El PP prepara la ruptura con UPN, pero espera a su voto final

Los populares creen que Sanz tomó una "decisión estratégica"

El PP ha asumido que la nueva línea de UPN de distanciamiento de los populares es una "decisión estratégica" impulsada por el presidente navarro, Miguel Sanz, y respaldada por más del 90% de la organización. Así lo dejó claro Sanz en la Cadena SER -negó que el PSOE le haya presionado y criticó la "política de trincheras" del PP- y así quedó en evidencia en la reunión del Comité Ejecutivo popular, donde se analizó una crisis causada por la decisión de UPN de abstenerse en la votación de los Presupuestos, que amenaza con romper definitivamente el acuerdo entre ambos partidos, vigente desde 1991....

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El PP ha asumido que la nueva línea de UPN de distanciamiento de los populares es una "decisión estratégica" impulsada por el presidente navarro, Miguel Sanz, y respaldada por más del 90% de la organización. Así lo dejó claro Sanz en la Cadena SER -negó que el PSOE le haya presionado y criticó la "política de trincheras" del PP- y así quedó en evidencia en la reunión del Comité Ejecutivo popular, donde se analizó una crisis causada por la decisión de UPN de abstenerse en la votación de los Presupuestos, que amenaza con romper definitivamente el acuerdo entre ambos partidos, vigente desde 1991.

Fue Antonio Basagoiti, líder del PP vasco, quien se encargó de dejar claro que, en su opinión, Sanz no ha tomado una decisión sólo sobre los Presupuestos, sino que lo que quiere es distanciarse del PP porque cree que la cercanía de los últimos años y el durísimo discurso sobre la supuesta amenaza socialista a la soberanía de Navarra ha sido perjudicial para sus intereses electorales.

Nadie contradijo a Basagoiti, por lo que la tesis quedó asumida. En la reunión se produjo un momento muy extraño, según varios de los presentes. Santiago Cervera, uno de los dos diputados de UPN, cabeza de lista en las generales y ahora enfrentado con Sanz, es miembro del Comité Ejecutivo en virtud del acuerdo con su partido. También está en la dirección del grupo parlamentario. Ayer acudió a la reunión y, a pesar de que él está en contra de la decisión de su partido, tuvo que dar cuenta de ella.

Leyó la resolución de UPN y comentó, delante de Rajoy y todos los demás dirigentes del PP, que él se sentía "personal y políticamente incómodo" con la decisión de su partido. Entonces decidió que tenía que abandonar la reunión para dejar que el PP debatiera. Pero antes de irse, sentenció de forma dramática: "Estaré a la altura de lo que se espera de mí". Todos interpretaron que estaba anunciando que romperá la disciplina del partido y votará con el PP, por lo que Cervera se llevó un espontáneo y prolongado aplauso de los populares.

El PP avanzó ayer un poco más en el camino de la ruptura definitiva con UPN. La mayoría de los dirigentes cree que no hay nada que hacer. "Esto es la ruptura", sentenciaba en los pasillos Esperanza Aguirre, la presidenta de Madrid. Sin embargo, Rajoy, muy preocupado, según su entorno, por un asunto que rompe un eje de su estrategia -Navarra y la unidad de España están en la base de su discurso- quiere apurar los plazos. Por eso, el líder del PP se negó en varias ocasiones a responder sobre esta cuestión -hizo varios desplantes a los periodistas que le preguntaron- y se limitó a decir que él "quiere un acuerdo" y por eso ha pedido a UPN que reconsidere.

El PP emitió una nota similar a la del sábado, en la que señala que el acuerdo está "en serio peligro" y sentencia que "la falta de apoyo a la enmienda a la totalidad del PP [que se vota el 23] provocaría la ruptura unilateral del acuerdo por parte de UPN". La cuenta atrás para la reaparición del PP navarro ha comenzado.

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Uno y uno

Quedan aún 10 largos días para intentar negociaciones de última hora, pero todo parece indicar que el voto de UPN se partirá en dos. Uno de los diputados, Santiago Cervera, desobedecerá a su partido, y el otro, Carlos Salvador, será disciplinado. Por tanto, el pacto quedará oficialmente roto, porque basta que uno no apoye al PP para considerar que se ha incumplido el acuerdo.

Salvador señaló ayer a Europa Press que él acatará la abstención ordenada por su partido -aunque en la reunión de UPN se abstuvo al votar la resolución- y planteó que el PP "tiene que saber" que si su formación no goza de mayoría absoluta en el Parlamento navarro, "es lógico que el PSN presione".

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