La Diputación de Málaga quita los honores a los franquistas

El Pleno de la Diputación de Málaga aprobó ayer, con los votos de PSOE e IU, retirar todos los honores y condecoraciones otorgadas por el organismo supramunicipal entre 1937 -año de entrada del ejército franquista en la provincia- y 1975. La moción, que supone quitar, entre otras distinciones, la presidencia de honor de la Diputación al dictador Francisco Franco, contó con el rechazo del PP, cuyos diputados se ausentaron del salón de plenos durante la votación.

La retirada de honores afecta a autoridades franquistas ya fallecidas excepto en un caso, el del ex ministro malagueño José Utr...

El Pleno de la Diputación de Málaga aprobó ayer, con los votos de PSOE e IU, retirar todos los honores y condecoraciones otorgadas por el organismo supramunicipal entre 1937 -año de entrada del ejército franquista en la provincia- y 1975. La moción, que supone quitar, entre otras distinciones, la presidencia de honor de la Diputación al dictador Francisco Franco, contó con el rechazo del PP, cuyos diputados se ausentaron del salón de plenos durante la votación.

La retirada de honores afecta a autoridades franquistas ya fallecidas excepto en un caso, el del ex ministro malagueño José Utrera Molina, de 82 años, que ocupó la cartera de Vivienda entre 1973 y 1974 y la de Secretario General del Movimiento entre 1974 y 1975. El portavoz del PP en la Diputación malagueña, Francisco Salado, aseguró que con esta iniciativa "se contribuye a reabrir las heridas y promover el enfrentamiento y la confrontación social", y añadió que "no se pude comparar la figura de Utrera Molina con la de un dictador".

Por su parte, el presidente del organismo provincial, Salvador Pendón (PSOE), afirmó que "la democracia debe servir para ver que los honores y distinciones otorgados durante un régimen dictatorial no deben seguir siendo válidos ahora". Los populares habían propuesto crear un grupo de expertos que analizase los expedientes uno por uno con el fin de ver por qué méritos se concedieron esos reconocimientos. El abogado falangista Utrera Molina ya vio el pasado junio cómo el Ayuntamiento de Sevilla cambiaba la denominación de una avenida que le fue dedicada en 1970.