El concierto por la libertad
Los ciudadanos queremos el derecho a decidir si el dinero público se ha de destinar a eventos y entidades separatistas o a los dependientes y sus familias, a la educación o a la sanidad. Derecho a decidir si queremos que las escuelas sean para transmitir conocimiento o ideología.
Queremos libertad para elegir una educación bilingüe que respete nuestros derechos lingüísticos. Libertad de expresión para que cualquier ciudadano, sea personaje público o no, pueda expresar sus opiniones sin ser pitado, abucheado, insultado o excluido por el simple hecho de manifestarse contrario al independe...
Los ciudadanos queremos el derecho a decidir si el dinero público se ha de destinar a eventos y entidades separatistas o a los dependientes y sus familias, a la educación o a la sanidad. Derecho a decidir si queremos que las escuelas sean para transmitir conocimiento o ideología.
Queremos libertad para elegir una educación bilingüe que respete nuestros derechos lingüísticos. Libertad de expresión para que cualquier ciudadano, sea personaje público o no, pueda expresar sus opiniones sin ser pitado, abucheado, insultado o excluido por el simple hecho de manifestarse contrario al independentismo. Libertad de pensamiento para que los medios informativos catalanes puedan ofrecer informaciones veraces, imparciales, con datos objetivos y contrastados, y no sean solo la voz oficial, nacionalista e incuestionable.
Mientras todo esto no ocurra, un concierto por la libertad puede ser multitudinario y emotivo para miles de personas pero solo es un evento creado para tapar la falta de libertad.— M. Teresa Ginés.