Un juzgado condena a Repsol por vulnerar la dignidad de un trabajador

Un juzgado de Bilbao ha condenado a Repsol a reintegrar en su plantilla a un trabajador de su planta de distribución en Santurtzi por cesión ilegal de mano de obra. El empleado sufrió además, según otra sentencia, una "vulneración de la consideración debida a su dignidad", al crear la empresa un "entorno hostil, humillante y ofensivo".

Este caso, que ha pasado por dos juzgados de lo Social con sendos fallos favorables al trabajador, comenzó en 2005, cuando O.O.L.L. denunció su situación laboral a la Inspección de Trabajo. Realizaba funciones de carretillero desde 2001 tras haber sido c...

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Un juzgado de Bilbao ha condenado a Repsol a reintegrar en su plantilla a un trabajador de su planta de distribución en Santurtzi por cesión ilegal de mano de obra. El empleado sufrió además, según otra sentencia, una "vulneración de la consideración debida a su dignidad", al crear la empresa un "entorno hostil, humillante y ofensivo".

Este caso, que ha pasado por dos juzgados de lo Social con sendos fallos favorables al trabajador, comenzó en 2005, cuando O.O.L.L. denunció su situación laboral a la Inspección de Trabajo. Realizaba funciones de carretillero desde 2001 tras haber sido contratado por la empresa Budecar, pero trabajaba en la factoría de Santurtzi de Repsol Butano bajo la organización de ésta y recibía órdenes de sus mandos. La Inspección reconoció que había una cesión ilegal y sancionó a la petrolera con 12.000 euros.

Esta actuación complicó la situación de O.O.L.L, quien fue primero trasladado a Huelva y luego quedó sin cometido en su trabajo en Santurtzi, lo que motivó otra sanción de la Inspección, esta vez por falta "muy grave", por un importe de 15.000 euros.

Ambas sentencias, dictadas en enero y noviembre pasados, consideran que el verdadero empleador era Repsol Butano, a la que se obliga a reincorporarlo a su plantilla. El trabajador, de baja por depresión desde hace un año, aún no ha recibido ninguna notificación de la firma. UGT, que ha tramitado las denuncias, calificó la actitud de Repsol de "cacería falta de ética".

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