Petronor ve cuestionada su legalidad
Un informe del consistorio de Muskiz dice que carece de los permisos para operar
Un informe encargado por el Ayuntamiento de Muskiz asegura que Petronor, una de las diez empresas en Vizcaya que paga más impuestos a la Hacienda, funciona sin licencia de actividad desde hace más de 30 años ni tiene los permisos para las ampliaciones de la factoría acometidas desde 1989 y también carece de la autorización de vertidos.
El estudio, elaborado por una consultora ambiental, señala que el único permiso de la refinería, que funciona desde 1972, es el decreto de su creación firmado en 1968 por la dictadura. Petronor rechazó valorar este estudio porque "no tenemos interés" de p...
Un informe encargado por el Ayuntamiento de Muskiz asegura que Petronor, una de las diez empresas en Vizcaya que paga más impuestos a la Hacienda, funciona sin licencia de actividad desde hace más de 30 años ni tiene los permisos para las ampliaciones de la factoría acometidas desde 1989 y también carece de la autorización de vertidos.
Las ampliaciones de la planta no han tenido licencias, según el informe
El estudio, elaborado por una consultora ambiental, señala que el único permiso de la refinería, que funciona desde 1972, es el decreto de su creación firmado en 1968 por la dictadura. Petronor rechazó valorar este estudio porque "no tenemos interés" de polemizar y se remitió a la llamada autorización ambiental, el nuevo requisito de la UE para las empresas más contaminantes que centralice todos los permisos en uno y que debe ser emitido por el Gobierno. "Eso es lo que dirá cómo están las cosas [en la refinería]", expresó un portavoz.
Precisamente, la tramitación de este nuevo permiso (que debe cumplimentarse por un total de 284 empresas en el País Vasco) es la que llevó al consistorio a asesorarse sobre la actividad de Petronor. El informe, elaborado el pasado 10 de marzo por la consultora madrileña Sámara, concluye que "no hay constancia" de que la refinería disponga de "autorización alguna para su puesta en funcionamiento", salvo el decreto del franquismo.
El estudio indica que no hay licencia de actividad ni de las ampliaciones acometidas desde 1976 y que no constan los permisos para los grandes cambios realizados entre 1989 y 1999, con seis nuevas instalaciones como plantas de cogeneración, producción de gasolina o tratamiento de queroseno. La consultora explica que la refinería tuvo un permiso de vertido de aguas residuales en 1999 para un plazo de cuatro años pero que "no ha sido renovado" y que también carece de una autorización de vertidos al mar, que realiza desde 1999 para reducir las afecciones a la playa de La Arena, ubicada junto a la planta. Llama la atención este dato, cuando la viceconsejería de Medio Ambiente retrasó ese proyecto de verter al mar hasta dos años para que tuviera más controles.
El informe de la consultora, basado en la documentación presentada por Petronor para la autorización ambiental integrada, revela que la refinería tiene, en materia de contaminación atmosférica, un "régimen confuso de emisiones, omite datos y no se refiere a los nuevos niveles legales que son de aplicación desde este mismo año".
Agrega que el Departamento de Medio Ambiente solicitó datos sobre las emisiones y que Petronor respondió que el último control fue en 2001 y que la empresa estaba ahora verificando los sistemas de medición. El informe califica de "sorprendente" que las ampliaciones de las instalaciones de Petronor no hayan sido sometidas a evaluación de impacto ambiental, desde que en 1988 entró en vigor la legislación de informes de impacto. Por todo ello, pide una revisión conjunta del funcionamiento, con la elaboración de una evaluación de impacto, y que incluso debe "considerarse" el traslado de la instalación.
Petronor aporta un tercio del presupuesto municipal de Muskiz en impuestos (2,3 de los poco más de 7 millones) y sólo por el impuesto de sociedades (paga también por impuestos especiales, IVA y el IRPF de sus cerca de 880 trabajadores de plantilla) abonó 95 millones a la Hacienda vizcaína en 2006.
El alcalde insta a "cumplir la ley"
El informe de la consultora ha servido de fundamento a las alegaciones del Ayuntamiento de Muskiz contra la autorización ambiental, en las que pide su denegación e incluso plantea al Departamento de Medio Ambiente que establezca las medidas para "el fin progresivo de la explotación de la refinería en el municipio y la progresiva puesta de sus instalaciones en situación fuera de servicio". Un giro drástico en la postura del ayuntamiento, explicada por el cambio de alcaldía, históricamente en manos del PNV y ahora en EA.
El alcalde Gonzalo Riancho (EA), quien ha tenido que recibir al comité de empresa por la mención al cierre, afirmó ayer que no pretende la clausura, "porque aporta negocio a todo el pueblo" pero sí "queremos que todos los vecinos, y Petronor es uno de ellos, cumplan la ley".
El alcalde, quien asegura que Petronor dispondrá del demoledor informe "porque dimos una copia al comité y me imagino que se lo habrán dado", señala que ahora es el Gobierno vasco el que deberá dilucidar si la refinería cumple la ley. Medio Ambiente, el departamento que debe validar o no la autorización ambiental, está dirigida por EA, el partido al que pertenece Riancho.
Luis María Sebastián, el secretario general del comité de empresa de Petronor, cree que es "muy raro" lo que está pasando, en referencia a que el ayuntamiento se enfrente tan radicalmente a una de las mayores empresas de Vizcaya. Los trabajadores se han reunido con la dirección, "y nos han dicho que tienen todo en regla", aunque Sebastián apuntó que no les habían presentado ninguna documentación sobre las licencias que aparecen en el informe.
El comité ha solicitado una reunión con la viceconsejería de Medio Ambiente, dado que "alguna de las partes, Petronor o el ayuntamiento, está modificando la realidad".
El consistorio de Muskiz está complicando también el proyecto de una planta de coque pretende implantar Petronor y ha anulado todas las licencias previas aprobadas, incluso las que autorizó la anterior corporación.