Demandas duras y precisas
La resolución adoptada ayer por el Consejo de Seguridad sobre el atentado terrorista que costó la vida al ex primer ministro libanés Rafik Hariri y otras 22 personas, el 14 de febrero en Beirut, recoge demandas duras y muy precisas para Siria.
En primer lugar, exige la plena cooperación de Damasco con el comité de investigación independiente. En este sentido, afirma que Siria debe detener a los funcionarios o individuos que los investigadores consideren sospechosos de haber participado en la planificación, financiación, organización y ejecución del acto terrorista.
Los sospechoso...
La resolución adoptada ayer por el Consejo de Seguridad sobre el atentado terrorista que costó la vida al ex primer ministro libanés Rafik Hariri y otras 22 personas, el 14 de febrero en Beirut, recoge demandas duras y muy precisas para Siria.
En primer lugar, exige la plena cooperación de Damasco con el comité de investigación independiente. En este sentido, afirma que Siria debe detener a los funcionarios o individuos que los investigadores consideren sospechosos de haber participado en la planificación, financiación, organización y ejecución del acto terrorista.
Los sospechosos, según el texto adoptado ayer, deben ser puestos a disposición del comité. Y en esta línea, la resolución establece que el equipo de Mehlis tendrá la autoridad necesaria para determinar el lugar y las modalidades de los interrogatorios. Además, el Consejo de Seguridad pide a los países miembros que apliquen una prohibición de viajes y la congelación de bienes y activos financieros a los individuos identificados por el comité, así como a las empresas que controlan.
El preámbulo de la resolución también pide al Gobierno libanés que coopere plenamente con la investigación criminal de Mehlis y le preste la mayor asistencia posible. Una petición que se hace extensible a los países vecinos, para que el trabajo del comité pueda dilucidar todos los aspectos del acto terrorista e identificar a los responsables. El Consejo de Seguridad refuerza su compromiso con la unidad y la estabilidad de Líbano. Por eso, advierte de que cualquier interferencia exterior, directa o indirecta, no será tolerada, en referencia a Damasco.
En los primeros borradores, se exigía a Siria que renunciara y se comprometiera a poner fin a cualquier tipo de apoyo al terrorismo y el cese de su asistencia a grupos terroristas. En ese párrafo se pedía al Ejecutivo sirio que demostrara que adopta acciones concretas contra el terrorismo. Pero su inclusión suponía una acusación directa a Siria como país terrorista, por lo que los patrocinadores retiraron el párrafo para evitar el veto de Rusia y China.