Cartas al director

Sus nombres

Me sumo a la iniciativa publicada en forma de columna por Soledad Gallego-Díaz en las páginas del viernes 16 de junio. Yo también quiero sus nombres. Creo que empieza a llegar el momento en que son ellos los que tienen que esconderse. No puede ser un delito aliviar a una persona el tránsito de la vida a la muerte. Vivimos en un Estado laico en el cual todo el mundo tiene derecho a tener sus creencias, pero no a imponerlas a nadie. Esos médicos imponen sus creencias aprovechando el poder que les da su posición en el sistema sanitario, en una situación en la que la familia está indefensa y vivie...

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Me sumo a la iniciativa publicada en forma de columna por Soledad Gallego-Díaz en las páginas del viernes 16 de junio. Yo también quiero sus nombres. Creo que empieza a llegar el momento en que son ellos los que tienen que esconderse. No puede ser un delito aliviar a una persona el tránsito de la vida a la muerte. Vivimos en un Estado laico en el cual todo el mundo tiene derecho a tener sus creencias, pero no a imponerlas a nadie. Esos médicos imponen sus creencias aprovechando el poder que les da su posición en el sistema sanitario, en una situación en la que la familia está indefensa y viviendo una trágica situación que sólo puede acabar de una manera. Y deciden que una persona tiene que morir lentamente, sufriendo, agonizando delante de sus familiares porque su dios así lo ha decidido.

No quiero que sea uno de ellos el que tenga que decidir sobre mi vida o sobre la de mis seres más queridos. Me da pánico pensarlo. Sus nombres, por favor.

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