El PSE apoya los presupuestos vascos y abre la puerta a otros pactos con el PNV

El Parlamento vasco aprobó ayer los presupuestos de Euskadi para 2006 gracias al apoyo del PSE-EE, que volvió a votar a favor de unas cuentas presentadas por el Gobierno por primera vez desde que salió de él en 1998. Los presupuestos, de 7.623 millones de euros, tuvieron el rechazo de EHAK y el PP, mientras que Aralar se abstuvo. Los socialistas se opusieron a la partida de 204.000 para ayudar a los familiares de los presos encarcelados fuera del País Vasco, pero afirmaron que el pacto presupuestario con el PNV es la "antesala" de otros acuerdos.

La satisfacción era evidente en el princ...

El Parlamento vasco aprobó ayer los presupuestos de Euskadi para 2006 gracias al apoyo del PSE-EE, que volvió a votar a favor de unas cuentas presentadas por el Gobierno por primera vez desde que salió de él en 1998. Los presupuestos, de 7.623 millones de euros, tuvieron el rechazo de EHAK y el PP, mientras que Aralar se abstuvo. Los socialistas se opusieron a la partida de 204.000 para ayudar a los familiares de los presos encarcelados fuera del País Vasco, pero afirmaron que el pacto presupuestario con el PNV es la "antesala" de otros acuerdos.

La satisfacción era evidente en el principal partido del Gobierno, el PNV, y en la primera formación de la oposición, el PSE. El portavoz socialista, José Antonio Pastor, contextualizó el acuerdo como un cambio de ciclo político que abandona la crispación y avanza hacia el diálogo. Un ciclo que los socialistas esperan consolidar con nuevos acuerdos con el PNV para acabar con el terrorismo, alcanzar la paz y reformar el autogobierno dentro de la Constitución. "Esperamos que sea la antesala de los grandes acuerdos que necesita Euskadi", aseguró Pastor.

El portavoz del PSE argumentó que el apoyo a las cuentas responde a un compromiso con los ciudadanos y no a una "búsqueda de sillones", y apoyó esa tesis con el próximo acuerdo presupuestario con el PP en la Diputación Foral de Álava y quizás también en el Ayuntamiento de Vitoria. "Somos la alternativa a este Gobierno vasco, y para demostrarlo nos hemos comprometido con la ciudadanía", manifestó.

La vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, también admitió que el pacto "puede posibilitar nuevos acuerdos importantes y estratégicos", aunque no precisó en qué temas. Zenarruzabeitia agradeció a Aralar su aportación a la aprobación de las cuentas y le incluyó, junto al PSE, en la lista de partidos con los que ve factible lograr nuevos acuerdos, aunque no excluyó a nadie. La formación de Patxi Zabaleta se abstuvo en la votación del proyecto, pero transaccionó numerosas enmiendas con el tripartito durante su tramitación en comisión.

Familiares de presos

La sesión comenzó con pocas dudas por despejar. Conocido ya el contenido del acuerdo del PSE con el Gobierno y el sentido del voto de los socialistas, sólo quedaba por aclarar cuál sería la cuantía de las ayudas para los familiares de los presos encarcelados fuera de Euskadi, la gran mayoría de ETA. La enmienda parcial del PSE pidiendo la supresión de esa partida fue rechazada, al igual que la del PP, que planteaba lo mismo.

Pero también corrieron igual suerte las de EHAK, que pretendía triplicar su importe, y de Aralar, que proponía incrementarlo en 100.000 euros. Al final, la subvención será de 204.000 euros.

Las cuentas tampoco van a incluir ninguna partida para las asambleas de electos municipales de Euskadi, Navarra y País Vasco francés surgidas del Pacto de Lizarra; ni para la que mantienen el PNV y EA (Udalbide) después de abandonar con la ruptura de la tregua de ETA la Udalbiltza que integraban con Batasuna, ni la de la izquierda abertzale, que mantiene ese nombre. El PNV y EA habían reservado para Udalbide una enmienda con una asignación económica de 631.000 euros, pero que no consiguieron que se aprobara. El PP y el PSE-EE votaron en contra, mientras que EHAK, EB y Aralar se abstuvieron, por lo que fue rechazada. Ninguna de las enmiendas reservadas para el pleno prosperó.

El PP basó su oposición a los presupuestos en que "favorecen al entorno de ETA", y volvió a cargar contra los socialistas. Su portavoz, Antonio Damborenea, explicó el apoyo del PSE a las cuentas como la contraprestación a "un pacto político por el que Zapatero obtiene el visto bueno del PNV a sus Presupuestos en el Congreso". Resaltó, no obstante, que el proyecto es "un calco" del que los mismos socialistas rechazaron hace un año con el argumento de que eran las cuentas del plan Ibarretxe.

Por razones opuestas, la portavoz de EHAK, Itziar Basterrika, criticó al tripartito por entrar "en negocios" con los socialistas en vez de avanzar en la soberanía y en la construcción nacional. Son, dijo, unos presupuestos continuistas que niegan a "Euskal Herria" las modificaciones que necesita en este momento histórico.

En el exterior de la Cámara, Arnaldo Otegi, al frente de una treintena de miembros de la ilegalizada Batasuna, también censuró el pacto presupuestario PNV-PSE. Por su parte, jóvenes de las Nuevas Generaciones del PP protestaron en la calle y lanzaron octavillas en las que acusan al secretario general del PSE, Patxi López, de "reírse de los vascos".