Reflexión sobre los cuidados paliativos

Soy enfermera de cuidados paliativos. Hace unos días leía la vivencia de una familiar de un enfermo de cáncer en Cataluña. Lo que más me llamó la atención fue la narración del proceso final, vivido en una unidad de cuidados paliativos.

Los cuidados paliativos se responsabilizan de cuidar a personas en momentos de máxima fragilidad, o sea, el final de vida. No se deben caracterizar por lo que dejan de hacer: retirar medicación o hidratación..., sino por lo que hacen: todo aquello que beneficie más al paciente y le permita vivir la última etapa lo mejor posible. Defendemos que es una cien...

Soy enfermera de cuidados paliativos. Hace unos días leía la vivencia de una familiar de un enfermo de cáncer en Cataluña. Lo que más me llamó la atención fue la narración del proceso final, vivido en una unidad de cuidados paliativos.

Los cuidados paliativos se responsabilizan de cuidar a personas en momentos de máxima fragilidad, o sea, el final de vida. No se deben caracterizar por lo que dejan de hacer: retirar medicación o hidratación..., sino por lo que hacen: todo aquello que beneficie más al paciente y le permita vivir la última etapa lo mejor posible. Defendemos que es una ciencia necesaria; sin cuidados paliativos las personas morirían peor de lo que mueren y, aunque parezca paradójico, contribuimos a que logren morir bien. Cuando no es así es un fracaso para la ciencia paliativa y para los profesionales que nos dedicamos a ella.

Lo que leí me hizo reflexionar sobre lo que la sociedad percibe del trabajo que realizamos a diario los profesionales, con muchísima seriedad y dedicación. Si se vive con tanto sufrimiento, algo debemos cambiar.— Cristina Lasmarías.