Despega el segundo avión militar para repatriar a los españoles en Afganistán

Varias comunidades autónomas se ponen a disposición del Gobierno para acoger a los evacuados afganos

Militares españoles embarcan este martes en el segundo de los dos aviones del Ejército del Aire enviados para las labores de repatriación en Kabul.MINISTERIO DEFENSA

El segundo de los aviones militares que el Gobierno había previsto enviar a Dubái para llevar a cabo la primera fase de repatriación de los residentes españoles, el personal de la Embajada y los traductores afganos que han colaborado con el Ejército y en la cooperación española en Afganistán ha despegado en torno a las cinco de la tarde de este martes de la base aérea de Zaragoza, con bastante retraso con respecto a la hora inicialmente programad...

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El segundo de los aviones militares que el Gobierno había previsto enviar a Dubái para llevar a cabo la primera fase de repatriación de los residentes españoles, el personal de la Embajada y los traductores afganos que han colaborado con el Ejército y en la cooperación española en Afganistán ha despegado en torno a las cinco de la tarde de este martes de la base aérea de Zaragoza, con bastante retraso con respecto a la hora inicialmente programada, las nueve de la mañana.

El primero de los aviones partió poco antes de la medianoche de este lunes y llegó esta mañana a Dubái, han confirmado los ministerios de Defensa y Asuntos Exteriores en un comunicado conjunto. Como en el primer caso, la última aeronave es un avión A400M, de la compañía Airbus, con capacidad para 116 soldados. Ambos se posicionarán en Emiratos Árabes Unidos para poder volar en cuanto las condiciones lo permitan al aeropuerto de Kabul y evacuar “a la mayor brevedad posible” a la delegación española, según afirmó a primera hora del martes el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

La tripulación de estos aviones está compuesta por pilotos del ala 31 de Zaragoza y personal del batallón Cooperación Cívico Militar (CIMIC) del Ejército de Tierra y del Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA) del Ejército del Aire, entre otros. “Con este dispositivo se pretende dar respuesta a las difíciles condiciones de la evacuación”, señalan los ministerios, que por motivos de seguridad no ofrecen de momento más detalles sobre el operativo.

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Preguntado en una entrevista en RNE por la situación del personal de la Embajada, que el domingo fue trasladado al aeropuerto de Kabul, Marlaska ha asegurado que el Ejecutivo está en comunicación con ellos, que son su primera “ocupación y preocupación” y ha confirmado que se trata de miembros del cuerpo diplomático y también trabajadores del Ministerio del Interior —agentes de las unidades de intervención policial (UIP) y del Grupo de Operaciones Especiales (GEO)—. ”Nuestra ocupación es sacarlos de allí cuanto antes. No solo a ellos, sino a todas las personas que trabajaron con las unidades españolas y a los familiares de los mismos”, ha indicado el ministro, que ha añadido que el “propósito ineludible” es trasladarlos a España “a la mayor brevedad posible”. La situación de alguno de estos colaboradores afganos es incierta y tras un primer contacto con las autoridades españolas, aguardan indicaciones más precisas, según los testimonios recabados por EL PAÍS, informa Diego Estebanez. El titular de Interior ha afirmado también que los servicios de Defensa y Asuntos Exteriores trabajan “sin descanso, las 24 horas del día” para poder completar con éxito las labores de repatriación.

Marlaska ha señalado también que “se fletarán todos [los vuelos] necesarios” para poder evacuar a los colaboradores afganos que se encuentran en Kabul y ha reiterado el “compromiso ineludible de garantizar la seguridad de todas esas personas que en momentos difíciles colaboraron” con la misión española.

Los planes trazados por el Ministerio de Asuntos Exteriores, que dirige José Manuel Albares, en coordinación con Defensa, Interior y otros departamentos para la repatriación de todo el personal en la capital afgana debieron ser acelerados el domingo ante la ofensiva relámpago de los talibanes. Según fuentes próximas a los trabajadores de la Embajada, desde ese día fueron trasladados ”de urgencia” en helicóptero al aeropuerto y, horas más tarde, llevados a una zona de seguridad próxima al aeródromo de Kabul, en donde continúan. El lunes se vivieron momentos de caos en el aeropuerto y al menos cinco personas murieron tratando de alcanzar los aviones para huir del país. La situación parece haberse estabilizado este martes.

Tras conocerse la salida del segundo avión militar desde España, el presidente Pedro Sánchez ha asegurado que la “repatriación” está “en marcha”. “El Gobierno de España está coordinando todos los trámites para garantizar su seguridad”, señaló en un mensaje en redes sociales.

Acogida en las comunidades

Varias instituciones ofrecieron desde este lunes acoger a las mujeres afganas que puedan llegar a España en el operativo de evacuación puesto en marcha por el Gobierno. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha hablado con Sánchez y ha ofrecido Cataluña para acoger tantos refugiados “como hagan falta”. La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, anunció que el Ayuntamiento de la capital ha puesto a disposición del Ejecutivo 25 plazas, ampliables a 100, en el centro de acogida temporal de emergencias Las Caracolas. En la misma línea se expresó a través de Twitter el presidente de Aragón, Javier Lambán, quien afirmó haberse puesto en contacto ya con La Moncloa para “ofrecer” la “colaboración” del Gobierno regional. También el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha enviado una carta al presidente del Gobierno para ofrecer el apoyo de su comunidad ante la situación en Afganistán, según informa Europa Press.

“Vamos a seguir ofreciendo nuestros recursos y nuestras manos para que esas personas que huyen puedan encontrar un refugio”, aseguró, por su parte, la vicepresidenta de la Generalitat Valenciana, Mónica Oltra, en declaraciones recogidas por la misma agencia. “La Generalitat Valenciana está comprometida, como no puede ser de otra manera, y esperemos que el Gobierno de España tenga en cuenta también este ofrecimiento y que su política de asilo y refugio ofrezca un destino seguro a las personas que, en este momento, a millares, intentan salir del infierno en que se ha convertido Afganistán”, ha añadido.


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