Gracias por rectificar

Me uno a los elogios enviados por los lectores de El País Semanal (3 de noviembre) sobre el nuevo formato de la revista. Me parece estupendo, más amplio, rabiosamente actual. El Pulso, Así se hizo, La vida a examen..., además de conservar los estupendos reportajes, entrevistas, tendencias, psicología, cómic y, por supuesto, sus columnistas. Pero también me uno a la crítica mostrada por otros respecto al tamaño de la letra en portada.

Veo con agrado que han corregido el problema, porque, como algunos lectores opinan, el uso de la lupa casi era preceptivo. Entiendo que l...

Me uno a los elogios enviados por los lectores de El País Semanal (3 de noviembre) sobre el nuevo formato de la revista. Me parece estupendo, más amplio, rabiosamente actual. El Pulso, Así se hizo, La vida a examen..., además de conservar los estupendos reportajes, entrevistas, tendencias, psicología, cómic y, por supuesto, sus columnistas. Pero también me uno a la crítica mostrada por otros respecto al tamaño de la letra en portada.

Veo con agrado que han corregido el problema, porque, como algunos lectores opinan, el uso de la lupa casi era preceptivo. Entiendo que la revista dominical está concebida para jóvenes y menos jóvenes, incluso para los que portamos nuestras gafas de presbicia como un amuleto, pero aun con ellas era imposible leer el contenido del pasatiempo sin el que nuestro domingo se quedaría huérfano.

Mi agradecimiento por su rectificación, y espero que sigan manteniendo el tamaño de letra de la última publicación, ¡donde la nariz de Rossy de Palma casi parece pequeña! A mí la verdad es que me lo parece, quizá porque yo también soy portadora de un apéndice nasal muy generoso.