Recordar Hadamar

He dedicado más de una década a investigar y difundir el simbolismo de Hadamar, el manicomio de la pequeña ciudad del Estado Federal de Hessen (Alemania) donde el nacionalsocialismo ejecutó su radical concepción de la eutanasia. Mucho antes de que los nazis decidieran el exterminio de los judíos europeos, comenzaron a matar de forma sistemática a los ciudadanos alemanes aquejados de enfermedades crónicas e incurables y que no encajaban en su concepción de la pureza racial aria. Las cámaras de gas fueron diseñadas para liberarse de la pesada carga de los seres más necesitados e indefensos y, de...

He dedicado más de una década a investigar y difundir el simbolismo de Hadamar, el manicomio de la pequeña ciudad del Estado Federal de Hessen (Alemania) donde el nacionalsocialismo ejecutó su radical concepción de la eutanasia. Mucho antes de que los nazis decidieran el exterminio de los judíos europeos, comenzaron a matar de forma sistemática a los ciudadanos alemanes aquejados de enfermedades crónicas e incurables y que no encajaban en su concepción de la pureza racial aria. Las cámaras de gas fueron diseñadas para liberarse de la pesada carga de los seres más necesitados e indefensos y, después, una vez demostrada su eficacia y eficiencia que diríamos ahora, las emplearon para la “solución final a la cuestión judía”. Hadamar fue la antesala de Auschwitz. Hoy, 26 de marzo, se cumplen 72 años de la liberación del manicomio de Hadamar por las tropas de Estados Unidos, un lugar que deberían visitar los profesionales sanitarios europeos para ver hasta dónde puede llegar la deshumanización de la medicina.— José Antonio García Marcos. Madrid.