Arrimadas rompe definitivamente con Sánchez tras los indultos y vuelve al bloque con PP y Vox
La líder de Ciudadanos anima a los populares a presentar una moción de censura contra el presidente socialista
Hace tres meses, el pasado marzo, Ciudadanos registró una moción de censura en Murcia contra el Gobierno del PP aliándose con el PSOE que ahora se ve como un pasado remoto. La iniciativa, que se fue al traste provocando un terremoto político nacional que dejó al partido muy tocado, era coherente con la estrategia de Inés Arrimadas al acceder a la presidencia de Ciudadanos, en la que se propuso recuperar la vocación centrista originaria de la formación, capaz de pa...
Hace tres meses, el pasado marzo, Ciudadanos registró una moción de censura en Murcia contra el Gobierno del PP aliándose con el PSOE que ahora se ve como un pasado remoto. La iniciativa, que se fue al traste provocando un terremoto político nacional que dejó al partido muy tocado, era coherente con la estrategia de Inés Arrimadas al acceder a la presidencia de Ciudadanos, en la que se propuso recuperar la vocación centrista originaria de la formación, capaz de pactar a un lado y otro del tablero. En el poco más de un año que lleva en el cargo, Arrimadas estuvo a punto de firmar un acuerdo de Presupuestos con el Gobierno de Pedro Sánchez, y pactó con el Ejecutivo su apoyo a las prórrogas del estado de alarma en la pandemia. Ahora, la líder de Cs ha decidido romper definitivamente con Sánchez tras el “punto de inflexión” que ha supuesto en su relación con el PSOE la concesión de indultos a los líderes del procés, hasta el punto de que anima al PP a presentar una moción de censura contra el presidente socialista, que ella avanza que apoyaría. Cs ha vuelto al bloque con el PP y Vox en plena lucha por su supervivencia.
En el momento más crítico del partido en sus 13 años de vida, en el 5,7% de intención de voto según el CIS y apenas el 3% en estudios de institutos privados, Ciudadanos ha vuelto a la oposición más frontal contra Sánchez, a quien Arrimadas describe como un político sin límites morales y que es capaz de conceder a los partidos independentistas la autodeterminación y la amnistía que reclaman. La relación de Cs con el PSOE ya estaba deteriorada tras el fiasco de la operación murciana, pero ahora la líder de Cs ha dado un paso atrás y promueve una moción de censura para expulsar a Sánchez de La Moncloa, la misma posición que tiene Vox. Aunque en lugar de apoyar la iniciativa de la extrema derecha, Arrimadas presiona al PP para que la registre, ya que su partido no tiene los escaños suficientes para presentarla.
La líder de Cs justificó este martes su presión al PP con el argumento de que la moción reforzará al presidente socialista si la presenta Vox en lugar del PP. “A Sánchez le encanta que la alternativa a él y a su Gobierno Frankenstein sea Vox”, defendió la diputada en TVE, “por lo tanto, si sabemos que va a haber una moción [de Vox], lo lógico es que la presente el primer partido de la oposición, que va a tener muchos más apoyos y que no va a reforzar tanto a Sánchez como sabemos que pasó el año pasado cuando la presentó Vox”. No obstante, la presente el PP o Vox, la moción no tiene números para salir adelante, pero en Cs defienden que es una obligación promoverla a pesar de que no sea viable.
El Rubicón de los indultos
La propuesta de Arrimadas supone un giro estratégico, porque implica romper los puentes con el PSOE, con el que había colaborado hasta ahora. En la dirección de Ciudadanos niegan un cambio de estrategia y explican que su postura obedece al Rubicón que ha cruzado el PSOE con los indultos a los líderes independentistas. “Un Gobierno que concede los indultos es un Gobierno que nos dice que no quiere nada con nosotros, porque esa es una línea roja clarísima”, afirman fuentes de la cúpula. La mayoría de dirigentes de Cs, un partido de origen catalán que nació contra el nacionalismo, discrepa radicalmente de perdonar a los independentistas. “Yo, como catalán, esto que ha hecho Sánchez de los indultos no se lo perdono en la vida”, afirma un veterano miembro de la dirección.
Arrimadas defiende que fue el presidente socialista y no ella quien cegó la vía de entendimiento con su partido cuando decidió sacar adelante los Presupuestos Generales con un acuerdo con ERC. “Es que lo vio toda España, yo estuve hasta el final tendiendo la mano a Sánchez para que no cogiera la mano de Otegi, Junqueras y Puigdemont. Y a él le dio la gana cogerla”, sostuvo este martes en TVE. “Sánchez quiso coger el camino del separatismo, y ahí no hay nada más que hacer”. Por su parte, el líder del PSOE ha instado a la presidenta de Ciudadanos a reflexionar sobre qué espacio político le queda si vuelve a atrincherarse en el bloque de la derecha. “Ciudadanos tendrá que reevaluar cuál es su espacio. Si es de centro y liberal, tiene poco sentido que solo pacte con la derecha. No hay ningún partido liberal en Europa que pacte solo con la derecha y la ultraderecha”, dijo Sánchez el lunes en la Cadena SER.
La iniciativa de Arrimadas ha caído en saco roto en el PP. El secretario general, Teodoro García Egea, le ha respondido que “las mociones de censura a Sánchez se hacen evitando entregar ayuntamientos como el de Murcia o romper gobiernos regionales para dárselos al PSOE y Podemos”. La relación de Cs con los populares también pasa por su peor momento. En encuentros privados, según fuentes del PP, Arrimadas ha pedido al PP que cese la opa hostil que ha lanzado contra su partido, pero el PP le ha respondido que mientras haya una papeleta diferenciada de Cs en las próximas elecciones no tiene intención de cambiar el paso. Fuentes de la dirección del PP descartan presentar una moción de censura y desdeñan la iniciativa de Cs, “al que las encuestas le dan un escaño en el Congreso”.