Dos militares aseguran que sólo tenían batas y guantes para identificar los cadáveres del Yak

Los capitanes enfermeros que han comparecido ante la juez dicen que las autoridades turcas no pusieron pegas a su trabajo, contradiciendo el testimonio del general Navarro, imputado en el caso

Dos capitanes médicos del Ejército que se trasladaron a Turquía tras el accidente aéreo del Yak 42, en el que murieron 62 militares españoles el 26 de mayo de 2003, han declarado esta mañana ante la juez Teresa Palacios que instruye el caso en la Audiencia Nacional que sólo contaron con batas y guantes de látex para identificar y repatriar los cadáveres. Sus declaraciones contradicen algunas de las informaciones de los dos militares de mayor rango imputados en el caso, los generales Vicente Navarro y Juan Antonio Beltrán.

Así lo han puesto de manifiesto fuentes jurídicas tras la declara...

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Dos capitanes médicos del Ejército que se trasladaron a Turquía tras el accidente aéreo del Yak 42, en el que murieron 62 militares españoles el 26 de mayo de 2003, han declarado esta mañana ante la juez Teresa Palacios que instruye el caso en la Audiencia Nacional que sólo contaron con batas y guantes de látex para identificar y repatriar los cadáveres. Sus declaraciones contradicen algunas de las informaciones de los dos militares de mayor rango imputados en el caso, los generales Vicente Navarro y Juan Antonio Beltrán.

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Así lo han puesto de manifiesto fuentes jurídicas tras la declaración como testigos de los capitanes enfermeros González y Couceiro, quienes formaron parte de la comisión médica enviada a Turquía. Treinta de los los 62 cadáveres de los militares muertos en el siniestro fueron erróneamente identificados e indebidamente entregados a familiares que no les corresponden. La Audiencia Nacional ordenó entonces su exhumación para proceder a indetificarlos y entregarlos a sus respectivas familias.

Según el testimonio de estos dos facultativos, el Ejército español se trasladó a Trabzon con batas y guantes esterilizados como único material sanitario para recuperar y trasladar a España los restos humanos. Ni bolsas, ni equipos para autopsias, ni el instrumental necesario para un simple análisis de sangre. Según ellos, nada más llegar los generales les dijeron que los cuerpos ya estaban identificados y que podían regresar a casa.

Durante su comparecencia, que ha durado algo más de una hora sin preguntas del fiscal ni de la juez, ambos capitanes han indicado que no realizaron ningún trabajo sobre documentos y necropsias emitidas. Así, han explicado que desconocían si había 30 cadáveres sin identificar y han señalado que nadie les pidió informes ni durante sus tres días de estancia en Turquía ni a su vuelta a Madrid.

"Ninguna pega" de los turcos

Además, las declaraciones de estos capitanes médicos contradicen algunas informaciones de los dos generales imputados por el caso, como la del general Navarro, que en su momento aseguró que las autoridades turcas no habían colaborado en las tareas de identificación. Los capitanes, por contra, han declarado que los turcos ayudaron a los españoles a recoger y clasificar los objetos personales de los fallecidos y que no pusieron nunca "ninguna pega".

Con estas comparecencias, la juez retoma el caso después de que pasado 10 de marzo declarara también como testigo el teniente coronel médico José del Valle, quien admitió que no pudo realizar ninguna labor que le permitiera investigar sobre las causas del siniestro aéreo. En el caso Yak-42 abierto en la Audiencia están imputados los generales Vicente Navarro y Juan Antonio Beltrán, el comandante Ramírez y el capitán Miguel Angel Sáez.

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