Solicitar una beca

Hace poco más de un mes que las clases han empezado. El bolsillo (el de nuestros padres, en la mayoría de casos) continúa resentido después de haber pagado la matrícula de la universidad. “Suerte” tenemos de contar con las becas. Solicitar una acostumbra a ser un proceso lento y costoso. Te encuentras dentro de una web infernal, rellenando huecos con datos personales de todo tipo. Por la complejidad de todo el proceso y la gran cantidad de requisitos que piden, parece que en vez de intentar ayudar pongan las cosas más complicadas para que sean pocos las que las pueden conseguir.— ...

Hace poco más de un mes que las clases han empezado. El bolsillo (el de nuestros padres, en la mayoría de casos) continúa resentido después de haber pagado la matrícula de la universidad. “Suerte” tenemos de contar con las becas. Solicitar una acostumbra a ser un proceso lento y costoso. Te encuentras dentro de una web infernal, rellenando huecos con datos personales de todo tipo. Por la complejidad de todo el proceso y la gran cantidad de requisitos que piden, parece que en vez de intentar ayudar pongan las cosas más complicadas para que sean pocos las que las pueden conseguir.— Helena Arnó Otín. Barcelona.