El sector del automóvil rechaza la inclusión de distintivos autonómicos en las matrículas

Las asociaciones de conductores y el sector automovilístico han mostrado sus recelos a la posibilidad, anunciada ayer por el Gobierno, de incluir distintivos autonómicos en las matrículas de los coches. Madrid ha sido por el momento la única comunidad que ha expresado su rechazo a una medida reivindicada hace tiempo por Cataluña.

Ante la avalancha de críticas, la vicepresidenta primera y ministra de la Presidencia del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha aclarado hoy que el distintivo, anunciado ayer por el ministro del Interior, José Antonio Alonso, no será obligatorio duran...

Las asociaciones de conductores y el sector automovilístico han mostrado sus recelos a la posibilidad, anunciada ayer por el Gobierno, de incluir distintivos autonómicos en las matrículas de los coches. Madrid ha sido por el momento la única comunidad que ha expresado su rechazo a una medida reivindicada hace tiempo por Cataluña.

Ante la avalancha de críticas, la vicepresidenta primera y ministra de la Presidencia del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha aclarado hoy que el distintivo, anunciado ayer por el ministro del Interior, José Antonio Alonso, no será obligatorio durante un periodo inicial de "adaptación", un plazo que no ha concretado.

Las críticas proceden de dos frentes, fundamentalmente. Por un lado, el vicepresidente segundo y consejero de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Alfredo Prada, ha exigido al Gobierno que rectifique. La comunidad, gobernada por el PP, no sólo se queja de que la medida no ha sido consensuada, sino que la tilda de "cesión a las presiones del nacionalismo".

El sector, en contra

Además, las principales asociaciones del sector del automóvil han expresado a través de un comunicado conjunto su rechazo a la iniciativa. Estas organizaciones recuerdan que expusieron su postura contraria a esta iniciativa el pasado mes de julio, sin que hasta el momento hayan recibido contestación, y aseguran que la medida representa "un paso atrás".

Las asociaciones sectoriales consideran que la matrícula del vehículo no identifica al conductor, sino al propio vehículo, por lo que debería mantener su carácter neutral. Asimismo, afirman que el distintivo autonómico supone "un notable obstáculo para la comercialización de los vehículos usados, por las resistencias de determinadas provincias a aceptar vehículos matriculados en otras".

Además, recuerdan que la supresión del distintivo provincial en 2000 permitió la agilización del mercado de segunda mano, que desde diciembre de ese año acumula un incremento del 22,7% y el volumen de negocio para este sector se sitúa en 6.700 millones de euros.