MIRADOR

La enfermedad de Fidel

Casi cinco meses han transcurrido desde la "gravísima" -en palabras del médico español José Luis García Sabrido- operación intestinal a la que fue sometido. Desde entonces, fotos con Chávez y un periodista y político argentino; otra exhibiendo un ejemplar del día del periódico Granma, y, por último, un vídeo en el que el ilustre enfermo camina titubeante por la habitación. La enfermedad de Castro es el secreto mejor guardado por las autoridades de La Habana. La opacidad es completa. No asistió a los actos conmemorativos de su cumpleaños, tampoco a la parada militar de homenaje ni a la ú...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Casi cinco meses han transcurrido desde la "gravísima" -en palabras del médico español José Luis García Sabrido- operación intestinal a la que fue sometido. Desde entonces, fotos con Chávez y un periodista y político argentino; otra exhibiendo un ejemplar del día del periódico Granma, y, por último, un vídeo en el que el ilustre enfermo camina titubeante por la habitación. La enfermedad de Castro es el secreto mejor guardado por las autoridades de La Habana. La opacidad es completa. No asistió a los actos conmemorativos de su cumpleaños, tampoco a la parada militar de homenaje ni a la última reunión de la Asamblea Popular celebrada la semana pasada. Su silla permaneció vacía; su hermano Raúl, que le sustituye provisionalmente desde el pasado 31 de julio, no hizo ni una sola mención a la enfermedad. Días antes, la CIA aseguraba que Castro tenía cáncer, sin especificar de qué, y que su muerte era cuestión de pocos meses.

Ahora, sin embargo, el doctor García Sabrido, jefe de cirugía del hospital público madrileño Gregorio Marañón, afirma que el dictador "no padece ninguna enfermedad maligna" y que pasa por un proceso de recuperación "lento pero progresivo". García Sabrido, experto en tumores digestivos, viajó a La Habana la semana pasada a petición de las autoridades de la isla para examinar a Fidel. Es la primera vez que lo hacía, aunque ha estado ya en diversas ocasiones en Cuba participando en seminarios. El facultativo español -llama la atención la locuacidad que ha tenido al regreso del viaje- ha declarado que, a sus 80 años, el líder cubano muestra "una actividad intelectual excelente y fantástica". ¿Dónde estará la verdad? Probablemente, en el término medio.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En