El general propuesto para dirigir la CIA defiende las escuchas

Demócratas y republicanos exigen un mayor control sobre la recogida de datos telefónicos

"Todo lo que ha hecho la Agencia Nacional de Seguridad [NSA] ha sido legal, y de ello han sido informados determinados congresistas. El único objetivo es defender la seguridad y la libertad de los estadounidenses". El general Michael Hayden se defendió ayer como pudo de la última tormenta que agita la vapuleada nave de la Casa Blanca, la revelación de que la NSA no sólo ha intervenido llamadas internacionales supuestamente sospechosas, sino que ha acumulado millones de datos telefónicos.

Hayden mantuvo ayer su programa de entrevistas con senadores para allanar el camino de su confirmaci...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

"Todo lo que ha hecho la Agencia Nacional de Seguridad [NSA] ha sido legal, y de ello han sido informados determinados congresistas. El único objetivo es defender la seguridad y la libertad de los estadounidenses". El general Michael Hayden se defendió ayer como pudo de la última tormenta que agita la vapuleada nave de la Casa Blanca, la revelación de que la NSA no sólo ha intervenido llamadas internacionales supuestamente sospechosas, sino que ha acumulado millones de datos telefónicos.

Hayden mantuvo ayer su programa de entrevistas con senadores para allanar el camino de su confirmación como director de la CIA. No son sólo los demócratas los que han puesto el grito en el cielo -"¿es que ahora resulta que decenas de millones de norteamericanos están involucrados con Al Qaeda?", clamó Patrick Leahy ante la revelación del diario USA Today-, sino un notable número de republicanos, que temen que este Gobierno haya perdido el juicio también en el capítulo de las escuchas electrónicas y se pase de la raya en la violación de la intimidad y de las normas establecidas sobre las escuchas electrónicas. "Hay que perseguir con energía y vigor a los terroristas", dijo la senadora Susan Collins tras entrevistarse con Hayden, "pero el Gobierno tiene que ser franco con el Congreso sobre las escuchas para que podamos controlar estos programas y garantizar su legalidad".

El portavoz de la Casa Blanca no tuvo más remedio que intervenir en el debate, igual que Bush hizo el jueves. "Estamos al 100% con Michael Hayden", dijo Tony Snow. Falta le va a hacer, porque las sesiones sobre su nominación van a convertirse en el gran debate nacional sobre las escuchas, su legalidad y la autoridad constitucional que la Casa Blanca reclama para el presidente. "No hay escuchas de llamadas dentro de Estados Unidos sin permiso judicial", aseguró Bush el jueves, aunque su credibilidad ha conocido días mejores: ayer registró un nuevo récord negativo en un sondeo de The Wall Street Journal, en el que obtuvo un 29% de respaldo a su gestión.

Actividades sospechosas

El republicano Wayne Allard insistió en que la NSA usa las bases de datos para analizar modelos de perfiles telefónicos y detectar actividades sospechosas, no para averiguar el contenido de las conversaciones. Pero hay pocos oídos comprensivos, incluso entre las filas republicanas. "No tengo ninguna certeza sobre la necesidad de que tengan esa información", desconfió John Boehner, líder de la mayoría en la Cámara.

Los demócratas han pedido un investigador especial de las actividades de la NSA. Arlen Specter, republicano y presidente del Comité Judicial, ha anunciado que llamará a declarar a las compañías telefónicas que cedieron los datos de sus clientes a la agencia.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Los congresistas necesitan ajustar bien su artillería, porque la opinión pública no ve las cosas igual que políticos y periodistas: en un sondeo realizado por The Washington Post y la ABC, casi dos terceras partes de los estadounidenses consideran aceptable que la NSA se dedique a almacenar datos telefónicos.

Archivado En