Nos envenenan
Las alarmas por el abuso en el uso de productos químicos en el sector agrícola están a la orden del día. Parece que hemos asumido como algo habitual la contaminación periódica por herbicidas de las aguas de los embalses. Si el verano pasado fue el embalse de El Dañador, en la comarca jienense del El Condado, este año ha sido el embalse de Iznajar el que se ha visto afectado por contaminación con terbutilazina, un peligroso herbicida.
Por otro lado, dentro de unos meses comenzaran las fumigaciones aéreas en los olivares andaluces, que producen graves efectos sobre el medio ambiente y sob...
Las alarmas por el abuso en el uso de productos químicos en el sector agrícola están a la orden del día. Parece que hemos asumido como algo habitual la contaminación periódica por herbicidas de las aguas de los embalses. Si el verano pasado fue el embalse de El Dañador, en la comarca jienense del El Condado, este año ha sido el embalse de Iznajar el que se ha visto afectado por contaminación con terbutilazina, un peligroso herbicida.
Por otro lado, dentro de unos meses comenzaran las fumigaciones aéreas en los olivares andaluces, que producen graves efectos sobre el medio ambiente y sobre la salud de las personas. Poco a poco nos están envenenando sin darnos opción a conocer el problema ni a defendernos. Nos envenenan a cambio de beneficios económicos para el sector agrícola y para permitir el lucro personal de una minoría. La clase política calla y oculta el problema; para ellos nunca pasa nada, legislan para beneficio de las multinacionales de la química y sólo vienen a recoger su cosecha de votos..