Felipe VI destaca la importancia de revitalizar el mercado único europeo con “igualdad de condiciones para las empresas”
El Rey reclama en la clausura de la cumbre empresarial “seguir extremando todas las precauciones” ante el coronavirus y subraya “la necesidad de afrontar con una perspectiva europea” la crisis económica
El rey Felipe ha sido el encargado de cerrar la cumbre empresarial organizada por la patronal CEOE tras ocho jornadas en las que han intervenido representantes de los sectores económicos más relevantes de España. En su mensaje, Felipe VI ha recordado que la crisis, “en su inicial y fundamental dimensión sanitaria, aún está presente” por lo que ha animado a “seguir extremando todas las precauciones”. El jefe de Estado, ...
El rey Felipe ha sido el encargado de cerrar la cumbre empresarial organizada por la patronal CEOE tras ocho jornadas en las que han intervenido representantes de los sectores económicos más relevantes de España. En su mensaje, Felipe VI ha recordado que la crisis, “en su inicial y fundamental dimensión sanitaria, aún está presente” por lo que ha animado a “seguir extremando todas las precauciones”. El jefe de Estado, que ayer inició en Canarias junto con la reina Letizia una gira en la que recorrerán todas las comunidades autónomas, ha señalado que los empresarios son conscientes de “lo severa y global de esta crisis, así como de la necesidad de afrontarla con una perspectiva europea y con visión de corto, de medio y también de largo plazo”.
Frente a “una pandemia sin precedentes en nuestra historia reciente”, Felipe VI ha estimado que existe “una gran oportunidad para avanzar en los cambios” que necesitan las economías “y adaptarlas a las nuevas oportunidades”. También ha celebrado que el foro haya motivado “reflexiones sobre el papel que debe desempeñar Europa, mejorando su gobernanza a través de la revitalización del mercado único con igualdad de condiciones para las empresas”. El Rey también ha citado “la necesidad de acelerar la unión bancaria y la del mercado de capitales, sin olvidar el necesario impulso a las políticas europeas destinadas al fortalecimiento del tejido empresarial e industrial, con especial atención a las pymes”:
“Nos jugamos mucho, y en el mercado global las cosas se mueven muy rápido; aprovechemos todas las herramientas posibles a nuestro alcance, sin perder tiempo y con la ambición estratégica de lograr siempre mayores cotas bienestar, de prestigio e incluso de liderazgo”, ha exhortado el Rey a los empresarios, de quienes ha dicho que son “fieles” en la defensa del “papel del diálogo social, junto a los sindicatos, como herramienta necesaria para la modernización” del tejido productivo. “Estoy seguro de que la sociedad española valora vuestros mensajes encaminados a propiciar una recuperación en todos los ámbitos que ayude a la iniciativa privada y que contribuya al fortalecimiento de la actividad económica”, ha añadido.
Felipe VI ha elogiado la iniciativa de CEOE y ha destacado que la cumbre haya incluido a una gran multitud de sectores económicos. “Todos sin excepción, del turismo al automóvil y del transporte a la construcción y la energía, pasando por el sector agroalimentario, las finanzas, el comercio o las infraestructuras”, ha dicho el rey Felipe, “son necesarios en la arquitectura de nuestra economía y en la coyuntura actual que tanto nos preocupa”. El discurso lo ha dirigido desde la sede de la patronal en Madrid, acompañado en la mesa por la vicepresidenta tercera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño; del presidente de Inditex, Pablo Isla (quien intervendrá el jueves en las conclusiones de la cumbre); y Antonio Garamendi, presidente de CEOE quien, como anfitrión del encuentro, ha introducido el discurso del Rey con una defensa de la responsabilidad social de las empresas ante la crisis, de la vocación europeísta de los patrones españoles y de su apoyo a la Corona.
Geopolítica y demandas autonómicas
La octava jornada del encuentro ha arrancado a primera hora de este miércoles con una mesa dedicada a la geopolítica en la que han participado Javier Solana y Josep Piqué, “exministros ambos, y además de varias cosas”, según los ha presentado Antonio Garamendi. Solana, que ocupó varias carteras en los Gobiernos socialistas de Felipe González antes de ser también alto representante de la UE en Política Exterior y secretario general de la OTAN, es actualmente presidente del Center for Global Economy and Geopolitics de Esade. Su intervención ha arrancado recordando que, a raíz de la Gran Recesión, “los empresarios españoles han hecho un esfuerzo muy importante de internacionalización en los últimos años”. Un camino que ha aplaudido y para el que estima que “es imprescindible tener una Europa más cohesionada”.
La pandemia, ha dicho Solana, favorecerá una tendencia que ya arrastraba el mundo: “Posiblemente iremos a una globalización más suave en los próximos años”. El trasfondo es “una tensión creciente entre las dos grandes potencias del momento, Estados Unidos y China”. Y el reto global “es evitar que se produzca una nueva guerra fría” en un momento de retroceso del multilateralismo. Aunque la UE, a juicio de su ex alto representante, está “en buena posición” para interpretar el papel de tercera potencia, también ha recordado que desde que estalló la crisis no se ha reunido el G-20 ni el G-7.
Piqué, exministro en la etapa de José María Aznar y actual editor de Política Exterior, ha coincidido en los crecientes “problemas de gobernanza global” en un mundo “bipolar”, con China y Estados Unidos echando un pulso. Menos claro tiene el papel de Europa -puede ser “protagonista”, pero también “actor de reparto” o incluso quedarse como “actor secundario” frente a otras potencia emergentes como India, Rusia, Irán o Turquía- aunque ha recordado que fuera de la Unión Europea, la situación de España sería infinitamente peor. “Fomentar el euroescepticismo me parece un error”, ha asegurado. De Bruselas llegará mucha ayuda, pero ha advertido que “Europa es un proyecto político, no solo económico” y que “no hay solidaridad sin responsabilidad”.
Los dos expertos también han coincido en señalar a la revolución digital y al cambio climático como grandes retos pendientes de la economía y de la sociedad en su conjunto. Entre Washington y Pekín, ha dicho Piqué, “va a haber tensiones militares (…) pero sobre todo la pugna es tecnológica”. China, ha recordado Solana, forma en sus universidades anualmente a ocho veces más científicos que EE UU. Una rivalidad que ha servido para recordar la mala posición de la que parte España y para dar un tirón de orejas a las empresas: “España se gasta en investigación menos que otros países de Europa, pero la contribución a la investigación del sector privado es prácticamente cero”, ha asegurado Solana.
En ese sentido, Piqué ha pedido repensar en incentivos para fomentar la investigación privada. Siempre en un marco de colaboración con el sector público, que ambos han defendido, el exministro de Ciencia y Tecnología del PP (antes ocupó las carteras de Industria y Exteriores) ha destacado que en el ámbito privado “el concepto fundamental es la responsabilidad social de las empresas, ir más allá de los estrictos intereses de los accionistas”. Solana ha recordado la interrelación de la pandemia con otros problemas, por lo que ve compatible “que las inversiones que se hagan tengan un carácter válido para el cambio climático”. Un asunto en que también ha sido contundente Piqué: “Las empresas tenemos una enorme responsabilidad para evitar que el Planeta se contamine”.
Tras la intervención de los dos expolíticos, la segunda mesa de la jornada se ha centrado en los problemas locales al contar con la visión de las patronales autonómicas integradas en CEOE. Casi todos los intervinientes han incidido en los temas que han dominado el encuentro desde que arrancó el 15 de junio. El rechazo al anuncio de derogación de la reforma laboral, los llamamientos al diálogo social y la defensa de las ayudas a las empresas como medida más eficiente para la protección de empleo. Tampoco han faltado reivindicaciones territoriales -como la falta de AVE en Galicia o la exigencia de un nuevo modelo de financiación desde la Comunidad Valenciana- y la petición unánime de la extensión de los ERTE más allá de este mes, que paralelamente el Gobierno y los agentes sociales están negociando. En este último aspecto han puesto un acento espacial las comunidades más afectadas por la caída del turismo.
Tras arrancar el lunes 15 de junio con una jornada dedicada a los sectores financiero y energético, la cumbre Empresas españolas liderando el futuro ha acogido durante ocho sesiones a representantes de los sectores más relevantes de la economía española. Una vez clausurado de forma oficial el encuentro por Felipe VI, este jueves restará una mesa de conclusiones en la que, junto al presidente de CEOE, estará el presidente de Inditex, Pablo Isla.
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