Venezuela y Guatemala renuncian a entrar en el Consejo de la ONU
Ambos países se comprometen a apoyar la candidatura de Panamá
Los ministros de Asuntos Exteriores de Guatemala, Gert Rosenthal, y de Venezuela, Nicolás Maduro, acordaron ayer retirar sus candidaturas a un asiento no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU y presentar a Panamá como candidato de consenso. La decisión fue tomada después de que ninguno de los dos países lograra la mayoría necesaria en 47 rondas de votación.
El anuncio fue realizado anoche por el embajador de Ecuador ante la ONU, Diego Cordovez, que auspició las conversaciones entre ambos ministros en calidad de presidente saliente del Grupo de Países de Latinoamérica y el Cari...
Los ministros de Asuntos Exteriores de Guatemala, Gert Rosenthal, y de Venezuela, Nicolás Maduro, acordaron ayer retirar sus candidaturas a un asiento no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU y presentar a Panamá como candidato de consenso. La decisión fue tomada después de que ninguno de los dos países lograra la mayoría necesaria en 47 rondas de votación.
El anuncio fue realizado anoche por el embajador de Ecuador ante la ONU, Diego Cordovez, que auspició las conversaciones entre ambos ministros en calidad de presidente saliente del Grupo de Países de Latinoamérica y el Caribe de la ONU.
Mañana los dos cancilleres se reunirán con los 35 embajadores latinoamericanos, a quienes propondrán que sea Panamá el que ocupe, en el bienio 2007-2008, uno de los dos asientos no permanentes que corresponden a América Latina en el Consejo de Seguridad. En concreto, se trata de reemplazar a Argentina, que deja la silla vacante en próximo 31 de diciembre. El otro asiento lo ocupará Perú hasta diciembre de 2007. El grupo latinoamericano deberá respaldar la propuesta antes de someterla a votación en la Asamblea General. Pero lo más probable es que el acuerdo alcanzado por Maduro y Rosenthal no encuentra ningún obstáculo.
A lo largo de 47 consultas realizadas a la Asamblea General, Guatemala, que contaba con el apoyo de Estados Unidos y la Unión Europea, superó a Venezuela en unos 25 votos, pero no pudo ocupar el asiento al no lograr el respaldo de los dos tercios necesarios de la Asamblea, formada por 192 miembros.
Venezuela, por su parte, había tomado la votación como un capítulo más en su guerra particular con Estados Unidos e invirtió una verdadera fortuna para asegurarse el mayor número de apoyos posible.