El Tesoro de EE UU acusa a Suiza y Vietnam de manipulación de divisas
La advertencia del Gobierno de Trump puede desembocar en la imposición de aranceles
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha acusado este miércoles a Suiza y Vietnam de manipular sus monedas para obtener ventajas comerciales indebidas, y ha pedido a China, país con el que está enzarzado desde hace meses en una encarnizada guerra comercial, ser más “transparente”. “Vietnam y Suiza manipulan sus monedas”, ha anunciado mediante un comunicado el Tesoro, tras evaluar el comportamiento macroeconómico de 20 de sus principales socio...
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha acusado este miércoles a Suiza y Vietnam de manipular sus monedas para obtener ventajas comerciales indebidas, y ha pedido a China, país con el que está enzarzado desde hace meses en una encarnizada guerra comercial, ser más “transparente”. “Vietnam y Suiza manipulan sus monedas”, ha anunciado mediante un comunicado el Tesoro, tras evaluar el comportamiento macroeconómico de 20 de sus principales socios comerciales entre julio de 2019 y junio de 2020.
Otra decena de países, incluidos Alemania, Japón e Italia, se hallan bajo vigilancia, en una lista de supervisión especial a la que se han sumado Taiwán, Tailandia y la India, y de la que ha salido Irlanda. Desde el pasado mes de enero, Washington no considera ya que China manipule el renmimbi, nombre oficial de su moneda, pero el país sigue bajo vigilancia.
La acusación es una medida muy poco habitual que puede desembocar en la imposición de sanciones y aranceles, a no ser que la disputa se resuelva mediante negociaciones.
“Al menos parte de la gestión [de Suiza y Vietnam] del tipo de cambio durante los cuatro trimestres [desde julio de 2019] hasta junio de 2020, y en particular de la intervención cambiaria, tenía como objetivo evitar ajustes efectivos de la balanza de pagos”, explica el Tesoro (Ministerio de Economía de EEUU) en el comunicado. A Vietnam, además, se le acusa de intentar buscar una “ventaja competitiva desleal en el comercio internacional”.
Para incurrir en la categoría de manipulador, un país debe tener un superávit comercial con EEUU de al menos 20.000 millones de dólares, una intervención en moneda extranjera que exceda el 2% del PIB y un superávit en cuenta corriente que supere también ese porcentaje.
Al igual que el frenesí diplomático desplegado en Oriente Próximo por la Administración saliente, podría sorprender en principio una decisión de tal calibre -la tercera en el Gobierno de Donald Trump-, en pleno proceso de transición y ante el inminente relevo presidencial en la Casa Blanca. Pero el movimiento del Tesoro venía siendo anticipado por muchos analistas, en un momento en que la pandemia altera los flujos de comercio y cuando el déficit de EE UU se amplía con respecto a sus socios.
En 2019, Washington aplicó la misma etiqueta a China, por primera vez desde 1994 y en medio de las negociaciones comerciales bilaterales, pero luego retiró esa acusación formal.
Se espera que la acusación a Suiza y Vietnam provoque negociaciones bilaterales de cada uno de los afectados con Estados Unidos, un diálogo en el que podría implicarse el Fondo Monetario Internacional (FMI), y en el que Washington buscará “eliminar las ventajas comerciales injustas que resultan de las acciones” de esos países, según la nota del Tesoro. Si el intento no resulta, el siguiente paso sería la adopción de sanciones. Está por ver si la nueva Administración del presidente electo Joe Biden mantiene catalogados así a ambos países, como defienden muchos sindicatos y el ala más progresista de los demócratas.
Según Steven Mnuchin, secretario del Tesoro, el toque de atención a Suiza y Vietnam persigue “salvaguardar el crecimiento económico y las oportunidades para los trabajadores y negocios estadounidenses”.
El Tesoro ha incluido además a diez de los principales socios comerciales de Estados Unidos en una lista de supervisión especial por sus prácticas monetarias: China, Japón, Corea del Sur, Alemania, Italia, Singapur, Malasia, Taiwán, Tailandia y la India. Los tres últimos -Taiwán, Tailandia y la India- aparecen en esa lista por primera vez, mientras que abandona el listado Irlanda.