Recursos humanos con superpoderes

La empresa Hrider desarrolla un programa para medir el rendimiento, la satisfacción y el talento de la plantilla

Equipo de Hrider con los socios Daniel del Río y Rocío Valenzuela en el centro de la imagen.

Identificar las aptitudes de los trabajadores, estudiar su adaptación al cambio, entender sus expectativas de desarrollo profesional o examinar el clima laboral de la empresa. Son algunas de las muchas métricas que el software de la start-up malagueña Hrider es capaz de analizar. Esta plataforma de gestión de talento cuenta con el apoyo de la inteligencia artificial y es utilizada por más de un millar de empresas de 25 países. “Lo que hacemos es dar superpoderes a los profesionales de recursos huma...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Identificar las aptitudes de los trabajadores, estudiar su adaptación al cambio, entender sus expectativas de desarrollo profesional o examinar el clima laboral de la empresa. Son algunas de las muchas métricas que el software de la start-up malagueña Hrider es capaz de analizar. Esta plataforma de gestión de talento cuenta con el apoyo de la inteligencia artificial y es utilizada por más de un millar de empresas de 25 países. “Lo que hacemos es dar superpoderes a los profesionales de recursos humanos”, cuenta Rocío Valenzuela, fundadora de la firma junto a Daniel del Río. Nacida en 2017, la compañía facturó 1,5 millones de euros en 2023 —un 50% más que el año anterior— y este 2024 se ha marcado el reto de asentarse en Estados Unidos.

La semilla de Hrider se remonta a hace casi una década. Del Río lideraba (y lidera) su propia empresa de programación y un gran hospital con 4.000 empleados le pidió una solución para gestionar su bolsa de empleo. Querían que el orden de las personas que la integraban tuviera en cuenta, además del tiempo de experiencia, otros conceptos cualitativos relacionados con el desempeño laboral. Fue un proyecto complejo que se resolvió con la colaboración de Valenzuela y, aunque finalmente apenas se implantó, prendió una chispa en la cabeza de estos emprendedores. “Investigamos y vimos que solo las grandes multinacionales podían permitirse el lujo de gestionar bien a sus empleados tomando datos y, a partir de ellos, decisiones. Pensamos entonces en desarrollar un software que ofreciera soluciones a empresas de cualquier tamaño y sector para facilitar esa labor”, recuerda Valenzuela. Lo consiguieron y con los primeros clientes en el bolsillo pasaron por la aceleradora Andalucía Open Future, donde profesionalizaron la gestión interna.

Siete años después cuentan con una luminosa sede en el Malaga Tech Park (antiguo Parque Tecnológico de Málaga) y un programa avanzado diseñado para analizar distintos indicadores cualitativos y cuantitativos, desde el rendimiento a las habilidades o la satisfacción. “Las empresas tienen personas, no robots. Y lo que aportan debe ser gestionado desde una perspectiva humanista. Un buen análisis permite muchas mejoras tanto para el trabajador como para la competitividad de la compañía”, subraya Valenzuela. “Unimos matemáticas y felicidad, corazón y cerebro”, insiste la Product Manager de Hrider, licenciada en Comunicación y con 15 años de experiencia en la gestión de proyectos.

Ahora trabajan en 25 países para un millar de empresas que engloban alrededor de medio millón de trabajadores. Hay pequeñas firmas, pero también enormes corporaciones. Vincci Hoteles, Cabify, Freepik, BidaFrama, GoFit, Viajes El Corte Inglés, Wizink Bank, Cruz Roja, Quilmes, Iberia, Pastas Gallo o el Puerto de Algeciras son algunos de sus clientes. No tienen más que pagar una suscripción para poder instalar el software y, a partir de ahí, adaptarlo a sus objetivos. La empresa también ha desarrollado productos que se pueden integrar en otras soluciones de grandes compañías de recursos humanos como Personio.

Para 2024 esperan crecer entre un 30% y un 40% gracias a su desembarco en Estados Unidos, proyecto en el que han estado trabajando durante el último año y para el que cuentan ya con equipo sobre el terreno. “Esperamos un gran impulso allí”, señala Valenzuela, que cree que para el futuro crecimiento de la start-up es “indispensable” mantener las características que les han hecho llegar hasta aquí. Entre otras, contar solo con sus recursos financieros y aplicar la experiencia acumulada a la gestión de su propia plantilla. Para ello, por ejemplo, cada año reparten parte de sus beneficios entre los trabajadores como agradecimiento a su esfuerzo.

Sigue toda la información de Economía y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal

Más información

Archivado En