Solo 11 de los pesqueros que faenaban hasta hoy en aguas controladas por Marruecos recibirán ayudas de la UE

El Gobierno prevé apoyar a otros seis buques, pero alega que en los últimos tres años solo se usaron 21 de las 92 licencias previstas en el acuerdo

Flota pesquera amarrada en el puerto de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz).PACO PUENTES

Solo 11 de los buques españoles que faenaban en aguas controladas por Marruecos al amparo del protocolo pesquero con la UE que expira este lunes recibirán ayudas comunitarias. España obtuvo 92 de las 128 licencias para pesqueros europeos contempladas en el acuerdo que entró en vigor en 2019, pero solo 21 barcos la solicitaron en los tres últimos años, según ha explicado el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. El Boletín Oficial...

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Solo 11 de los buques españoles que faenaban en aguas controladas por Marruecos al amparo del protocolo pesquero con la UE que expira este lunes recibirán ayudas comunitarias. España obtuvo 92 de las 128 licencias para pesqueros europeos contempladas en el acuerdo que entró en vigor en 2019, pero solo 21 barcos la solicitaron en los tres últimos años, según ha explicado el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. El Boletín Oficial del Estado (BOE) publica este lunes la convocatoria de las ayudas, cofinanciadas al 50 % por Bruselas y el Estado español, por un montante total de 302.000 euros (120.000 euros se van a destinar a los armadores y 182.000 para los tripulantes) en 2023.

De los 21 buques que solicitaron licencia en los últimos tres años, apenas la mitad, un total de 11, faenaron al menos durante 20 días en el trienio 2021 al 2023 (el siguiente barco que más faenó solo lo hizo tres días) y cumplen, además, con el requisito fijado por la Comisión Europea de no haber recibido más de 180 días de ayuda por parada temporal en el periodo de 2014 a 2023.

La razón de que sean tan pocos los buques que han hecho uso de esta licencia radica, según fuentes del sector, en que muchos las solicitaban como alternativa por si les fallaban otros caladeros y en que los cánones y requisitos exigidos por Marruecos hacían que no fuera rentable la pesca en esas aguas.

Estos 11 buques (siete de Canarias y cuatro de Andalucía) serían, en principio, los que podrían beneficiarse de las ayudas cofinanciadas por la Comisión Europea y el Gobierno español para los barcos y los tripulantes afectados por el fin del protocolo, a través de la línea denominada de “parada temporal” del Fondo Europeo Marítimo y de la Pesca (FEMP), con el objetivo de agilizar la recepción de las ayudas.

Sin embargo, el Gobierno estudia la concesión de ayudas de Estado (nacionales) para compensar a más barcos afectados por el fin del protocolo, entre ellos seis de Andalucía que han faenado más de 20 días entre 2021 y 2023, pero que han percibido ya el tope de 180 días de ayuda por parada con cargo a fondos europeos, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

“Buscaremos vías para que la ayuda cubra a toda la flota que pescaba en Marruecos”, ha declarado el ministro de Agricultura, Luis Planas, en un comunicado difundido a los medios, donde ha recalcado que el Ejecutivo estudia “ayudas de Estado” para estos buques: “Será una vía más lenta (la de las ayudas de Estado] que la del Fondo Europeo Marítimo y Pesquero (FEMP) pero en todo caso, serán objeto de cobertura”.

El acuerdo de pesca entre la UE y Marruecos ha terminado este lunes con pobres resultados para los pescadores de Cádiz, que defienden que la falta de pescado en el caladero y el elevado precio del combustible han hecho que el acuerdo pesquero no haya sido rentable en este último ciclo: Inés Foncubierta, gerente de la Organización de Productores de Pesca Número 6 explica a Efe que en 2019 se vendieron en la lonja de Barbate 3.700.000 euros de pescado marroquí. En 2022 la cifra bajó a 240.000 y en 2023 solo se ha vendido 20.000 euros. Foncubierta señala, además, que ninguno de los barcos que había pagado la licencia para este último trimestre ha acudido en las últimas semanas a faenar en las aguas marroquíes.

La negociación de un nuevo protocolo de pesca con Marruecos está a la espera de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) se pronuncie sobre el recurso que, a instancias de España, presentó la Comisión Europea contra la sentencia del Tribunal General de la UE que, en septiembre de 2021, anuló el acuerdo vigente por considerar que debería haberse recabado el consentimiento del Frente Polisario, como representante legítimo del pueblo saharaui, al tratarse de un territorio pendiente de descolonización.

El recurso de la Comisión permitió que el acuerdo siguiera aplicándose hasta expirar su periodo de vigencia, este 17 de julio, pero ha aparcado la negociación de uno nuevo hasta que, a finales de este año o principios del próximo, se conozca la sentencia definitiva de los jueces europeos que, previsiblemente, ratificarán los términos de la anterior.

Fuentes gubernamentales han criticado al PP por “meter cizaña” en este asunto “en línea con su habitual hipocresía” y recuerdan que el mayor periodo en el que no estuvo vigente el protocolo con Marruecos y no se pudo pescar en ese caladero fue entre 1999 y 2004, cuando gobernaba José María Aznar. Fue el Gobierno socialista, subrayan, el que retomó la negociación que llevó a un nuevo protocolo en 2007.

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