La asociación de víctimas Covite premia a José María Calleja a título póstumo por su lucha contra ETA
Este galardón reivindica al periodista, que murió en abril por coronavirus, por "defender los derechos de las víctimas del terrorismo"
El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) ha otorgado su XIX Premio Internacional al periodista José María Calleja, que murió el 21 de abril por coronavirus a los 65 años. El reconocimiento le llega a título póstumo por su “dedicación profesional y personal a defender los derechos de las víctimas del terrorismo” y su “lucha contra el terrorismo de ETA y en la defensa de los más vulnerables”. Calleja desarrolló una larga carrera en el ámbito de la comunic...
El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) ha otorgado su XIX Premio Internacional al periodista José María Calleja, que murió el 21 de abril por coronavirus a los 65 años. El reconocimiento le llega a título póstumo por su “dedicación profesional y personal a defender los derechos de las víctimas del terrorismo” y su “lucha contra el terrorismo de ETA y en la defensa de los más vulnerables”. Calleja desarrolló una larga carrera en el ámbito de la comunicación y censuró la violencia etarra durante su etapa al frente de los informativos de la EITB —la televisión autonómica vasca— durante ocho años, algo que le provocó amenazas y le supuso necesitar escolta. También escribió varios libros en los que expuso su rechazo total a ETA y defendía a sus víctimas.
La presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, ha recalcado que los afectados por el terrorismo se encuentran en deuda con este periodista y ha agradecido su implicación con esta causa: “Queremos mostrar públicamente nuestra gratitud por su labor y por habernos acompañado en tiempos muy difíciles”. El premio se entregará el 3 de octubre en el Palacio de Miramar, en San Sebastián, con la asistencia de amigos y familiares de este periodista nacido en León que estudió Historia en Valladolid y llegó al País Vasco a principios de los años ochenta. También fue profesor de Periodismo en la Universidad Carlos III de Madrid y colaboraba activamente en varios medios.
La plataforma de víctimas de ETA ha ensalzado la “posición de minoría absoluta” desde la que Calleja se opuso al terrorismo. Ordóñez ha incidido en que su papel en los medios de comunicación contribuyó a “salvaguardar la democracia frente a quienes intentan sofocarla”. “Perteneció al reducido grupo de ciudadanos que se manifestaban pública y abiertamente en contra del terrorismo cuando nadie lo hacía y sin haber sido víctima directa de ETA. Su oposición al terror sería lo que, con el tiempo, lo convertiría en potencial objetivo de ETA”, ha reivindicado la hermana de Gregorio Ordóñez, concejal del PP en San Sebastián cuando fue asesinado por la banda.
La presidenta de Covite también ha amparado el reconocimiento en el apoyo que les brindó Calleja: “Fue uno de nuestros más fieles amigos y referentes. Nos defendió cuando nadie lo hacía, cuando en Euskadi las víctimas estábamos condenadas al silencio y al ostracismo social tras el asesinato de nuestro familiar. Utilizó el altavoz que le proporcionaba su condición de periodista para darnos voz y defender nuestros derechos”. Asimismo, la asociación también ha recordado cómo Calleja se opuso al franquismo y su papel como “activista por las víctimas de la violencia machista”. El galardón de la edición de 2019 recayó sobre los escritores Fernando Aramburu y Raúl Guerra Garrido, de quienes se alabó su “gran contribución al relato de las víctimas del terrorismo”.
La figura de José María Calleja también tuvo presencia en el homenaje de Estado efectuado el pasado julio a los fallecidos por la pandemia en España. Su hermano, Hernando, realizó uno de los dos discursos ciudadanos en aquel acto. Allí pidió “compasión” para entender “el dolor de los demás” e hizo una alusión a la lucha de su hermano contra la violencia: “La memoria es un deber, el mejor homenaje que podemos hacer es mantenernos unidos en su recuerdo”.