ING España obtuvo un beneficio de 182 millones en 2021, más del doble que un año antes

La entidad ganó más de 300.000 nuevos clientes en el ejercicio y ya suma 4,2 millones

Ignacio Juliá, consejero delegado de ING España y Portugal, en marzo de 2021.EUROPA PRESS (EUROPA PRESS)

La filial española y portuguesa del banco holandés ING da por superada la parte más dura de la crisis del coronavirus, al cerrar 2021 con un beneficio neto de 182 millones, un 114% más que un año antes cuando las ganancias se redujeron hasta los 85 millones de euros, según ha explicado el banco este miércoles. De esta forma, recupera las ganancias previas a la pandemia, y queda solo dos millones por detrás de lo cosechado en 2019. “Esto no se ha conseguido por el efecto de reducir provisiones, se ha logrado por la buena evolución del negocio ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La filial española y portuguesa del banco holandés ING da por superada la parte más dura de la crisis del coronavirus, al cerrar 2021 con un beneficio neto de 182 millones, un 114% más que un año antes cuando las ganancias se redujeron hasta los 85 millones de euros, según ha explicado el banco este miércoles. De esta forma, recupera las ganancias previas a la pandemia, y queda solo dos millones por detrás de lo cosechado en 2019. “Esto no se ha conseguido por el efecto de reducir provisiones, se ha logrado por la buena evolución del negocio y los ingresos”, ha asegurado Ignacio Juliá, consejero delegado de ING España y Portugal, en una conferencia de prensa telemática.

El beneficio antes de impuestos de la entidad se situó el año pasado en los 267 millones, un 70% por encima de los 157 millones del ejercicio anterior. Esto es, la mejor cifra histórica del banco al superar los 259 millones anotados en 2019. El año ha estado marcado asimismo por la aceleración en la captación de clientes, con la entrada de 307.000 nuevas personas en la cuenta nómina, y la filial española ya suma 4,2 millones. Por la parte de las provisiones, dada la mejora del contexto económico, la entidad las ha reducido un 35% hasta los 99 millones de euros.

El margen bruto fue de 776 millones, con un crecimiento del 12%. Y la rentabilidad sobre recursos propios (ROE) ascendió al 12%, frente al 7,4% de 2020 —el año previo a la pandemia fue del 13,1%—. Esta mejora sustancial, según Juliá, se explica por los crecimientos de los ingresos en banca corporativa (+25%), productos de inversión (+24%) y en el negocio hipotecario (+21%). “2021 ha sido un año de aceleración y en el que hemos visto que estamos preparados para afrontar los retos del futuro”, ha subrayado el consejero delegado de la filial española y portuguesa.

Sobre la tasa de mora, el banco la mantiene a raya: cerró 2021 en el 1,25%, una de las más bajas del sector. Y si se mira solo esta cifra en hipotecas, en ING España se queda en el 0,35%, frente al 3,74% del sector.

Menos incertidumbre

De cara al presente ejercicio, Juliá ha adelantado que la incertidumbre persistirá, aunque en menor medida que el año pasado y, sobre todo, con respecto a 2020. “La normalización de la economía nos favorece. Desde 2008 los tipos han ido bajando y han mermado los ingresos de la banca. Por eso, cuando se reactive la economía y suban los tipos, ayudará al sector y será una bocanada de aire fresco, aunque no hay que anticiparse porque seguimos con tipos negativos”, ha afirmado el directivo.

Durante la presentación, los responsables de la filial de ING han sido cuestionados por la respuesta de la banca al problema de la exclusión financiera de los clientes más mayores. En este caso, por el tipo de clientes de la entidad holandesa, no es una cuestión que les presione a incluir grandes cambios, aunque un 13% de sus clientes tienen más de 65 años, según el banco. “Lo importante es hacer las cosas sencillas para los clientes y ofrecerles alternativas. Con nosotros se puede trabajar desde el móvil, desde la web, por teléfono cualquier día de la semana o en las sucursales que tenemos con un horario muy amplio, ya que están abiertas de mañana y tarde. Somos muy accesibles”, ha enfatizado Juliá.

ING cuenta con 29 oficinas en España y no tiene previsto realizar nuevas aperturas. Y la plantilla supera ya los 1.400 trabajadores, el doble de los que tenía en la Gran Recesión (775 empleados en 2008).

Además, sobre la medida que incluyó ING el pasado ejercicio de cobrar a los depósitos de más de 30.000 euros —afectaba al 4% de los clientes—, el banco ha cifrado solo en 14.000 personas las que han tenido que pagar por ello. “La mayoría se pasaron a la cuenta nómina o ajustaron su saldo. El objetivo no era cobrar comisiones, sino ajustar la estrategia al entorno de tipos”, ha explicado Almudena Román, directora general de banca de particulares de ING España.

Sobre la firma

Más información

Archivado En