Un falso médico ejerció en Huelva durante 10 meses

Poseer un título de medicina presuntamente falso y estar siendo investigado por ello en los juzgados de Cáceres no fue obstáculo para que Juan Carlos Cofrades Santillana, antiguo mentalista y adivino extremeño, ejerciera como médico en el centro de salud de Hinojales (400 habitantes, Huelva) durante los últimos 10 meses. La delegada de Salud en Huelva, María José Rico, justificaban ayer "la absoluta apariencia de legalidad del título, homologado por el Ministerio de Educación", pero algunos vecinos de la localidad se quejaban ayer de haber dejado "su salud en manos de un farsante".

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Poseer un título de medicina presuntamente falso y estar siendo investigado por ello en los juzgados de Cáceres no fue obstáculo para que Juan Carlos Cofrades Santillana, antiguo mentalista y adivino extremeño, ejerciera como médico en el centro de salud de Hinojales (400 habitantes, Huelva) durante los últimos 10 meses. La delegada de Salud en Huelva, María José Rico, justificaban ayer "la absoluta apariencia de legalidad del título, homologado por el Ministerio de Educación", pero algunos vecinos de la localidad se quejaban ayer de haber dejado "su salud en manos de un farsante".

El nombre de Cofrades apareció involucrado junto con otras 38 personas en una trama de títulos falsos e intrusismo profesional el pasado 22 de octubre. Al día siguiente, la delegación de Salud pidió explicaciones al presunto facultativo, que decidió dejar el puesto "voluntariamente". El caso es que sobre Cofrades pesaba una denuncia de la fiscalía de Cáceres desde el 27 de abril de 2007. En el escrito de la fiscalía quedaba ya de manifiesto que desde la Universidad San Martín de Porres de Lima, que presuntamente había expedido el título de Cofrades, no sabían nada de él. Los responsables del centro peruano han informado de que "no sólo que no existe el título alguno registrado a nombre de Juan Carlos Cofrades Santillana, sino que el título justificativo de la titulación ha sido alterado". Ese mismo mes, Cofrades había sido despedido de la residencia de mayores en la que trabajaba en Villanueva de los Barros (Badajoz) porque los responsables del centro fueron informados de la investigación judicial.

Los vecinos critican que su salud estuviera en manos de un "farsante"

Cofrades, que se declara víctima de una estafa y no el culpable, llevaba ejerciendo en Huelva desde enero de 2008. En total, fueron 10 meses en los que una media de 30 pacientes diarios acudían a su consulta en la sierra onubense. "Se ha duplicado el número de vecinos en el centro. Quieren saber si el falso médico les recetó mal o qué", reconocía ayer el médico sustituto, José María Vidal, desde el consultorio de Hinojales.

El presunto facultativo cacereño de 40 años se declara inocente y se considera médico. El 23 de octubre declaró en rueda de prensa que había cursado la licenciatura de medicina durante ocho años. Pero que lo hizo a distancia, en la Universidad San Martín de Porres de Perú. "Desde 1994 hasta 2002 he estado estudiando medicina en la universidad de Perú, pero lo hacía desde España, a través de una academia de Málaga", afirmó. Esta academia malagueña es, según el abogado de Cofrades, Ángel Luis Aparicio, la culpable de todo. El letrado explicaba ayer desde Cáceres que "la titulación es claramente falsa", pero que Cofrades no es el estafador "sino la víctima de la trama estafadora" en la que estarían implicados miembros de la Universidad de San Martín de Porres en Perú y un mediador en Málaga, José Lozano, que se encargó de recibir hasta 24.000 euros por las gestiones burocráticas. El letrado incluso señala a "intermediarios corruptos" dentro del Ministerio de Educación -encargado de homologar el título- y de los consulados de Lima en España y de España en Perú.

La Delegación de Salud de Huelva, dado el revuelo, envió ayer un escrito a la Fiscalía Provincial para que investigue a Cofrades. Por su parte, el alcalde de Hinojales, José Antonio Triano (Partido Andalucista), no tiene muchas quejas sobre el supuesto facultativo. Señala que una vez acudió a su consulta y le detectó una alergia, aunque reconoce que había gente que no estaba conforme con él. Los vecinos de Hinojales se explican ahora por qué. "Yo le notaba como demasiado cercano. Se reía mucho, se acercaba", relata María Remedios Triana, de 30 años. Y se hace una pregunta: "¿Cómo es posible que alguien pueda pasarse por médico sin serlo? Alguien tendrá que explicárnoslo, ¿no?".