España perdió este verano el 83% del turismo internacional por la pandemia

Francia desbanca a Reino Unido como el país del que proceden más visitantes

Madrid -
Un parque de caravanas en Castellón, este lunes.Domenech Castelló (EFE)

El turismo español batió máximos en 2019 con la llegada de más de 83 millones de turistas. Y este año va camino de cerrar otro récord, pero por la caída: en los nueve primeros meses apenas han llegado 17 millones. En la temporada más importante del año para el sector, los meses de junio a septiembre, llegaron 6.250.000 visitantes extranjeros, un retroceso del 83% frente a los 37 millones del verano anterior, según ha publicado este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los turistas franceses fueron los que más confiaron en España y su número cayó un 63%, mientras que los estadouni...

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El turismo español batió máximos en 2019 con la llegada de más de 83 millones de turistas. Y este año va camino de cerrar otro récord, pero por la caída: en los nueve primeros meses apenas han llegado 17 millones. En la temporada más importante del año para el sector, los meses de junio a septiembre, llegaron 6.250.000 visitantes extranjeros, un retroceso del 83% frente a los 37 millones del verano anterior, según ha publicado este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los turistas franceses fueron los que más confiaron en España y su número cayó un 63%, mientras que los estadounidenses fueron los más escépticos y el 96% evitó la península.

Javier Gándara, presidente de la Asociación de Líneas Aéreas, asegura que España no ha sido una excepción y que la caída del tráfico internacional ha sido generalizada. “Una parte del turismo [que venía a España] se ha ido a otros destinos, como Portugal o Grecia, pero la mayoría se ha quedado en casa o ha viajado dentro de su país”.

Las consecuencias económicas serán devastadoras a final de año. Este sector contribuyó en 2018 a la generación del 12% del PIB español, hasta 147.000 millones de euros, según la última cuenta satélite elaborada por el INE, y agrupó a 2,6 millones de empleados. Pero este año, el gasto turístico internacional durante el verano se ha recortado un 86% por la pandemia y entre enero y septiembre acumula una caída del 75%. En total, 55.800 millones de euros tirados por la borda en los nueve primeros meses del año.

Desde la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos reconocen que el sector no tiene esperanza de recuperarse con la campaña de Navidad debido a las restricciones de la segunda ola. “Es una lacra que vamos a tener en los próximos meses”, dice Jorge Marichal, presidente de la confederación. “Los confinamientos de Alemania y Reino Unido van a hacer muy difícil que en los próximos meses podamos tener visitantes extranjeros, en una época tan importante para el país, sobre todo en zonas como Canarias, donde el invierno es temporada alta”.

La reapertura económica y la bajada de la incidencia del coronavirus en julio, permitió que el turismo español se recuperase parcialmente durante ocho semanas de verano. En julio y agosto llegaron un 70% menos de turistas que en los mismos meses de 2019, cifras razonables frente a la desaparición de la llegada de extranjeros que se registró entre abril y junio. Pero el aumento paulatino de contagios en el país, llevó a Reino Unido y Alemania, entre otros, a aconsejar a sus habitantes a mediados de agosto no viajar a España.

Las consecuencias llegaron en septiembre, cuando la cifra interanual de turistas extranjeros volvió a caer, hasta el 87%. “Estas recomendaciones tienen muchas consecuencias. La mayor parte de los paquetes vacacionales no aplican sus seguros si el destino no está aconsejado por las autoridades”, asegura Javier Gándara.

Según el dirigente de la patronal de las aerolíneas, pese a las recomendaciones de estos gobiernos, fueron Alemania y Reino Unido los que mantuvieron el tráfico aéreo durante los meses de verano. Pero los turistas por excelencia han sido los franceses, de los que cuatro de cada 10 han continuado viniendo a España pese a la situación sanitaria. En total, entre julio y septiembre llegaron casi dos millones de visitantes galos (-67% respecto al verano pasado), 850.000 alemanes (-82%), 800.000 británicos (-90%) y 310.000 italianos (-85%). Por otra parte, el turismo transatlántico prácticamente ha desaparecido y apenas llegaron 37.000 estadounidenses (-96%).

Baleares es, por mucho, la Comunidad más afectada por el hundimiento del turismo este año. Entre enero y septiembre perdió casi el 90% de sus turistas, en un archipiélago en el que el 77% de los empleos de verano de 2019 estuvieron relacionados con el turismo. La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca, que agrupa a 850 hoteles del millar que hay en la isla, asegura que a día de hoy solo están abiertos 69. “No podemos hablar de una temporada de verano como tal, simplemente tuvimos unas semanas de actividad desde mediados de junio”, dicen desde la asociación. Tras las recomendaciones de Alemania y Reino Unido, tuvieron una “cascada de cancelaciones” que, además, provocó una caída de precio en las habitaciones.

Al hundimiento del turismo en Baleares le sigue Cataluña, que perdió el 77% de los visitantes extranjeros, Andalucía (-75%), Comunidad de Madrid (-72%) y Comunidad Valenciana (-71%).

Los viajeros son más ahorradores

Más allá de la caída de turistas, en la pérdida económica también influye su menor gasto. El desembolso medio por persona y viaje cayó entre junio y septiembre un 23%, hasta los 875 euros, al igual que el gasto medio diario de los turistas, que se redujo un 26%, hasta los 115 euros, debido a la bajada de precios para atraer a los clientes, pero también a que los turistas que más han caído este verano son los que tenían que contratar alojamiento. El número de extranjeros que se hospedaron en septiembre en lugares de pago, como hoteles, hostales o viviendas de alquiler, se redujo un 90%; mientras que los visitantes que durmieron en casas de su propiedad o de amigos y familiares se redujo un 66%.

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