El turismo quiere extender el verano a noviembre para remontar las pérdidas
Las comunidades tratan de captar visitantes mediante cheques, campañas publicitarias y eventos deportivos o culturales
Las comunidades y la industria turística se han conjurado este año para alargar al máximo la temporada. El objetivo pasa por seguir atrayendo viajeros hasta, al menos, el mes de noviembre para remontar las pérdidas que ha supuesto la pandemia para el sector. Cataluña, Andalucía, Canarias, Comunidad Valenciana o Baleares se han volcado en la búsqueda de más turistas a través de bonos, campañas internacionales o eventos deport...
Las comunidades y la industria turística se han conjurado este año para alargar al máximo la temporada. El objetivo pasa por seguir atrayendo viajeros hasta, al menos, el mes de noviembre para remontar las pérdidas que ha supuesto la pandemia para el sector. Cataluña, Andalucía, Canarias, Comunidad Valenciana o Baleares se han volcado en la búsqueda de más turistas a través de bonos, campañas internacionales o eventos deportivos y culturales. Con ese tiempo extra en otoño, Administraciones y empresas buscan compensar el hueco que ha dejado el turismo extranjero, que en julio fue un 55,5% inferior a los niveles anteriores a la pandemia.
Andalucía. La comunidad se ha erigido este verano en el principal destino de España, acaparando el 45% de la demanda nacional y con ocupaciones superiores al 80% en agosto. Las cifras, en algunos casos por encima de las mejores expectativas, hacen que el Gobierno regional y ciudades como Sevilla, Granada o Córdoba piensen que la inercia de los meses estivales se consolidará en octubre. La comunidad andaluza ha previsto campañas hasta Navidad.
Sevilla, después de dos años consecutivos sin Semana Santa y Feria —que representan el 17% de su PIB—, afronta con esperanzas la llegada del otoño. “Además del termómetro que supone el fuerte tirón de la demanda nacional del turismo de sol y playa, nos mueve al optimismo la recuperación de vuelos internacionales y la revitalización de los grandes congresos a partir de otoño”, señala Antonio Muñoz, delegado del área de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo de Sevilla. La ciudad celebrará grandes eventos presenciales, como el primer encuentro de destinos turísticos de España o la segunda edición del Congreso Mundial del Turismo. El sector, no obstante, es cauto y recuerda que la facturación del verano no da para compensar las pérdidas acumuladas de más del 70% de la pasada temporada.
Cataluña. La irrupción de la quinta ola de la covid-19 llevó a la Generalitat a plantearse cómo exprimir al máximo el verano. “Se recomendaba no viajar a Cataluña, e hicimos un gabinete de crisis en el que aprobamos una partida extraordinaria de 500.000 euros para la promoción en el extranjero y otros 100.000 para una campaña publicitaria dirigida al mercado doméstico”, explica la directora general de Turismo, Marta Domènech. Ante las restricciones aéreas con algunos países, se optó especialmente por el turista senior de Francia, Holanda, Alemania o Bélgica que acude en coche a los campings. Según Domènech, “existen indicios de que hay interés en seguir viniendo en otoño”.
Alargar la temporada no va a ser sencillo en destinos familiares que dependen de las vacaciones escolares, como la Costa Daurada y la Costa Brava. “Pero tenemos que retomar acciones para intentar desestacionalizar, ahora que todo el mundo empieza a asumir que la covid forma parte de nuestras vidas”, destaca Berta Cabré, presidenta de la Federación de Empresas de Hostelería de Tarragona. En esta demarcación perciben un aumento de reservas de campistas para las próximas semanas y están promocionando el turismo vinculado a eventos deportivos y a la celebración de Halloween.
En la ciudad de Barcelona, la ocupación ha rondado el 50% en los hoteles abiertos (el 43% sigue clausurado). Xavier Mercé, concejal de Turismo, destaca que la promoción tiene que pasar “por utilizar al máximo la agenda cultural que empieza ahora y crear un puente entre el verano y la Navidad”.
Baleares. Las islas centran sus esfuerzos desde hace años en la tarea de desestacionalizar el sector turístico. Este año se ha intensificado ese trabajo. “Todos los esfuerzos están encaminados a alargar la temporada”, indica el consejero de Turismo, Iago Negueruela. A partir de septiembre se verá el rédito de la convocatoria de campañas publicitarias internacionales con las compañías aéreas, en la que se han invertido 2,5 millones, para garantizar la conectividad entre las islas y destinos extranjeros. A ella se sumará otra por la misma cuantía, a punto de cerrarse, para atar la conexión con ciudades peninsulares más allá de noviembre. “Estas dos convocatorias permitirán garantizar la conectividad, que es básica para mantener la planta hotelera abierta. Hay que trabajar en octubre y noviembre para garantizar más cotización a los trabajadores fijos discontinuos de nuestras islas”, señala Negueruela, que apuesta por el impulso del turismo de congresos, deportivo y cultural, para el que augura que será “un buen otoño”.
Comunidad Valenciana. Los empresarios de la región buscan alargar todo lo posible la actual temporada para compensar los cinco primeros meses del año, de bajísima ocupación. Toni Mayor, presidente de la patronal hotelera Hosbec —que aglutina 80.000 plazas— reconoce que el comportamiento del mercado en los próximos cuatro meses es una incógnita. La asociación sigue muy pendiente de si España continúa o sale de la lista ámbar del Reino Unido, el gran mercado emisor de turistas de Benidorm, y confía para animar los próximos meses en el bono-viaje que la Generalitat valenciana ha dispuesto para 2020-2021, con 16 millones de inversión, para escapadas de fin de semana de los valencianos y que se activa de nuevo el 15 de septiembre. También confían, aunque en menor medida, en los viajes del Imserso y en otros paquetes de turismo senior. Pero la gran apuesta de la Generalitat pasa por los 13.000 nuevos bonos que sacará para el último cuatrimestre, con los que cubre hasta el 70% de los servicios turísticos contratados por los valencianos (con un máximo de 600 euros).
Luis Martí, dirigente de la Confederación de Empresarios Turísticos de la Comunidad Valenciana, con representación de 40.000 plazas de hostelería y hotelería, coincide en que el bono-viaje ha estimulado mucho la demanda nacional y fían la prolongación de la campaña a acciones promocionales, que ya negocian con las entidades públicas, para captar al visitante de negocios y cultural. “Hemos tenido buenas ocupaciones en verano, pero los primeros cinco meses del año han sido una ruina, así que intentaremos alargar la temporada todo lo posible”, explica Martí. A escala internacional, buscan acciones de promoción en mercados como el italiano, el francés o el de Países Bajos.
Información elaborada por Eva Sáiz, Josep Catà, Lucía Bohórquez y Cristina Vázquez.