Alimentación, cine y medicina, ejes del nuevo parque de Zona Franca

Si la industria automovilística hizo pivotar el desarrollo del polígono de la Zona Franca a partir de mediados del siglo XX, ahora será la industria del conocimiento y la tecnología la que transformará el territorio creado en 1916 como depósito franco. La primera pieza de ese cambio serán las 50 hectáreas que ocupó la Seat, de donde han desaparecido ya buena parte de las naves.

Barcelona Zona de Innovación (BZ), nombre del nuevo parque, se centrará, de momento, en tres sectores: el alimentario, el tecnológico -en el campo de la medicina -y el cultural, que impulsará la producción audiov...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Si la industria automovilística hizo pivotar el desarrollo del polígono de la Zona Franca a partir de mediados del siglo XX, ahora será la industria del conocimiento y la tecnología la que transformará el territorio creado en 1916 como depósito franco. La primera pieza de ese cambio serán las 50 hectáreas que ocupó la Seat, de donde han desaparecido ya buena parte de las naves.

Barcelona Zona de Innovación (BZ), nombre del nuevo parque, se centrará, de momento, en tres sectores: el alimentario, el tecnológico -en el campo de la medicina -y el cultural, que impulsará la producción audiovisual.

Será una conversión a largo plazo -entre 10 y 20 años de horizonte- que pretende crear 20.000 empleos y un número aproximado de 400 empresas, de acuerdo con las previsiones que ayer expusieron el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, y el delegado de la Zona Franca, Manuel Royes, ante buena parte de las instituciones y empresas que se han aliado en el proyecto y han firmado convenios: entre otras, Mercabarna, el hospital Clínico, la Universidad de Barcelona y diversas productoras del sector audiovisual, como RBA, Gestmusic-Endemol, Benecé y Lavínia.

Las primeras en funcionar serán cuatro empresas del sector alimentario, en 2012. El arranque de BZ empezará por la urbanización y la definición de los espacios, un proceso en el que se planteará una modificación urbanística para aumentar la edificabilidad. En opinión de Hereu, BZ no hará competencia al 22@, sino que será complementario. Y puso como ejemplo la necesidad de más terreno para las producciones audiovisuales. "Barcelona tiene que recuperar parte de la industria del cine y de producción que se ha ido a Madrid, y la Zona Franca es un buen sitio", señaló.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En