oficina?”, le insiste también el asesor el día 20. Una conversación que continúa el 21: “Estoy en un fijo, te lo digo y me llamas. 925...”. Esa jornada, Villarejo anota en su agenda junto al nombre de Ortiz: “Toque para hablar. Aviso de pago pendiente. Queda en comentarlo con la Cospe”.
“¿En la cafetería de siempre?”. Los contactos con el jefe de gabinete, que sorprendieron mucho al juez, prosiguen. El 27 de junio, Bárcenas ingresa en prisión. El 28, el asesor de Cospedal se comunica con Villarejo —en su móvil hallan un simple “ok” remitido por el hombre de confianza de la popular— y el comisario escribe en su agenda junto al nombre de Ortiz: “Varios avisos sobre publicaciones sobre LB. Agradece comentarios”.
El 1 de julio sí será un día más intenso, según el informe de la UAI. Tras volver a poner primero un escueto “ok”, Ortiz envía otro mensaje a Villarejo a las 14.57 para cerrar una cita entre ella y el agente, según las agendas: “¿Puedes venir sobre las 18.00?”. Pero, ante la falta de respuesta de su interlocutor, lo llama dos veces y le insiste de nuevo: “¿Me puedes llamar por favor?”.
—Nos vemos a las 18. ¿En la cafetería de siempre? —contesta por fin el comisario a las 17.13.
—Te digo sitio —responde a su vez el asesor de Cospedal
—Ok.
—Se va a retrasar un poco, te digo sitio en un rato.
Ese día, Villarejo vuelve a reflejar los contactos en su agenda. Junto al nombre de Ortiz, escribe: “Mensa [sic] sobre riesgo de LB [Luis Bárcenas]. Contesta solo ‘ok”. También añade, junto a las siglas “MD” que los investigadores identifican con María Dolores de Cospedal: “Charla larga desde 18.30. Comprende que hay que pagar lo pendiente. Valora que se siga con el tema catalino [sic] y hablará con Chisco sobre los cambios”. Según el informe de la UAI, Del Hierro envía también un mensaje a Villarejo a las 18.51 de este 1 de julio, donde le insta a verse el “miércoles” siguiente. Ese encuentro quedó recogido en los cuadernos del policía.
Llamada de Cospedal el día que se activa Kitchen. Los contactos con Villarejo se multiplican en julio de 2013. El PP vivía un momento crítico ante los rumores de que Bárcenas iba a tirar de la manta —una confesión que se produce finalmente el día 15, cuando la Audiencia Nacional cita a declarar al extesorero—.
Pero antes, el 11 de julio, el Ministerio del Interior activa Kitchen, según el juez. Y esa jornada resulta intensa, según Asuntos Internos. El documento revela un profuso cruce de llamadas entre el comisario y el matrimonio. A las 15.24, Villarejo marca el número de López del Hierro y se produce una conversación de 1 minuto y 49 segundos. A las 15.36, el agente vuelve a telefonear al marido y hablan durante 1 minuto y 4 segundos. A las 15.41, la propia Cospedal contacta con el policía durante 19 segundos. Y a las 15.44, Villarejo llama otra vez al móvil del esposo.
El comisario lo anota todo en su agenda. Junto al nombre de Cospedal, pone: “Muy mosca con la citación. Le aconsejé que llamara a Chisco. Lo hizo más tarde”. Chisco es el apodo de Francisco Martínez, secretario de Estado de Seguridad y considerado el coordinador de Kitchen, con el que también tiene una presunta conversación esa jornada: “Charla de casi 45 minutos. Plan contra LB. Interv. [sic] comunicaciones, registros y citación de mujer e hijo”. Junto a las siglas de López del Hierro (ILH) añade: “Toque porque Chisco me pidió comprobar si la Cospe había pactado ser citada”.
La declaración de Bárcenas se acerca y, el 12 de julio, Villarejo manda un mensaje al marido de Cospedal: “¿Hay un fijo donde llamarte?”. El empresario telefonea entonces al comisario y conversan durante 1 minuto y 12 segundos. El policía lo anota en su agenda: “ILH: Hablar mañana sobre lo que declara el lunes”. Para el lunes 15 de julio se había fijado la cita de Bárcenas ante al juez. De hecho, tras producirse la confesión del extesorero, el comisario llama a las 16.50 de esa jornada a Del Hierro y charlan durante 4 minutos y 6 segundos.
“Te está llamando MDC”. Con Kitchen en marcha, uno de los objetivos de la operación ilegal es captar como confidente a Sergio Ríos, chófer del extesorero. El comisario Andrés Gómez Gordo, asesor de Cospedal en el Gobierno de Castilla-La Mancha, desempeña un papel clave en ello, pues ya conocía al conductor.
El 18 de julio, los protagonistas vuelven a cruzarse mensajes y llamadas, como queda registrado en el móvil de Villarejo, que también lo anota en sus cuadernos. A las 10.28, Ortiz telefonea sin éxito a Villarejo. Ante la falta de respuesta, un minuto después le envía un mensaje —“Llámame cuando puedas, urge un poco”— y a las 11.07 le vuelve a llamar, sin que este descuelgue. A las 11.08 lo intentan también desde el número de la secretaria de la dirigente del PP, pero tampoco consiguen nada. Entonces, interviene López del Hierro, que escribe al policía a las 11.18: “Te está llamando MDC [María Dolores de Cospedal]”.
Villarejo llama por fin al teléfono de la secretaria de Cospedal a las 11.52 y a las 12.07; y habla con alguien casi cuatro minutos. A las 13.09, el comisario contacta con su compañero Gómez Gordo y ambos charlan durante más de dos minutos.
Villarejo refleja ese trajín en su agenda. Sobre Cospedal, apunta: “Varios contactos y posible cita. Al final se arregló por teléfono”. Sobre Del Hierro, escribe: “Aviso sobre contacto con Sergio. Él se encarga de hablar con Andrés Gordo”. Y sobre Francisco Martínez, remacha: “Forzando contacto con chófer LB”.
Según las agendas del comisario, la relación con Gómez Gordo no fue fácil. El 19 de julio, el marido de Cospedal llama dos veces a Villarejo y este apunta en sus cuadernos referencias sobre su compañero: “No se fía de mí y no cree que cumplamos. Lo vamos a usar y tirar”. El día 20, López del Hierro le envía otro mensaje a Villarejo: “Si tienes problemas, habla con MDC”. El 22 de julio, le contesta Villarejo: “Todo ha mejorado bastante. Andi [apodo de Gómez Gordo]. Hoy muy bien. Abz”. Gómez Gordo intervino para facilitar la colaboración de Sergio Ríos, de la que finalmente se encargó Villarejo, que le pagó con fondos reservados.
“Te están intentando localizar”. Los contactos de Villarejo con Cospedal siguen durante los meses que dura Kitchen. Por ejemplo, según Asuntos Internos, Ortiz le escribe un mensaje a las 13.51 del 4 de septiembre de 2013: “Te están intentando localizar”. Al minuto, llaman al policía desde el número de la secretaria y hablan un minuto. En su agenda, Villarejo anota ese día junto al nombre de “Cospe”: “Control de LB”.
El 11 de octubre, el comisario recibe otra llamada desde el número de la secretaria; y anota en sus cuadernos: “Cospe: propone vernos. Lunes. 17.30”. El 6 de noviembre se repite este modus operandi: primero telefonea Ortiz a Villarejo a las 18.27 y hablan durante 33 segundos; a continuación, a las 18.33, el agente recibe una llamada desde el móvil de la secretaria de Cospedal y conversan 37 segundos. Y finalmente, a las 19.43, López del Hierro llama al comisario. Villarejo lo refleja en su agenda: “Cospe: Muy preocupada con los cinco pagos de 200. Me pide por favor que le mantenga informada”.