Ciudadanos asegura tener el compromiso del Gobierno de que no subirá el diésel

El partido se sentará a negociar con el Ejecutivo su apoyo a las cuentas tras aceptar sus exigencias

La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, interviene durante el pleno en el que se debate la moción de censura planteada por Vox.EUROPA PRESS/R.Rubio.POOL (Europa Press)

Ciudadanos se sentará en la mesa para negociar su apoyo a los Presupuestos Generales del Gobierno de coalición. El partido de Inés Arrimadas ha decidido iniciar una negociación con el Ejecutivo para las cuentas después de constatar que el proyecto presentado ayer por Pedro Sánchez y Pablo Iglesias satisface las exigencias que Cs había transmitido a La Moncloa de forma discreta en las últimas semanas. Así lo han confirmado a EL PAÍS fuentes de la dir...

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Ciudadanos se sentará en la mesa para negociar su apoyo a los Presupuestos Generales del Gobierno de coalición. El partido de Inés Arrimadas ha decidido iniciar una negociación con el Ejecutivo para las cuentas después de constatar que el proyecto presentado ayer por Pedro Sánchez y Pablo Iglesias satisface las exigencias que Cs había transmitido a La Moncloa de forma discreta en las últimas semanas. Así lo han confirmado a EL PAÍS fuentes de la dirección de Ciudadanos, que anticipan que su primera decisión es no presentar una enmienda a la totalidad a los Presupuestos. Entre las condiciones que exigió Ciudadanos al Gobierno estaba que no incluyera una subida del impuesto al diésel, algo que sí aparece en el proyecto presentado ayer, pero fuentes de la dirección del partido aseguran tener el compromiso del Ejecutivo de que esta se suprimirá vía enmienda. “No habrá ninguna subida al diésel”, enfatizan estas fuentes.

En conversaciones discretas, Ciudadanos había trasladado al Gobierno un listado de condiciones para sentarse a negociar que “han sido escuchadas”. Así, exigió que no subiera el tipo del 15% en el impuesto de sociedades, que no se incrementara el IVA a la escuela concertada y a la sanidad privada, que no subiera el IRPF a las rentas de más de 130.000 euros (hay una subida a las de más de 300.000 euros, que a Ciudadanos no le preocupa porque “no afecta a la clase media”) y que no se aprobaran alzas al diésel. Todas ellas han sido satisfechas, a juicio del partido, aunque en el caso del diésel, que sí se eleva porque hay una reducción de la bonificación fiscal, Ciudadanos afirma que tiene un compromiso del Gobierno de que no se llevará a cabo. “Aunque ha aparecido en el borrador, Cs ha conseguido el compromiso del Gobierno para que esa subida al diésel quede eliminada vía enmienda”, subrayan fuentes de la cúpula.

El proyecto de Presupuestos incluye un cambio en la fiscalidad verde, con una reducción de la bonificación fiscal del diésel hasta 38 euros por cada 1.000 litros, de forma que el tipo estatal pasa de 30,7 a 34,5 céntimos. La recaudación estimada es de 500 millones en dos años y no afectará al gasóleo de uso profesional y bonificado.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha evitado confirmar el acuerdo con Ciudadanos, aunque tampoco lo ha desmentido. Montero ha asegurado que su ministerio no ha tenido contacto con el partido de Inés Arrimadas, pero que estará encantada de hablar a partir de ahora. Según fuentes de la dirección de Cs, la garantía con la que cuentan parte de La Moncloa. La formación ha negociado directamente con el secretario general de la Presidencia, Félix Bolaños.

Montero sí ha dejado entrever que el Gobierno hará lo posible para llegar a un acuerdo con el PNV, que es su socio de investidura y también se opone a la subida del diésel. El presidente de los nacionalistas vascos, Andoni Ortuzar, ha advertido hoy que esa no es una medida “progresista ni adecuada” y “mina la confianza” del PNV en el Gobierno. “Para nosotros el PNV es un socio estable y por tanto estoy segura de que llegaremos a un acuerdo en esos términos”, ha remarcado después la ministra.

La dirección de Ciudadanos esperaba con mucho interés el proyecto de Presupuestos desvelado ayer, para comprobar si la parte socialista del Gobierno había logrado cumplir con sus condiciones en la negociación con Unidas Podemos. El partido de Arrimadas intervino en las conversaciones entre el PSOE y Podemos desde un segundo plano, transmitiéndole a los socialistas cuáles eran sus líneas rojas, para que estas se respetaran en el pacto con el partido de Pablo Iglesias. Y, en su opinión, lo han conseguido. “Están todas nuestras líneas naranjas, lo que nos permite sentarnos a negociar los Presupuestos”, afirman fuentes de la dirección de Cs.

A partir de ahora, el equipo negociador de Arrimadas se sentará con el Gobierno para tratar de incluir nuevas medidas en las cuentas con las que justificar su voto a favor. De momento, lo que permite que el Ejecutivo haya aceptado sus exigencias de partida es que Cs apoye la tramitación y se siente en la mesa. “A día de hoy, nuestra postura no es todavía un sí a los Presupuestos”, enfatizan esas mismas fuentes.

La principal incógnita es si será posible que el Gobierno saque adelante los Presupuestos con el apoyo de la mayoría de la investidura ―que incluye a ERC― y con Ciudadanos. Esa es la intención de La Moncloa, lograr los máximos votos posibles, pero el partido de Arrimadas siempre ha dicho que Pedro Sánchez tendría que elegir entre una u otra vía, lo mismo que dice ERC. Ahora bien, Ciudadanos ha modulado su posición, y aunque en la dirección siguen viendo “muy complicado” aparecer en la misma foto final que los republicanos, ya no lo descartan de forma tajante. Será más difícil que el pacto englobe a todos si el Gobierno incluye en su negociación con ERC concesiones relacionadas con los presos del procés (como los indultos), algo que a Ciudadanos se lo pondría muy difícil.



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