Moderada satisfacción del Gobierno tras el informe sobre verificación del alto el fuego

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, recibió ayer el primer informe del Ministerio del Interior sobre la actividad de ETA tras la declaración de alto el fuego permanente que los terroristas hicieron pública el 22 de marzo. El informe que leyó ayer Zapatero ha sido redactado por el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, con las informaciones aportadas durante los últimos 14 días por los servicios de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía. El Gobierno ha expresado su "satisfacción moderada" ante el primer informe.

El contenido del informe verif...

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, recibió ayer el primer informe del Ministerio del Interior sobre la actividad de ETA tras la declaración de alto el fuego permanente que los terroristas hicieron pública el 22 de marzo. El informe que leyó ayer Zapatero ha sido redactado por el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, con las informaciones aportadas durante los últimos 14 días por los servicios de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía. El Gobierno ha expresado su "satisfacción moderada" ante el primer informe.

El contenido del informe verifica la inactividad de los terroristas, por lo que ha sido recibido con moderada satisfacción, aunque fuentes gubernamentales señalaron ayer que todavía es pronto y que será dentro de un mes, cuando se hayan elaborado otros dos informes, cuando se puedan hacer las primeras evaluaciones precisas de la situación.

Para la elaboración del informe se han analizado aspectos relacionados con la extorsión a empresarios, con las actividades de terrorismo callejero, con la comisión de atentados, movimientos estratégicos de la banda y aprovisionamiento.

Uno a uno, la Guardia Civil y la policía, analizan cada uno de los aspectos que pueden revelar si la banda sigue activa y, uno a uno, han descartado casi al completo la actividad de la banda. Fuentes antiterroristas insisten que el periodo que ha pasado desde la declaración del alto el fuego es demasiado breve como para poder hacer una verificación rigurosa del cese de la actividad entre los terroristas de ETA.

Según el informe que recibió Zapatero, la última actuación conocida de ETA en el plano operativo se produjo horas antes de que entrase en vigor el alto el fuego y fue el robo de una furgoneta en el departamento francés de Cantal. Desde aquel momento, no se han registrado en el País Vasco episodios de violencia callejera, aunque los servicios de seguridad del Estado mantienen algunas dudas sobre el aprovisionamiento de armas y explosivos por parte de los terroristas.

Informes quincenales

El presidente del Gobierno ha condicionado cualquier medida de acercamiento de presos o de diálogo con representantes de la banda terrorista a que haya una verificación correcta de que el alto el fuego permanente es real. El Ministerio del Interior seguirá enviando a la Presidencia del Gobierno un informe quincenal sobre los aspectos relacionados con la actividad terrorista. En la pasada tregua, entre septiembre de 1998 y noviembre de 1999, ETA mantuvo el terrorismo callejero y la extorsión a los empresarios vascos.

Durante aquel periodo, el Gobierno del PP estableció un contacto con ETA en Suiza y adoptó medidas penitenciarias favorables a los presos de la banda terrorista, mediante acercamientos a cárceles del País Vasco o excarcelaciones. Los servicios de Información de la policía y de la Guardia Civil recibieron tras la declaración de alto el fuego del 22 de marzo la instrucción respecto a los puntos esenciales que debían investigar para llevar a cabo una verificación periódica de que el cese de la actividad terrorista era absoluto.