Seat cerrará la planta de Martorell cinco días por falta de semiconductores
La compañía asegura que la demanda del modelo Cupra se encuentra actualmente en niveles anteriores a la pandemia
El fabricante de automóviles Seat cerrará la planta de Martorell (Barcelona) los días 17, 20, 21, 22 y 23 de diciembre a causa de la crisis en el suministro global de semiconductores. Durante el cierre, los trabajadores se acogerán al expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que la compañía tiene en vigor desde septiembre. Fuentes de Seat han explicado que a partir del 24 de diciembre empezará el periodo habitual de vacaciones de Nav...
El fabricante de automóviles Seat cerrará la planta de Martorell (Barcelona) los días 17, 20, 21, 22 y 23 de diciembre a causa de la crisis en el suministro global de semiconductores. Durante el cierre, los trabajadores se acogerán al expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que la compañía tiene en vigor desde septiembre. Fuentes de Seat han explicado que a partir del 24 de diciembre empezará el periodo habitual de vacaciones de Navidad y que la producción se retomará el 10 de enero. En este sentido, la empresa ha acordado los días 3, 4 y 7 de enero como días de jornada industrial, y el 5 y 6 se enero son festivos.
La empresa ha asegurado que la demanda del modelo Cupra se encuentra actualmente en volúmenes anteriores a la pandemia y que está haciendo “todo lo posible” para entregar los vehículos a los concesionarios cuando dispone de semiconductores. Ha puesto como ejemplo que las tres líneas de producción de la planta de Martorell trabajaron el pasado 7 de diciembre y “no descansaron durante el puente”.
La dirección de Seat planteó en septiembre expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) de nueve meses —del 27 de septiembre al 30 de junio— para su personal de producción en los centros de Martorell, El Prat de Llobregat (Barcelona) y Barcelona por la escasez global de semiconductores. Fue semana después de que el consejero delegado de Seat, Wayne Griffiths, admitiera que la crisis de los microchips tendría un impacto en las cuentas de la marca española de Grupo Volkswagen. La compañía convocó a los sindicatos para negociar