Ribera anuncia que el PERTE del agua serán 3.000 millones hasta 2026 y se aprobará este trimestre
El proyecto estratégico ya cuenta con 400 millones de inversión pública en los Presupuestos de 2022
La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha anunciado este miércoles que en el primer trimestre de este año el Gobierno aprobará el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) para la digitalización del sector del agua. Este proyecto estratégico sumará una inversión público-privada de 3.000 millones de euros hasta 2026. En los Presupuestos de este año ya se han incluido 400 millones para transformar los sistemas de gestión hídrica.
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La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha anunciado este miércoles que en el primer trimestre de este año el Gobierno aprobará el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) para la digitalización del sector del agua. Este proyecto estratégico sumará una inversión público-privada de 3.000 millones de euros hasta 2026. En los Presupuestos de este año ya se han incluido 400 millones para transformar los sistemas de gestión hídrica.
Este será el cuarto PERTE que aprobará el Gobierno y se dedicará a la gestión del agua tanto para el ciclo urbano como para el riego y los usos industriales. La intención del ministerio es que mejore la eficiencia, que reduzca las pérdidas en las redes de suministro de agua y que permita el ahorro tanto de agua como de energía. Además, pretende que aumente la seguridad del suministro y contribuya a la seguridad de las infraestructuras hidráulicas.
Ribera ha realizado el anuncio este miércoles en un coloquio celebrado en el marco de la XII edición del Spain Investors Day, un foro organizado por Estudio de Comunicación con la colaboración de las entidades BNP Paribas y Exane BNP Paribas, y que cuenta con el patrocinio, entre otros, de PRISA, el grupo editor de EL PAÍS. En esta edición, ha compartido espacio con José Bogas, presidente de Endesa, que ha subrayado la importancia de la colaboración público-privada. Ambos se han mostrado muy cercanos, justo un año después de que en este mismo foro se atravesasen momentos menos halagüeños, cuando una parte del Gobierno incluso reclamaba la nacionalización de alguna eléctrica en plena escalada de los precios de la luz durante Filomena, el temporal de frío y nieve que azotó el centro de la península Ibérica.
En su intervención, Ribera ha reiterado la negativa de España a la propuesta de la Comisión Europea que incluye a la energía nuclear y el gas natural en la taxonomía verde europea. “Hay que evitar cometer errores y producir señales equivocadas”, ha dicho. En este sentido, la vicepresidenta tercera pidió pensar en el largo plazo y centrar las inversiones en las tecnologías que acerquen a Europa a la plena descarbonización de la economía, fijada como objetivo para 2050.
Sobre el precio disparado de la luz, Ribera ha reconocido ante los inversores internacionales que puede afectar a la competitividad de la industria europea. E instó a la Unión Europea a tomar medidas para paliar la subida del coste de la energía. “Será muy difícil llevar a cabo la transformación si los consumidores finales no sienten que es positiva para ellos”, zanjó la vicepresidenta.
Maroto: “Las previsiones apuntan a un crecimiento sostenido de la economía”
Por su parte, Reyes Maroto, ministra de Industria, Comercio y Turismo, incidió en la jornada en el atractivo del país para atraer a los inversores gracias al plan de recuperación y a las reformas llevadas a cabo por el Gobierno. “España es un destino muy atractivo y ofrece en estos momentos a los inversores confianza, seguridad y certidumbre”, ha enfatizado la ministra.
La crisis del coronavirus sigue latente, especialmente con el impacto de la ómicron, que ha vuelto a aumentar la incertidumbre. Además, afectará también a otras patas importantes de la economía como la crisis en el transporte global, pudiendo agudizar de nuevo los cuellos de botella en las cadenas de suministro. Pese a ello, El Gobierno mantiene la confianza: “Las previsiones para 2022 apuntan a un crecimiento sostenido de la actividad económica y del empleo en España, con el repunte del consumo y la inversión en el plano doméstico, la progresiva recuperación del turismo, el buen desempeño del sector exterior, una buena evolución de las cuentas públicas y, sobre todo, un mercado de trabajo muy dinámico”, ha asegurado Maroto.
Gonzalo Gortázar, consejero delegado de CaixaBank, participó en otra de las mesas de debate del foro y en ella insistió en esta mejora que ya se vislumbra. En su caso, tiró del gasto registrado en tarjetas que en el cuarto trimestre ya fue un 7% superior al de 2019, antes del zarpazo del coronavirus, según los datos del banco. Además, el gasto en tarjetas extranjeras, muy dependiente del turismo internacional, ya empataron con los niveles prepandemia en la parte final del año.
Pese a ello, la actividad económica todavía sigue lastrada: “Ómicron es una incertidumbre en el corto plazo evidentemente, por lo que puede impactar en la demanda, por ejemplo en el turismo. Aunque preocupa más cómo puede afectar en la cadena de suministro: Asia tiene una política de cero covid y puede volver a haber parones que afecten al transporte”, ha señalado Gortázar.
Plan de recuperación
En el foro se ha destacado asimismo la importancia del plan de recuperación de los fondos europeos que se destinarán a transformar la economía española. Según Maroto, hasta finales de diciembre el Ejecutivo ya ha autorizado 22.124 millones de euros, el 91% de lo asignado para el año pasado. Para el restante, el Gobierno incluyó una disposición en los Presupuestos para poder movilizarlos en 2022.
El consejero delegado de CaixaBank ha señalado a este respecto la importancia de que los fondos terminen llegando a la economía real, aunque ha insistido en que lo fundamental es que se distribuyan bien. “Es más importante repartir los fondos de manera adecuada que hacerlo demasiado rápido”, ha dicho Gortázar.
Por su parte, el presidente de Mapfre, Antonio Huertas, ha señalado la necesidad de contar con todos los grupos de interés para trabajar por una mayor sostenibilidad. Y el presidente del Instituto de Crédito Oficial (ICO), José Carlos García de Quevedo, ha explicado que la nueva estrategia del organismo “toma como referencia el marco sobre clima y energía para 2030″ desarrollado por la Comisión Europea. De hecho, el ICO ya ha realizado ocho emisiones de bonos sociales y tres de bonos verdes por un importe de 5.550 millones: “Somos muy transparentes sobre los proyectos a los que se destina ese dinero y en cómo se mide su impacto social y medioambiental”.
Otra de las patas para la recuperación, según la ministra, es el acuerdo entre agentes sociales y Ejecutivo en la reforma laboral, que todavía se tiene que aprobar en sede parlamentaria. “Es muy bueno para España, para el crecimiento económico y para el empleo. Por eso pedimos a las fuerzas políticas que lo aprueben próximamente”, ha reclamado Maroto, que también ha destacado el papel clave del tejido productivo: “Una de las grandes fortalezas de España son sus empresas, líderes en sectores que pueden servir de motor para impulsar nuestra economía”.
Este dibujo positivo de los próximos meses se basa principalmente en el buen desempeño del mercado laboral, el mejor termómetro para medir la recuperación según la ministra. De hecho, si se utiliza el PIB, la economía española terminará previsiblemente este ejercicio todavía por debajo de los niveles prepandemia. Sin embargo, si se mira el mercado de trabajo, ya se ha recuperado todo el empleo perdido durante la pandemia gracias a la ayuda de los ERTE en la parte más dura de la pandemia y al proceso de vacunación. “Hemos conseguido recuperar, en menos de año y medio, los niveles de empleo previos a la pandemia, frente a los 12 años que tardamos en la anterior crisis financiera”, subrayó la ministra ante los inversores.
Crisis de la carne
Maroto, a la salida del foro, ha sido cuestionada asimismo sobre la crisis desatada tras las declaraciones del ministro Alberto Garzón a un medio británico, en la que se ponía en duda la calidad de parte de la carne que exporta España. No quiso atizar aún más el debate, y dijo que se trata de una polémica que se está utilizando de una manera electoral por el PP con las elecciones en Castilla y León en ciernes.
“La calidad de nuestras carnes y de las exportaciones en conjunto de nuestra industria agroalimentaria es excelente. Somos un país que exporta a más de 100 destinos y reivindico el éxito de la marca España, y reivindico la calidad y excelencia de los productos españoles, que son parte del éxito y del posicionamiento que tienen las empresas españolas en el mundo”, zanjó Maroto. Ribera, por su parte, ha asegurado que “Garzón no tendría que dimitir por sus palabras”.