Cuatro vigilantes y un policía, heridos en una estación de metro

Cuatro vigilantes del metro de Barcelona y un policía resultaron heridos ayer en la estación de Mercat Nou, de la línea 1, al ser agredidos con piedras y botellas de vidrio por un grupo de jóvenes de "estética okupa", que huyeron cuando la policía hizo varios disparos de intimidación al aire.

La Jefatura Superior de Policía informó de que los cuatro vigilantes sufren contusiones por impacto de piedras y heridas cortantes de vidrios de botellas, mientras que el policía fue mordido por el perro del equipo de seguridad del metro, que se descontroló durante la refriega.

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Cuatro vigilantes del metro de Barcelona y un policía resultaron heridos ayer en la estación de Mercat Nou, de la línea 1, al ser agredidos con piedras y botellas de vidrio por un grupo de jóvenes de "estética okupa", que huyeron cuando la policía hizo varios disparos de intimidación al aire.

La Jefatura Superior de Policía informó de que los cuatro vigilantes sufren contusiones por impacto de piedras y heridas cortantes de vidrios de botellas, mientras que el policía fue mordido por el perro del equipo de seguridad del metro, que se descontroló durante la refriega.

Los hechos ocurrieron sobre la 1.30 horas de ayer, cuando varios vigilantes del metro fueron a la estación de Mercat Nou -una de las pocas de la red de metro a cielo abierto- porque un grupo de grafiteros estaba realizando pintadas en un convoy que se encontraba parado.

Al llegar a la estación, los vigilantes trataron de identificar a los grafiteros, pero un grupo de entre 25 y 30 personas de "estética okupa" comenzaron a lanzarles "piedras de grandes dimensiones, botellas y otros objetos contundentes", según fuentes de la policía. Alertada ésta, acudieron a la estación dos agentes que también fueron atacados por el grupo de jóvenes. Los agentes "efectuaron cuatro disparos al aire con sus armas reglamentarias sin que se produjeran heridos".

El grupo de jóvenes huyó al oír los disparos y al llegar nuevas dotaciones de la policía, sin que se produjeran detenciones en el lugar de los hechos.

Un vigilante sufrió un corte profundo en el brazo derecho causado por una botella de vidrio; otro, un dedo fracturado y varias contusiones por lanzamientos de piedras; el tercero resultó con una fuerte contusión en la cabeza por el impacto de una piedra y un corte en el vientre por cristales, y el cuarto vigilante sufrió un golpe en la cabeza y contusiones en la espalda causadas por los objetos contundentes que le lanzaron.