Blindaje pionero a una escolar acosada
Un juzgado de Alicante decreta el alejamiento de los agresores y cursos sobre sexualidad
Su jornada lectiva y extraescolar eran un verdadero calvario. Dos de sus compañeros del instituto Miguel Hernández en Alicante, la acosaban de manera sistemática en clase, en el recreo e incluso fuera del centro. Estos alumnos la sometían a un "constante trato vejatorio", del que ahora el juez la ha liberado al decretar una serie de novedosas medidas protectoras, que incluyen el alejamiento de los acosadores.
La Fiscalía de Menores abrió diligencias a raíz de la denuncia presentada por los padres de la víctima, una niña de 14 años, el pasado 30 de mayo por un supuesto trato degradante, ...
Su jornada lectiva y extraescolar eran un verdadero calvario. Dos de sus compañeros del instituto Miguel Hernández en Alicante, la acosaban de manera sistemática en clase, en el recreo e incluso fuera del centro. Estos alumnos la sometían a un "constante trato vejatorio", del que ahora el juez la ha liberado al decretar una serie de novedosas medidas protectoras, que incluyen el alejamiento de los acosadores.
La Fiscalía de Menores abrió diligencias a raíz de la denuncia presentada por los padres de la víctima, una niña de 14 años, el pasado 30 de mayo por un supuesto trato degradante, que incluía insultos, amenazas y tocamientos obscenos por parte de los acosadores a la escolar. Tras analizar el caso y escuchar a las partes implicadas, se han adoptado medidas cautelares de protección que son pioneras en España.
Entre esas iniciativas, el ministerio público decretó la libertad vigilada de los dos supuestos acosadores, una orden de alejamiento a la menor a menos de 300 metros y la asistencia de los niños a un curso de orientación sexual. Ese mismo día, según confirmaron ayer fuentes del Tribunal Superior de Justicia Valenciano, se completó la iniciativa de la Fiscalía con un auto de medidas cautelares para preservar la integridad de la alumna.
Respecto a uno de los niños denunciados, el juez decretó su libertad vigilada, la asistencia a un curso de orientación sexual, una orden de alejamiento a 300 metros fuera del recinto escolar y también otra orden de prohibición de acercamiento de los acosadores dentro del recinto educativo, cuyo cumplimiento delegó en la dirección del centro. Respecto al segundo alumno denunciado, el juez acordó idénticas medidas, más el cambio de aula, ya que hasta ese momento este menor y la víctima estudiaban en la misma clase. El cumplimiento de todas medidas se ejecutará bajo la tutela del juzgado, mientras el curso de orientación sexual deberá ser impartido por la Consejería de Bienestar Social del Gobierno Valenciano en las fechas que este departamento considere oportuno, preferentemente en el periodo vacacional.
Fuentes judiciales señalaron que la batería de medidas cautelares de protección "no tienen relación alguna" con los protocolos habituales de los casos de las víctimas de maltrato o de violencia machista. La escolar no llevará un móvil para avisar a la policía ni tendrá vigilancia expresa.
Ni la dirección del instituto ni la Consejería de Educación accedieron ayer a comentar la resolución judicial. El juzgado número 1 de Menores de Alicante, a propuesta de la Fiscalía, acordó esta pionera batería de medidas cautelares para proteger a esta escolar de sus compañeros y garantizar así su integridad.