Pemex duplica sus pérdidas en el primer semestre de 2015
La petrolera estatal acumula 11 trimestres de números negativos atribuidos a la caída del precio del crudo y la fortaleza del dólar
Petróleos Mexicanos (Pemex) sigue en caída libre. La petrolera estatal de México ha duplicado sus pérdidas en el primer semestre de 2015, según consta en sus resultados de la primera mitad del año. Los directivos de la compañía han atribuido esta mala racha a la caída del precio del barril de petróleo, la fortaleza del dólar estadounidense con respecto al peso mexicano, así como al exce...
Petróleos Mexicanos (Pemex) sigue en caída libre. La petrolera estatal de México ha duplicado sus pérdidas en el primer semestre de 2015, según consta en sus resultados de la primera mitad del año. Los directivos de la compañía han atribuido esta mala racha a la caída del precio del barril de petróleo, la fortaleza del dólar estadounidense con respecto al peso mexicano, así como al exceso de abasto de crudo en el mundo.
El difícil panorama de la industria petrolera mundial no ha dado tregua a la firma mexicana desde que comenzó, hace un año, el descenso del valor del barril de crudo. “Es un periodo complicado que va a durar varios años de precios bajos en estos niveles, incluso un poco más bajos, con mucha volatilidad. Tenemos que ser muy prudentes en cómo ejecutamos nuestro presupuesto y cómo planeamos nuestro proyecto de inversiones”, ha dicho a los inversionistas Mario Beauregard, director de Finanzas de la petrolera.
Pemex perdió durante los primeros seis meses del año 185.176 millones de pesos (11.431 millones de dólares), un 109% más que en el mismo periodo del año pasado cuando la firma registró pérdidas por 88.249 millones de pesos (5.447 millones de dólares). El cierre del 2014 tampoco fue optimista, la petrolera sufrió pérdidas por 263.820 millones de pesos (17.925 millones de dólares). La empresa se encuentra en un proceso de transformación resultado de la reforma energética de 2013, pero todavía no refleja un regreso a la cifras positivas.
Al entorno adverso del mercado petrolero se han sumado la depreciación del peso mexicano frente al dólar estadounidense. Las ventas en el primer semestre de 2015 fueron de 588.362 millones de pesos (36.108 millones de dólares), un 28% menos al mismo periodo del año anterior. Beauregard ha explicado que este desplome es en buena parte por la fortaleza de la moneda estadounidense respecto a la nacional. Además, durante los primeros seis meses del 2014 el barril de crudo se vendía en 94,75 dólares y este año su coste promedio fue de 49,70 dólares.
La producción de crudo también se encuentra en sus días más bajos. Pemex ha registrado 2,2 millones de barriles diarios de petróleo, ya muy lejos de los 3,5 millones de barriles diarios que en 2004 alcanzó como récord la petrolera estatal. La compañía ha señalado que parte de la caída de la producción se debe al accidente de la plataforma Abkantun A, en abril pasado, que resultó en la pérdida del 8,4% del crudo ligero que se obtiene en el Golfo de México. Pemex anunció en junio el hallazgo de cuatro campos petrolíferos que se espera sumen 200.000 barriles de petróleo en los próximo años, mientras la reforma energética despega.
Retrasan la subasta de yacimientos en aguas profundas
El Gobierno mexicano ha pospuesto el anuncio de la cuarta licitación de la Ronda Uno para ofrecer yacimientos en aguas profundas a las petroleras privadas. El ministro de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, ha reconocido en la televisión mexicana que será hasta septiembre cuando las autoridades energéticas desvelen las condiciones para invertir en las aguas profundas del Golfo de México. Estaba previsto que la cuarta oferta se anunciase en esta semana.
El ministro de Energía ha reconocido que tras los pobres resultados de la primera licitación, el Gobierno mexicano tendrá que revisar las condiciones con las que entrega los contratos, así como los procedimientos para el concurso de asignación. En la primera subasta solo dos de 14 contratos fueron asignados y en el proceso al menos seis propuestas fueron rechazadas por no superar las expectativas del Estado mexicano.